Permitiéndome Amar

Capítulo 2

Narra Connor

-Connor, él es Damon Egerton-Finalizó la rubia-.

El muchacho se acercó a la mesa justo para quedar en frente de mí y extendió su mano izquierda en señal de saludo. Estiré mi mano también y le di un leve apretón.

Ahora que Damon se encontraba mucho más cerca de mi pude observar mejor que tenía pelo completamente negro con un corte a la moda y con unas facciones bien marcadas, alto, con un cuerpo muy bien trabajado, tenía una gran cantidad de tatuajes a lo largo de sus brazos.
Sus ojos eran de un color marrón oscuros, una nariz respingada y fina, una piel blanca y unos labios finos, se encontraba bien afeitado.
Llevaba una remera color blanca con una frase en inglés en negro, un jean algo ajustado de color negro y unas zapatillas negras. Los tatuajes se perdían entre las mangas de su remera por lo que imaginé que finalizarían en la espalda.

- Un gusto –Me sonrió-.

-El gusto es mío- Respondí-.

Se sentó junto a Madison en la mesa y tomó su hamburguesa para darle una mordida.

-Damon- Chilló mi compañera- Es mía ¿Por qué no te vas a buscar la tuya?

-No quiero hacer fila –Sonrió-.

Terminamos de almorzar, llevamos las bandejas al lugar que pertenecían y comenzamos a caminar por el gran patio de la universidad.

- ¿Qué clases tienen ahora? –Preguntó Ryan-.

- Faltó el profesor de filosofía, así que ninguna- Hablé-.

-No entiendo cómo es que faltan profesores si recién comenzamos- Dijo Blair mirándome-.

Llegamos al patio central del edificio y nos sentamos en el césped justo debajo de un árbol.

-Okey-Habló Tyler- ¿Algo que debamos saber de ti? Porque con lo que nos dijo madison no hacemos mucho que digamos –Me miró esperando una respuesta- ¿Delincuente? ¿Político? Habla – Sentenció-.

-No soy delincuente ni político –Sonreí- Hace un mes vine a vivir a Madrid porque a mi madre se le presentó otra oferta de trabajo mucho mejor que la que tenía y la aceptó.

- ¿De qué trabaja tu madre? –Interrumpió el pequeño Ryan-.

-Es abogada, la transfirieron a un bufete aquí-Respondí y me preparé para continuar- Como ya les dijo Madison tengo veintiún años, me gusta la literatura por lo que me decidí a estudiar esto para perfeccionarme en literatura, letras y corrección de textos.

- ¿Y tu padre? –Preguntó cautelosa Blair-.

-Hace más de dos años que no lo veo –Me encogí de hombros demostrando que no me importaba-.

-Lo lamento-Se disculpó la hermana de Chaz-.

-No te preocupes, no me importa –Sonreí de lado-.

- Vamos a cambiar de tema- Habló Damon mirándome- Hay un bar cerca de casa ¿Quieren ir esta noche?

Agradecí que haya cambiado de tema porque había comenzado a ponerme nervioso, me sentía incómodo, sobre todo por estar explicándoles mis problemas personales a un par de alumnos de la universidad que había conocido apenas hoy.

-Por mi está bien-Dijo Madison-.

-Yo me sumo –Dijo Ryan-.

-Igual nosotros –Habló Blair señalándose a sí misma, a su hermano y a Tyler-.

-Perfecto-Damon me miró- ¿Tú vienes?

-Claro, me gustaría- Le sonreí-.

- Genial, vas a ver que somos buenos y divertidos –me sonrió-.

Damon a pesar de su apariencia grande e intimidante parecía ser un chico divertido, amable, completamente distinto a lo que aparentaba.

-Entonces ¿Nos encontramos a las diez de la noche? - Preguntó Madison-.

-Si, a esa hora en el bar-Dijo Ryan-.

-Chicos, yo no tengo ni idea de dónde queda- Hablé-.

-Paso por ti si quieres-Me miró Chaz- Voy en coche con mi hermana.

Le pasé mi dirección y acordamos el horario en que pasarían.

Continuamos hablando y sin darnos cuenta pasó la hora. Entramos nuevamente a una de las aulas para la próxima clase y así es como pasó el resto de las horas hasta la finalización de clases del día.