Capítulo 1

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Unos meses después de que Naruto y Hinata se fueran de Konoha viajaron en el auto de este. Ambos rebosaban de amor y felicidad. Hinata pensaba que había sido una tonta al no ver que ese hombre era su verdadera felicidad. Se había dado cuenta de que con él, podía ser ella misma. Él era un hombre alegre, divertido y siempre terminaba cediendo ante ella. Ambos cometían locuras y una que otra vez durante sus viajes, se detenían para tener encuentros apasionados en la intemperie. Podía jurar que lo habían hecho más cien veces desde que se fueron juntos.

Salió de sus pensamientos en cuanto Naruto detuvo el auto en una gasolinera y decidieron comer algo en el pequeño restaurante que había allí.

Naruto se quitó el cinturón y la miró con una sonrisa -Vamos a comer algo amor, no lo sé, siento que te vez algo pálida.

-¿Enserio? No me siento mal...

Naruto se encogió de hombros -No quiero que te enfermes, así que ahora mismo te pides un filete y mucha verdura.

Hinata sonrió -como usted diga señor.

Ambos bajaron. Naruto la tomó de la mano y entraron al lugar.

Naruto la observó comer. Sonrió.

Ella le miró -¿Qué?

Naruto negó -nada... sabes que me gusta mucho observarte.

Hinata sonrió y lo atrajo hacia ella para darle un beso -Realmente soy muy feliz estando aquí contigo mi amor.

-Yo también -Naruto miró el anillo que ella tenía puesto-Señora Uzumaki.

Hinata sonrió aún más mientras se mordía el labio.

-Estás recordando la noche de bodas ¿cierto? -dijo Naruto.

Hinata desvió la mirada divertida y se encogió de hombros -Tal vez...

-Pequeña traviesa.

Ella hizo un puchero -No es mi culpa que seas tan adictivo cariño.

-Ya está, mas tarde vas a pagar por este coqueteo...

-No puedo esperar.

Naruto comenzó a reír.

Justo al salir del lugar ella comenzó a tener un mareo. Instintivamente se sostuvo de él. Este se preocupó.

-Hinata... ¿ves? Sabía que no estabas bien...

-No es nada... solo me he mareado un poco... tal vez la comida no me cayó bien...

Naruto negó -pues dirás lo que quieras pero iremos con un doctor ahora.

Rato después llegaron a un poblado cercano y luego de preguntar, finalmente llegaron a un modesto consultorio. El doctor había sugerido hacerse unas pruebas de sangre, le aseguró que tendría los resultados al día siguiente por lo que ambos debían quedarse a pasar la noche allí. Rentaron un cuarto y luego de tomar un baño, se acostaron en la cama. Naruto la abrazó por detrás.

-Tal vez debamos asentarnos en un lugar -Hinata volteó el rostro para mirarle, él continuó -No quiero que tu salud empeore... no me gustó mucho la expresión del doctor...

-Estas siendo paranoico, realmente no siento que esté enferma, tal vez fue algo de la comida. Esperemos a que nos den los resultados ¿ok? Luego ya veremos.

Naruto se abrazó aún más a ella.

Al día siguiente, ambos miraron al doctor, quien miraba el papel de los resultados.

-Pues, todo está bien...

Hinata miró a Naruto -¿Ves?

-Sólo está usted embarazada.

《Tú, my salvación》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora