Las Manzanas de oro tambien se pudren

Capitulo 1 "Deudas peligrosas"

Las reuniones de los Hilos de Dios siempre se realizan en distintos lugares dependiendo a que familia tenga el turno de realizarla , este año por su puesto fue el turno de mi familia aun que mi padre ya tenia todo dispuesto con antelación ya que siempre fue un hombre muy precavido ante cualquier circunstancia, el lugar es un hermoso palacio mermado de pequeños y exquisitos detalles . la arquitectura del lugar es del gótico clásico sin embargo no contrasta para nada con los lujos modernos que hacen del lugar algo mas cómodo para los invitados los suaves sofás de terciopelo negro hacen un perfecto juego y contraste con las traslucidas ropas que portan las prostitutas dejando ver la delicada y estética figura a nivel de ser casi obras de arte.  

Alexander Lezin es el dueño Tabacalero más importante y que por cierto no me agrada en lo absoluto, pero bueno, no es como si realmente a alguna de las familias fundadoras les agradaran , necesariamente tengo que soportar sus presunciones absurdas ya que tiene una cuenta pendiente con mi familia , me gustaría que solo tuviésemos que tratar directamente con los fundadores pero se tiene en estima a algunas familias que están al servicio de esta organización no podemos descartar el hecho de que de algún modo son relevantes para nuestros fines.

– Pero miren que tenemos aquí, Yulian Petrinov un gusto verle en estas nuevas circunstancias, tan joven y siendo el presidente de una enorme empresa, ¿me pregunto si podrá con tan difícil puesto? -

-Deje las cordialidades Lezin ambos sabemos que la muerte de mi padre no detendrá la deuda que usted aún debe pagar.

-Carácter fuerte en sangre nueva, fue muy bien entrenado por su difunto padre, me alegro, me alegro, la deuda que tenemos pendiente se pagará a su debido tiempo, soy hombre de palabra, ¿Por qué no se relaja y toma unos tragos como los demás jóvenes?, mi hijo podría aprender mucho de usted.

Pude notar que en su sonrisa había cierta picardía y sarcasmo, no podía fiarme de aquel tipo por su absurda y melosa cortesía.

-Sinceramente lo dudo, a su hijo le interesa más presumir el poder monetario que tiene sin saber que es gracias a mí, pero tomare su consejo y una copa beberé a su lado, me ayudara a olvidar esta desagradable conversación.

Bebí la copa algo pronto, no me apetecía estar tanto tiempo con este sujeto.

- Espero que siga disfrutando de la fiesta, me retiro, pues como se podrá imaginar tengo demasiado trabajo por delante, con permiso. -

-Usted sí que tiene un grato sentido del humor, veo que será bastante entretenido trabajar por estos rumbos, un gusto presidente, nos veremos pronto.

Y ahí estaba Richard Lezin, bebiendo, fumando y pavoneándose con las prostitutas pagadas por la secta, sintiéndose alguien importante, decidí acercarme para cobrar las molestias de cruzar palabras con su padre, planeando hasta el último detalle para humillarlo.

- ¡Richard qué oportuno encontrarte aquí! veo que disfrutas de la fiesta, me gustaría que habláramos a solas sobre el nuevo yate que has adquirido, sería una excelente idea estrenarlo pronto.

-Yulian amigo, así que ya te has enterado, pero por supuesto, vamos a los cubículos tengo que presumirte todo lo que tiene ese pedazo de yate, por si las dudas llevaré esta botella. 

Se levantó torpemente y de vergonzosa manera bebio la botella de cerveza a medias que tenía en la mesa, hasta mal gusto tenía para la bebida.

-Las veo en unos minutos chicas. - Dijo después de su torpe salida. Iba tambaleándose de un lado al otro, como me molestaba este idiota.

- ¡Joder hermano! esta vez se lucieron con las putas no saldré de aquí sin dármelas, por lo menos tengo que llevarme a la mitad.