Las Manzanas de oro tambien se pudren

Capítulo 7 "Héroe"

Esta noche la recordaré como una de las más importantes de mi vida, estar al borde de la muerte a diferencia de lo que muchos podrían pensar no cambio mi vida, ni siquiera me hizo pensar en ella, fue más como una descarga de adrenalina y reafirmar que el camino que he tomado es el correcto, no cambiaría nada de lo que he hecho hasta ahora.

Todo comenzó con una riña cualquiera dentro de un bar de mala muerte entre gato y unos sujetos demasiado tomados, empujaron a gato  le tiraron el trago una cosa llevó a la otra cuando comenzaron los golpes , nunca lo había visto pelear , pero se defendía muy bien dándoles una buena paliza a pesar de ser 3 sujetos no tuve que intervenir , hasta que salimos de ahí, al parecer habían estado esperándonos afuera, sacaron un arma y le apuntaron directamente a Gato en el pecho , no podía dejar que le mataran , así que me interpuse entre ellos , y solté un buen golpe en toda la cara de aquel perdedor cuando disparó , jamás había sentido tal dolor , directo en el estómago, salieron corriendo como todos unos cobardes cuando me desplome en el suelo y gato asustado intentaba ayudar pero se notaba su miedo e incertidumbre.

- ¿Z estas bien, donde te dieron amigo?, No, no te mueras, deja llamó una ambulancia, quédate conmigo no te duermas, Z dime algo.

-Estoy bien, no puedo respirar, pero estoy bien, no .... No te preocupes. La falta el aire solo hizo que me desmayara.

La verdad es que ser precavido es un hábito que he tenido desde siempre , sabía que en algún momento , ya fuera por un asalto , alguna pelea o sencillamente por estar en el momento equivocado tenía más riesgo de salir lesionado en un lugar como en el que me estaba metiendo , fue por eso que compre un chaleco antibalas de última generación son más cómodos ligeros además de discretos aunque jamás lo puse a prueba en situación controlada , supongo que Gato debió pasar un muy mal rato durante esos minutos

Desperté en el hospital solamente con un suero, y ahí estaba Ariadna, gato, y los demás chicos,

-Amigo realmente me disté un gran susto, creí que te habías muerto, pero dime ¿Por qué demonios tienes un chaleco anti balas contigo todo el tiempo?

-Veras, se lo robe a un sujeto de seguridad en la empresa sabes muy bien que tengo muchos enemigos que me quieren ver muerto, les he bajado muchas novias a muchos perdedores así que por eso pensé que es buena idea tenerlo todo el tiempo, ya ves funciono de algo.

-Te debo la vida la verdad no se ni como agradecerte, me siento en deuda contigo, cualquier día no importa que sea, lo que me pidas yo saldaré mi cuenta.

Fue en ese momentocuando por fin tenía lo que había estado buscando estos meses por fin lo tenía donde yo quería, solo tengo que pensar cómo hacer que acceda a mis deseos, pero antes de eso mandaré a matar al inepto que me disparó, Gato no es la única persona que tengo bajo mi control.