¡¿Me voy a casar?! (Gay/Yaoi)

Capítulo 6

Narra Alex

Bien. Y aquí estamos.

En el día donde mi vida cambiara por completo, donde vivire por un largo tiempo con un ser que no tolero, pero que tampoco conozco en lo más mínimo.

-Joven Alexander Jones, estamos esperando su respuesta- me apuro el cura luego de quedarme congelado en mi sitio mirando a la nada mientras mis manos se encontraban entrelazadas con las de Bradley.

-Amm... bueno yo...

-¡Me opongo!- grito un chico en medio del silencio sorprendiendo a todos mientras corría hacia el altar- Alex, yo te amo.

-Tyler...- lo mire impactado, sonrojandome de inmediato.

-¿Disculpa?- se interpuso Bradley mirándolo amenazante- No permitiré que un renacuajo venga a arruinar mi boda y me deje en ridiculo frente a todo el mundo.

Señaló toda la iglesia repleta de familiares, amigos, paparazzis y alguna que otra fan loca de mi futuro esposo.

-No permitiré que la persona que amo se case con un idiota- vi la intención de Blair de querer golpear a mi amigo así que actúe rápido.

-Tyler, es mejor que te vayas- observe velozmente a los presentes fijandome en lo enojado que se encontraba mi padre y como los paparazzis fotografiaban y grababan cada movimiento- Después hablaremos de esto.

-Pero...

-Por favor- le suplique con voz apagada, viendo como asentía con su cabeza tristemente.

-Está bien- y corriendo desapareció del lugar antes de que los reporteros lo atraparan para interrogarlo.

-Espero que no haya más escenitas como esta, Alexander- el castaño me abrazo fingiendo consolarme, hablando entre dientes.

-Lo lamento, Bradley. No habrá más interrupciones.

-Alexander Jones, acepta como esposo a Bradley Blair para amarlo y respetarlo en la salud, en la enfermedad, en los logros y las derrotas hasta que la muerte los separe.

No creo que pueda aguantar estar a su lado hasta que muera.

-Acepto.

Luego viene todo el procedimiento de los anillos y los votos matrimoniales, los cuales solo se trataban de palabras vacías demostrando el amor que obvio ninguno tiene hacia el otro.

-Por el poder que se me otorga, yo lo declaro esposos. Puede besar al novio- y al terminar esas palabras el mayor se abalanzo hacia mi cubriendo mi rostro con sus brazos dejando sus labios en mi barbilla.

Desde el lado de la audiencia podría verse como si nos estuviéramos besando, pero en la realidad solo es un engaño.

-No esperes un beso mio porque nunca lo tendrás, mocoso- luego de susurrarme esas palabras se separa de mi cuerpo, sonriendo hipócritamente a todos los presentes.

Entrelazo nuestras manos para jalarme hacia la salida, escuchando las felicitaciones de las ingenias almas que creían que estabamos enamorados mientras nos arrojan arroz como si fuéramos palomas en un parque.

-Bradley, hijo- la señora Judith se paró frente a nosotros antes de que subieramos al auto decorado de recién casados- Estoy muy feliz por ti- se limpió algunas rebeldes lágrimas con un fino pañuelo- Sé que es muy repentino esto y que no conoces a Alexander- tomó la mano libre de su primogénito y la beso- Creeme que no hacemos esto por hacerte un mal, hay una razón y espero que algún día la descubras- ahora tomo mi mano y me sonrió con cariño- Alexander es un gran chico, es responsable y muy bondadoso, sé que en algún tiempo no muy lejano se amaran por siempre.