CAPÍTULO 28

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Estaba nerviosa, nunca había estado tan cerca de él, tenía demasiados pensamientos sobre lo que podía pasar en ese momento, no había nada mas, eramos sólo él y yo.
Se acercó a mi, su respiración era fuerte, el día iba cayendo y la noche se iba hacieno más notable, estuvimos así por cinco minutos, hasta que Beau colocó su mano en mi hombro y la fue moviendo lentamente hasta subir por mi cuello y colocarla en mi mejilla. Moví la cabeza hacia un lado, el saber que su mano había hecho ese pequeño recorrido me causaba escalofríos por todas partes. Él veía mis ojos, luego mis labios y repetía lo mismo hasta que decidió acercarse más. Cerré mis ojos lentamente y segundos después, sentí sus labios junto a los míos. Saqué mis manos del agua y las subí hasta ambos lados de su cuello, sus manos estaban ahora rodeando mi cintura, llevándome hasta tocar la pared donde terminaba la alberca.
No quería que dejára de hacer eso. Me encantaba.
Me atrajo hacia él, juntando nuestros cuerpos completamente, podía sentir su cuerpo marcado. No pude resistir más así que decidí deslizar ambas manos hasta su estómago y tocar su abdomen, era increíble lo marcado que podía estar, nunca había sentido algo así. Me tomó las manos y me llevó hacia abajo, al estar casi debajo del agua tomámos aire, me sonrió de una manera tan linda, era adorable. Por más que quería odiarlo, no podía, tenía algo que simplemente me volvia loca. Me rodeó con sus brazos, pero llegó el punto en el que necesitabamos aire así que salimos.

"Espero no haberte hecho sentir incómoda pero no lo pude contener dentro de mi" dijo apenado.

"No te preocupes.." le respondí sonriendo pero al mismo tiempo también estaba un poco apenada por lo que había pasado, pero qué puedo decir? me encantó.

P.D.V DE BEAU
No podía creer que había hecho eso. Pero como le dije, no pude contenerme, es tan hermosa. Es la persona que eh estado esperando desde hace tiempo y al fin la logré encontrar, sólo espero no alejarla de mi otra vez.
La tomé de la cintura y la levanté hasta ponerla fuera de la piscina, después de ayudarla, salí yo. Tomé la toalla que estaba en un silla cerca de nosotros y la coloqué en los hombros de Carter para que pudiera secarse y no tener frío. Claro que ya no había otra para mi pero no podía dejarla sin una a ella. Tenía que demostrarle que ella me importaba y la quería sólo para mi, para nadie más en este mundo.

"Quieres que vayamos adentro?" le pregunté.

"Claro..." esa sonrisa que ponía cada vez que me hablaba, me hacía sentir un extraño cosquilleo cada vez que lo hacía.

La llevé adentro, esperámos a secarnos para poder sentarnos en el gran sillón que se encontraba ahí. No sabía qué decirle, pero si no hablaba pronto, se iba a sentir incómoda..

"Oye, gracias por lo que hiciste, no sé cómo agradecerte lo suficiente" agregué.

"No tines nada de qu agradecer, pero.. te podría hacer una pregunta?" me miró fijamente.. "Sin importar que sea algo, bueno.. casi personal" preguntó.
No sabía que estaba a punto de preguntar, sólo pensé que debería dejarla para poder tener algo sobre que hablar.

"Si, no hay problema" afirmé

"Qué pasó allá?" comenzó lentamente, también se notaba algo tímida.

"En dónde?" dije frunciendo el ceño.

"En... la casa" me puse nervioso.. no me agradaba tocar ese tema, tenía que inventar algo, sólo esperaba que no me descubriera y se enojara.

"Ah.. pues, tu sabes.. los típicos problemas que uno tiene.. sólo eso" comenté esperando que me fuera a creer.Me senté en el sillón aunque Carter seguía de pie, preguntándose algo.

"Beau.. perdona que te vaya a hacer otra pregunta pero.. Confías en mi?" me miro inoscentemente, esperando la gran respuesta que saliera de mi, "porque siento que no me estás diciendo la verdad".

¿Por qué tiene que ser tan inteligente? Mierda.

"Claro que confío en ti Carter, es sólo que.. no.. verás" no econtraba la manera de decirle que no me gustaba hablar sobre eso, sobre lo que había pasado hace algunos años. Sólo me traía recuerdos oscuros, los cuales nunca quería recordar porque me hacían sentir fatal.

"Sólo dime y yo lo entenderé, no hay necesidad de decirm completamente todo" dijo.

"Sabes qué? Creo que contigo puedo hablar sobre esto, porque no con cualquiera siento esto, así que te contaré" la tomé de la mano para que se sentara justo a un lado de mi.

"Está bien.." se quitó la toalla de encima y la aventó al suelo para no mojar el sillón.

"Mira.. hace algunos años, casi tres, era un chico cualquiera en una escuela cualquiera, claro.. como ahora lo sigo siendo, pero.. años atrás no era una persona la cual disfrutaba de todo, nunca nada me podía hacer sentir bien, me empezé a juntar con un grupo de chicos los cuales eran casi iguales que yo, pero había algo en ellos lo cual no estaba en mi, me dijeron que había algo lo cual me podía hacer olvidar todo eso lo cual me afectaba, ellos me dijeron que haciendo lo que hice en aquella casa, me iba a hacer sentir mejor, yo.. lo hice, luego de un tiempo no podía dejarlo, era algo lo cual estaba formando para de mi, Jai y Luke siempre me dijeron que lo dejara pero ya que yo soy y era mayor que ellos, nunca les tomé importancia a sus comentarios.." bajé a mirada, sabía que no podía seguir hablando sobre eso.. me dolía saber que fue el herror más grande que eh cometido en toda mi vida..

"Beau.. no hay problema si ya no quieres seguir con esto, ya tengo una idea de lo que quieres decir.." dijo tocando mi hombro izquierdo, mientras lágrimas corrian por mi cara, me sentía débil, mucho más porque estaba en frente de la chica a la cual amaba.

"Beau, vamos.. no sigas porfavor, me sentiré mal si sigues así" cuando dijo eso, sabía que estaba haciendo algo, la estaba lastimando, porque la iba a hacer llorar ya que es lo que yo estaba haciendo.

"Nunca les tomé importancia así de seguí sin parar, simplemente era cierto lo que me habían dicho ese grupo de chicos, me ayudaba a olvidar todos los problemas pero eso me trajo aún más. Años después, una noche me tuvieron que llevar a emergencias porque me estaba muriendo, no podía respirar y los doctores me dijeron que eso me afectaba mucho más de lo que le afectaba a cualquiera, que podía llegar a quitarme la vida si no dejaba ese terrible caso. Hubieron varias veces que pasó lo mismo, casi siempre visitaba el hospital gracias a mi estupidez, gracias a que era un pendejo. Prometí no volver a visitar el hospital por lo mismo pero qué fue lo que pasó?" me cubrí la cara con las manos, no podía dejar de llorar, estaba sufriendo, me tiré al piso porque no podía creer que había roto esa promesa, me fallé, le fallé a las personas que más me importan. "lo volví a hacer! Casi muero ésta vez, pero llegaste tu y me salvaste, desde que te conocí sabía que había algo especial en ti y estaba en lo corecto" me puse de pie, hice que ella también se parara y la abracé lo más fuerte que pude.

BAD BOYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora