Una remera blanca junto con un jean negro, zapatillas blancas y una chaqueta negra fina fue todo lo que me coloqué para esperar a los Evans. Observé mi reflejo en el gran espejo que tengo en mi dormitorio, con mis manos despeiné mi cabello tirándolo hacia un costado y a su vez hacia atrás. Tomé mi cartera y bajé las escaleras para sentarme en el gran sofá de la sala.
- ¿Saldrás? –Preguntó mi madre entrando al living y sentándose a mi lado-.
- Si, conocí a unos chicos y me invitaron a un bar.
- ¿Por qué no me contaste antes que habías hecho amigos ya? –Se acomodó mirándome con su pierna izquierda doblada debajo de su pierna derecha-.
-Los conocí hoy mamá, además aun no somos amigos.
-Pero si hoy salen será porque les has caído bien.
-Supongo –Sonreí al recordar a Madison que fue la primera en hablarme-.
- ¿Y esa carita? –Me miró entrecerrando los ojos-.
- Nada mamá, nada.
Oí bocinazos provenientes de la calle y logré ver a través de las cortinas, luces.
-Llegaron por mí.
-Que te diviertas mi amor- Me madre se aproximó a mí y besó mi mejilla-.
La saludé y salí de la casa.
Me acerqué a aquel mercedes negro y brillante observando a las personas que se encontraban dentro.
- ¿Cómo están? –Pregunté a los hermanos una vez que me adentré al coche-.
-Connor –Me sonrió Blair-Que lindo verte. De momento todo bien ¿Y tú?
-Genial-Contesté-.
-Me gusta tu estilo –Chaz miró hacia atrás-.
- Muchas gracias, a mí el tuyo –Lo miré-.
Chaz vestía una camisa negra con un jean blanco y unos zapatos negros, bastante formal por lo que me pareció. Blair por otro lado llevaba un sweater gris con un jean azul claro y unas zapatillas negra, su cabello se encontraba bien peinado en una coleta alta, mucho más sencilla que su hermano.
Luego de andar por unos cuantos minutos, Chaz aparcó frente a un local con un cartel de neón en el cual se lograba ver una copa de Martini y el nombre del lugar, "Free Style".
El lugar tenía dos grandes ventanales de vidrio que permitían la vista hacia adentro, sus paredes tenían ladrillos a la vista y una gran puerta de vidrio con un picaporte de forma cilíndrica en vertical se apoyaba en esta.
Por dentro estaba pintado por completo de un color crema que se hacía aún más fuerte debido a las luces, en las paredes habían colgado posters de publicidades de bebidas de muchos años atrás. Frente a nosotros había una gran barra hecha con una madera rustica pintada de negro, de un lado estaban los barman preparando y pasando cada bebida, y del otro se encontraban bancos altos sin respaldos con un cuero rojo en el asiento y con patas de un hierro plateado y brillante.
A los costados de la puerta principal había mesas de cuatro sillas cada una.-Al fin- Dijo Chaz-.
Pasó a mi lado y seguido de él cruzó Blair. Seguí a los hermanos hasta llegar a dos mesas unidas donde se encontraban los chicos que había conocido.
-Chicos –Dijo la rubia Madison- Que bueno verte Connor.
-Lo mismo digo-Contesté-.
- ¿Y Damon no vendrá? –Habló Ryan- Él fue quien organizó.
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Permitiéndome Amar
Ficção AdolescenteLos nombres y situaciones provienen de la autora y son empleados de manera ficticia. Cualquier situación similar a la realidad, es pura coincidencia. Todo es nuevo para Connor, nueva ciudad, nueva casa, nueva universidad y por ende nuevos compañeros...