Eternal Life (BTS)

Capítulo IV

Los secuaces de Naithan están dando una batalla muy fuerte, cada vez que acabamos con algunos aparecían de la nada el doble de ellos aunque los lobos nos estén brindando una ayuda impresionante 

-¿en donde están los Salvatore?- preguntó Jin mientras rompía el cuello de un vampiro 

-¡no lo sé! Los perdí de vista- respondí lanzando a otro por los aires -¡Mikhail! ¡Debes ir por la corona!- el me miró y se destransformo 

-les dejo este lado- dijo mientras corría hacia la cabaña desnudo 

-¿es malo decir que me dio gracia lo que acabamos de ver?- dijo Alec riendo 

-¡Jungkook cubre ese lado!- el obedecio mi orden -vamos chicos ¡no hay que dejarnos vencer!- 

Estábamos muy concentrados en la batalla hasta que Mikhail salió volando atravesando la pared de la cabaña, cayó en el suelo abruptamente pero tenía la corona en su mano 

-¡maldito perro sarnoso! ¡Dame esa corona!- grito David a través del gran agujero que formó el cuerpo de Mikhail -cuando te mate te arrancare la piel y me haré un abrigo- sonrió y se lanzó al suelo para quedar frente a frente con él 

-ya lo veremos- Mikhail comenzó a transformarse, así que me lanzó la corona -cuidala, no tardaré mucho- se convirtió en lobo completamente dejando salir un gran gruñido

-eso es… Dame diversión- dijo David mientras se quitaba su jabardina y la dejaba en el suelo 

Mikhail comenzó a correr hacia el pero una persona lo tacleo fuertemente probocando que perdiera su forma de hombre lobo y escupiera sangre por la boca 

-¿enserio? ¿Tenías que hacer eso?- dijo David reclamando mientras esa persona se sentaba a orcadas encima de Mikhail 

-Lo siento hermano pero… Este lindo cachorrito es mio- 

"esa voz…"

Todos nos miramos al mismo tiempo

-ella es…- susurre pero su voz me interrumpió 

-pero te pregunto a ti… ¿era necesario tantos vampiros?- escuche su linda risa 

-fue Naithan- dijo recogiendo su jabardina 

-¿podrías detener todo esto?- dijo ella levantándose mientras que Mikhail parecía que había perdido la conciencia 

-Claro…- de la nada Naithan salió de entre los árboles -todos ustedes deténgase ya- lo vampiros obedecieron -váyanse, si los necesito les llamaré- todos se fueron poco a poco quedando solo nosotros -los necesitamos para que nos entreguen la…-

-no es necesario… Se que me la entregarán- ella se giro y por fin pude ver esos hermosos ojos que ahora eran rojo carmesí -¿verdad?- me miró 

-Clari… Por dios, eres realmente tu- no lo podía creer, tanto tiempo y por fin la tenía enfrente de mi 

-si soy yo, no es una ilusión- sonrió -¿me extrañaban?-

-Clari es bueno ver que estés bien- dijo Jimin -por favor dejame acercarme-

-¿para qué?- elevo una ceja 

-solo quiero volver a sentirte entre mis brazos-

-no lo creo, te dejaré con esas ganas- dejó de mirarlo y se dirigió a mi -tu tienes mi corona… ¿podrias dármela?-

-Clari yo… No puedo hacerlo- retrocedí un paso -no se que harás con ella y si te soy sincero temo a que provoques una catástrofe-

-¿por qué piensas que haría algo así?- miró a Mikhail y lo tomó del cabello para levantarlo del suelo y colocar una filosa daja en su cuello -fue porque este perro les contó algo ¿verdad?-