One-Shot, One-Dream.

Lazo Destino.

Durante las últimas semanas habían estado ocupados con diferentes misiones que Bucciarati les asignaba, después de tanto trabajo estresante había llegado el anhelado descanso, aquel día serian libres de hacer lo que quisieran.

Bucciarati y Abbacchio salieron desde temprano diciendo que irían a comprar algunas cosas lo curioso es que regresarían hasta muy tarde, nadie quiso cuestionar a donde irían, Trish dijo que haría "cosas de chica" de igual forma nadie la detuvo a pesar de las cosas por las que pasaba, Naranccia le estuvo insistiendo a Fugo para que lo llevara a un árcade donde se estrenaría una nueva máquina de baile solo quedaban Mista solo con su rubio amigo.

Mista quien no tenía planeado salir ese día se encontraba acostado en el sillón con una consola portátil color azul decorada con rombos, días atrás Naranccia le presto un juego para que se entretuviera, era el momento oportuno para jugar.

-. ¡Maldita rana! ¿Por qué no sales bien? -Se quejo Mista con total decepción siendo sobre todo porque era su cuarto intento, fue escuchado por Giorno quien ya iba de salida pero quería saber que estaba haciendo su amigo.

-. ¿Rana? ¿Estas jugando Pokémon? -El rubio se acerco tomando asiento a lado de Mista.

-. ¿Eh? ¿Conoces el juego? Narancia me lo presto y quiero una rana ninja mutante sobrevalorada, pero vi que había en color negro, aunque parece difícil conseguirla, Fugo me dijo que usara una piedra extraña en la guardería. -Mista le acerco la consola, en la pantalla se podía ver una pequeña rana de color azul que había salido del huevo.

-. Claro que lo conozco también lo he jugado bueno fugo no te mintió aparte de la piedra necesitas un lazo destino, creo que tengo uno ¿Qué te parece si voy por mi consola y te ayudo con las ranas? Aun me falta traer cosas de mi departamento-El rubio le regalo una ligera sonrisa al instante los ojos de Mista se iluminaron asintió en respuesta pensando al fin tendría una rana ninja mutante sobrevalorada en color negro.

Después de ese acuerdo Giorno salió dejando solo a Mista quien siguió entretenido con la consola portátil, las horas fueron pasando hasta que el sonido de un celular rompió el ambiente de paz y tranquilidad Mista se dio cuenta que era el teléfono de Bucciarati tal parece que lo olvido en la sala por lo tanto no sabía si responder o no, pero al ver el nombre registrado respondió.

-. ¿Dime? Narancia soy Mista encontré el teléfono aquí en el sillón. –

-. ¿Mista? Bueno no importa te diré a ti, estamos en el árcade ya íbamos a regresar porque Fugo se acabo sus monedas junto con las mías ¡tuvimos la mejor batalla de baile! pero nos encontramos a Giorno lo invitamos a jugar así que nos regresamos por eso vamos a llegas más tarde. -Narancia se encontraba con el teléfono afuera del establecimiento de esta forma no se escucharía tanto ruido.

-. De acuerdo espera ¿Giorno esta contigo? ¿Le podrías preguntar algo? -Mista dejo la consola aun lado, según el rubio iría por sus cosas al departamento y le ayudaría con las ranas mutantes ¿Por que acepto estar con ellos en el árcade? ¿Le mintió? ¿Se le habrá olvidado? ¿Ya habría ido por las cosas? ¿Tenia su consola con él? ¿Por qué parecía novia celosa? Giorno podía pasar tiempo con ellos ¿No? Para empezar ¿Por qué estaba pensando en Giorno de esa forma?

-. ¿Qué quieres que le pregunte? –

-.¡Ah sí! ¿Puedes preguntarle si tiene el lazo destino? –

-. ¿Que? ¡No le voy a preguntar eso! -La mente de Narancia se viajo por aquellas ultimas palabras "lazo destino" sin querer un tono rojizo se apodero de sus mejillas ¿Acaso ellos estaban saliendo?

-. ¿QUE? ¿Por qué no? Lo necesito para tener crías. -Mista pensaba en las ranas bebe mutantes.

-. ¿Tus crías? Eh...-Narancia se quedó callado ¿Entonces si estaban saliendo? ¿Mista tendría crías? ¿Eso era posible? Entonces su mente viajo más recordando cuando encontró a Giorno y Mista en la banca del parque Mista se quejaba y hacia caras extrañas mientras Giorno estaba encima de él ¿Por eso iban a tener crías? Últimamente los había visto demasiado juntos incluso vio a Giorno en pijama saliendo de la habitación de Mista entonces más situaciones comenzaron a rondar la mente de Narancia, la mano le temblaba por los nervios al saber que esos dos estaban juntos.

-. ¡Narancia! ¡Responde! .-Grito Mista esperando la respuesta de su amigo.

-. ¡EH! ¿Hola? ¡Mista! ¡No te escucho! ¡Se corta la llamada! ¿Hola? -Narancia colgó de inmediato no quería seguir escuchando a su amigo o las crías que tendría, estaba nervioso por la situación después tendría que soportar mini Mistas eso le horrorizo más.

-. ¿De que estas hablando? yo te escucho bien ¿Narancia? ¡Narancia! Supongo que colgó ¿Qué le pasa a ese idiota? –Mista dejo el teléfono a un lado regresando a su juego en la consola.

Narancia regreso con Fugo y Giorno, trataba de parecer tranquilo quería evitar la charla tan extraña que había tenido pero eso no sucedería.

-. ¿Qué te dijo Bucciarati? -Pregunto Fugo notando algo extraño a su amigo ¿Lo habían regañado?

-. Me respondió Mista creo que Bucciarati olvido su teléfono. -

-. ¿Mista? ¿Te dijo algo sobre mí? -Giorno se había olvidado del trato que hizo anteriormente sobre las ranas mutantes hasta que Narancia lo menciono, esperaba que el pistolero no estuviera molesto con él.

-. N-No...No me dijo nada ¡Mira! ¿Qué tal si vamos para allá? -Narancia tomo la mano de Fugo llevándolo casi arrastrando hasta un juego, quería evitar el tema con Giorno.

-. ¿Qué le pasa? -El rubio murmuro por el comportamiento extraño de Narancia, sus cosas no tardarían en llegar a su nueva habitación después de todo utilizo a Golden Experience convirtiéndolas en ranas así no cargaba nada entonces decidió que pasaría el rato con Fugo y Narancia después iría con Mista para ayudarle con su juego de cierta forma lo tenia que recompensar por haber olvidado su pequeño trato.