Miedo al espacio.

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Todo cuanto oigo cuando salgo a combatir son gritos de los soldados Galra que esperan ansiosos por ver cómo se derrama las tripas y la sangre de los contrincantes capturados en los distintos planetas. Nunca había tenido tanto miedo al espacio. Yo solo sabía karate y un poco de judo de las extraescolares a las que iba cuando era más joven, pero eso no servía aquí. En la arena tenías que ir preparado tanto física como mentalmente, luego en realidad lo único que te daban era una especie de mazo o espada para que matases al otro alienígena que venía a por ti. Así fue mi primer combate, yo no sabía utilizar la espada ni el escudo. Querían matarme, pues me hicieron pelear con una especie de ballena con patas y ojos de rana.
"Bien pequeños enclenques, que sepáis que a partir de ahora en adelante saldréis a la arena para morir. Ni más ni menos, no penséis ni por un momento que tenéis oportunidad de sobrevivir"- Dijo un soldado Galra. Los Galra eran seres morados, la mayoría con la estética de un humano mezclada con la de un gato, con los ojos amarillos y rasgados y con orejas peludas. Yo había visto muchas películas donde los alienigenas se asemejaban los humanos, pero nunca imaginé fue que fuese verdad; No el que hubiese vida fuera de la tierra, sino que fuese tan parecida a ella.
"Tú, la fémina humana".
Mi sangre se heló, y sentía como mi piel se erizaba y rozaba con las ropas que me habían puesto; una especie de neopreno negro de cuerpo entero y una camiseta larga beis rasgada por las mangas y el torso.
"Da un paso al frente y di como te nominas y a que planeta perteneces"
"M-me llamo R-Rei Kibacker, vengo del planeta tierra, n-necesito volver a mi nave lo antes posible y buscar a mi tripu-"
Sentí como mi mejilla ardía, por la cachetada que el soldado me había dado.
"No se habla sin que yo lo diga humana insolente, que os sirva a todos de aviso. Tu tripulación está muerta y tú vieja nave desmontada y hecha material útil".
Lo miré con desprecio. Pensé en Leslie y John, más jóvenes que yo, tenían una vida por delante y pusieron todo su esfuerzo en llegar a La Garrison.
"Oh pobrecilla. ¿Estás triste por haber perdido a tus compañeros humanos?, ¡ja, ja, ja, ja!. Tranquila muy pronto te unirás a ellos. Bien oídme todos, de ahora en adelante seréis gladiadores del imperio Galra y vuestro único cometido será luchar para entretener a los soldados. Y si morís mucho mejor, será más divertido.

"Sois la escoria del universo, una raza como la vuestra morirá extinguida por su poder".- Dije sin poder evitarlo.
Al fin y al cabo mi naturaleza es así, hablo antes de pensar.
El soldado se dirigió en mi dirección y me agarró del cuello de la camiseta rasgada por lo que me quedé de puntillas. Podía notar su fuerte olor bucal a carne, lo que me estremeció sutilmente.
"Somos la raza más poderosa de todo el universo, tú lo has dicho, y gracias a ello duraremos para siempre".
Después me soltó la prenda y se puso a mi altura con las manos agarradas por detrás.
"De todas formas creo que ya tenemos una valiente para inaugurar hoy la arena, Kibarache del planeta tierra-".
"Con permiso señor, es Kibacker señor". Tuve miedo de que volviese a golpear, pero no lo hizo, simplemente escribió mi futuro.

"Como sea, Kiba del planeta tierra será el primer gladiador de hoy".

Me temblaban las piernas, nunca me había aterrorizado nada. Siempre había tenido todo controlado. Siempre había estado segura de lo que hacía, de que me gustaba lo que hacía, de ser astronauta. Pero ahora... nunca había tenido tanto miedo al espacio.

La cara oscura de la luna. (Spin-off Voltron Legendary Defender)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora