Aún no entrabamos a la casa cuando Katya ya se había deshecho de su chaqueta y sus zapatos, estaba a punto de sacarse el vestido pero la detuve con un pequeño beso que me hizo acaparar toda su atención, pasó un segundo mirándome para después lanzarse a besar mis labios desenfrenadamente.
-hazme tuya aquí y ahora -dijo ella a duras penas, bajando sus manos hasta la hebilla de mi cinturón-
-tranquila, ven entremos -la tome de las manos y entramos a la casa-
-mi cuarto está... ¿arriba?...si arriba jajaja -soltó una carcajada-
-para que esperar-me acerque a ella y comencé a besarla mientras comenzaba a quitarle su vestido-
Me senté en el sofá con ella sobre mi regazo y comencé jugar con el broche de su sujetador mientras ella dejaba un camino de besos en mi cuello y sus manos intentaban desabrochar mi camisa fracasando en el intento, yo mismo me deshice de la camisa porque sabía que ella era capaz de ponerse a llorar, hice volar su sujetador detrás de algún mueble y sus pequeños senos se vieron liberados, me quedé observando su abdomen desnudo por un momento mientras mis manos descansaban en su cadera, ella pareció notar lo distraído que estaba por lo que colocó mis manos sobre sus pechos y me dió un casto beso para seguir palpando mis abdominales
Ya cansado del juego previo recosté a la chica sobre el sofá y me posicioné entre sus piernas, yo aún traía mi pantalón y ella seguía con sus bragas cuando dí la primera estocada haciendo que ella gimiera y de mis labios solo salió un gruñido, con otro fuerte movimiento de caderas me asegure que ella estuviera suficientemente mojada y de un tirón la liberé de sus bragas al mismo tiempo que ella por fin había conseguido retirar mi pantalón, antes de que pudiera entrar en ella una de sus manos bajó a mi entrepierna y comenzó a masturbarme haciendo que cerrará los ojos y por primera vez en la noche el placer llenará mi cuerpo, estaba a punto de correrme por lo que dejé caer mi cabeza hacia atrás
-Ahh...Lara -dije abriendo los ojos de golpe al notar lo que había dicho-
-No... mmm yo no soy Lara -dijo ella acercándose para besarme-
Me senté en el sofá sujetando mi cabeza con mis manos y apoyando mis brazos sobre mis rodillas, estaba mínimamente avergonzado, me sentía miserable por querer arrebatarle su virginidad a aquella chica solo para olvidarme de mí amor no correspondido y a la vez estaba angustiado y lo peor era que no sabía por que.
Estuve en la misma posición por unos pocos minutos hasta que sentí un peso caer sobre mí, era Katya que sorprendentemente se había quedado dormida sentada mi lado, decidí que lo mejor era terminar la acción aquí y cumplir con lo que había venido a hacer.
Recosté a Katya en el sofá después de vestirla cuidadosamente y arreglarla un poco para no levantar sospechas, me había colocado el pantalón cuando corrí a la segunda planta para cumplir mi verdadero objetivo, esta chica aparte de ingenua era muy predecible por lo tanto solo me bastó entrar a su habitación y revisar unos pocos lugares hasta encontrar lo que buscaba.
Iba saliendo de la casa luego de asegurarme de no dejar rastro cuando encontré unas deslumbrantes joyas sobre el mueble que estaba a un costado de la puerta, sin pensarlo mucho las tomé y salí de allí para regresar a mi hogar donde me estaría esperando mi querida compañera de trabajo la cual se llevaría una gran sorpresa cuando le regalara lo último que le había quitado a Katya.
ESTÁS LEYENDO
💸Solo son negocios💸 «YG»
RandomAmbos necesitaban terapia uno de ellos por sufrir de kleptomania, por su pintoresca manera de practicar el hurto. El otro, por el alto rango de vulnerabilidad escondido detrás de esa resistente figura, por su sombría obsesión con las personas verda...