Mi corazón se aceleró y corrí hacia la ventana a investigar si había alguien mirándonos, pero no había nadie.
— ¿Qué tienes? -frunció el ceño acercándose a mí.-
— ¡Aléjate! -caminé por toda la habitación alejándome de él, no quería que le hicieran daño.-
— Ya veo, me tienes miedo. -susurró caminando hacia la puerta.-
— ¡No! No es... -fui interrumpida por el fuerte golpe de la puerta- Maldita sea. -susurré llevándome una mano a la frente.-
Mis pensamientos eran un torbellino, mi piel se erizaba constantemente y había perdido la noción del tiempo.
Pasaron unas horas, pensé y pensé quien podría estar vigilándonos y cómo, pero realmente no tenía idea. Un golpe en la puerta me sacó de mis pensamientos así que salí de mi cuarto y fui a ver quien tocaba.
— Hola Hailey, pasaba para ver cómo estabas. –saludó al segundo en el que abrí la puerta principal.-
— Hola Nathan, estoy bien. -respondí desviando la mirada a su brazo izquierdo en el cual se veían marcas de rasguños.-
— Oh, no es nada. -respondió cubriéndose el brazo con su otra mano.- Sabes, he estado pensando y te quería preguntar si quisieras salir conmigo algún día...
— Si claro, algún día. -respondí sin más descansando en el marco de la puerta.- ¿Algo más?
— ¿Puedo pasar? Para platicar.
— No Nathan, ya va a oscurecer y debo hacer cosas de la escuela. -mentí-
Sí, había perdido un día completo envuelta en mis pensamientos y en lo que había pasado con Jake.
— Entiendo, nos vemos luego entonces. -se despidió serio y comenzó a caminar hacia su casa.-
Cerré la puerta y comencé a caminar hacia mi habitación. No había comido nada y no quería hacer nada. Así que sólo me lancé a mi cama e intenté dormir.
*
Abrí lentamente los ojos y me giré para ver la hora en mi celular. Eran las siete y media de la mañana así que decidí levantarme y hacer mi rutina mañanera, era domingo y no pensaba quedarme en mi casa.
Cuando estaba lista para salir, busqué a Mary para despedirme pero no la encontré, algo que me pareció muy extraño.
Salí y tampoco estaba el auto de Jake, me habían dejado sola.
Me coloqué mis audífonos y comencé a escuchar The Night We Met - Lord Huron mientras caminaba hacia el centro comercial que quedaba a treinta minutos de mi casa.
Estuve de tres a cuatro horas probándome conjuntos de ropa y comprando. Realmente me sentía muy bien. Pasé por un salón de belleza y me detuve unos minutos, hace tiempo que no me hacía un cambio de imagen y sería bueno hacerlo ya que recién unos días comencé una vida nueva, así que lo hice. Me cortaron y me tiñeron el cabello.
Me dispuse a caminar hacia mi casa felizmente, el día estaba nublado así que me apresuré un poco. Al llegar vi que Jake estaba en casa.
— ¡Hola! -saludé cerrando la puerta atrás de mí y dejando las bolsas en el suelo.- ¿Jake?
— ¿Dónde estabas? -caminó desde la cocina hacia mí.-
— De compras. -respondí tomando mis bolsas y dirigiéndome hacia mi habitación.-
— No puedes salir sola, ¿porqué lo hiciste?
— Tú eres mi guardaespaldas, es tú trabajo ir a dónde yo vaya, yo no tengo porque estar esperando a que a ti te de la gana de llegar a la casa para luego yo poder hacer mis cosas. –respondí con un tono elevado al llegar a mi habitación y dejar las bolsas en mi cama.-
— Tienes razón, discúlpame. –habló calmado y cerró la puerta.- Tuve que resolver unos asuntos.
— No me interesa. -comencé a acomodar todo lo que había comprado sin mirar a Jake ni un solo segundo.-
— ¿Por qué estás así conmigo? -su tono de voz cambió a uno más grueso y se acercó a mí acorralándome contra la pared.-
— Jake, aléjate. -lo miré molesta e intenté empujarlo pero fue en vano.-
— No. -me tomó fuertemente por la cintura pegándome a su caliente cuerpo.-
Muchos sentimientos y sensaciones se apoderaron de mí al sentir su cuerpo y no pude evitar mirar sus labios.
— Te ves muy hermosa con ese nuevo estilo. -susurró acercándose lentamente a mi cabello para olerlo- Huele muy bien. -rió leve y no pude evitar hacer lo mismo.-
— No quiero que te pase nada. -lo miré preocupada rodeando su torso con mis brazos.- He estado recibiendo mensajes extraños...
— ¿Qué clase de mensajes? -su expresión se tornó a una molesta.-
Saqué mi celular del bolsillo de mi pantalón y se lo mostré, cosa que provocó más su enojo.
— Me encargaré de eso.
— Te repito, no quiero que te pase nada.
— No me pasará nada Hailey, te lo prometo.
Nos acercamos lentamente y cerramos nuestros ojos. Nuestros labios hicieron contacto y nuestros cuerpos se juntaron hasta más no poder. Sus manos acariciaban cada centímetro de mi cintura y mis manos recorrían su espalda. Nuestros corazones latían rápido al compás y el beso se hizo más intenso cuando ambos abrimos un poco más la boca para profundizarlo. No quería que ese momento acabara, me sentía en las nubes.
Pero luego, el cristal de mi ventana rompiéndose nos hizo saltar del susto y separarnos, Jake cubriéndome con su cuerpo.
— ¡Te advertí que si te besaba lo iba a matar! -gritó incorporándose luego de haber roto la ventana con su cuerpo para luego transformarse a su forma oscura.-
Jake se transformó y yo corrí hacia el baño, pero antes de cerrar la puerta observé atentamente al extraño.
— ¿Nicholas?
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Novio Demonio
Mystery / ThrillerHailey Morgan de diecisiete años, atraviesa por un suceso traumático, por tal razón, debe dejar atrás su hogar en Corea del Sur y comenzar una nueva vida en Minneapolis, Minnesota junto a su Nana y su guardaespaldas. Demonios la perseguirán, secreto...