Anne:
—Amor estoy nerviosa.
—No tienes porque, todo saldrá bien.
—Pero...
—¿Estas dudando de la boda?
—Claro que no, te amo.
—Menos mal porque ya confirme que sin ti no soy nada— Sonreí por lo que dijo, el me hacia realmente feliz y no veía la hora de despertar junto a el como algo legal ante el mundo, como algo mio.
Llegamos al aeropuerto y todos nos estaban esperando, en cuanto Christian me vio me abrazo y dijo un par de cosas que me sacaron lágrimas de los ojos, como el lo dijo ya he crecido, ya he madurado y estoy a punto de dar el paso mas gigantesco de mi vida. Seguí a saludar a mis padres y luego me hice al lado de Max, nos dirigimos al auto e hicimos un viaje agradable hacia casa, cuando baje vi a Josh en el parque con una chica —de seguro su novia— y me alegre por el, porque hubiera seguido con su vida. Horas después llegaron las decoraciones, ramos, mesas, manteles y por ultimo mi vestido y el traje de el, subí como niña chiquita con ellos en la mano hacia el que antes era mi cuarto, lo guarde en el armario y fui a buscar a Chris, necesitabamos hablar pues hace mucho no lo veía.
Esta noche no dormiría con Max porque mis padres dijeron que ya tendriamos mucho para despertar juntos, mañana seria la boda y estaba tremendamente nerviosa, no podía dormir así que decidi salir a dar una vuelta, fui al parque que antes frecuentaba y me quede sentada en una banca, estaba muy solo por ahí y se podía apreciar el silencio, sentí como se movían las hojas tras de mi, lo primero que pensé fue salir corriendo pero las piernas no me respondían, temí lo peor en ese momento.
—Anne, tiempo sin verte— me relaje cuando supe que era Josh pero mis ganas de salir corriendo no habían desaparecido. Solo sonreí y el se sentó a mi lado.
—¿Te casaras, no?
—S-si.
—El te quiere, te lo aseguro.
—Eso lo se de sobra.
—¿Y tu lo quieres?— esa pregunta me pareció lo mejor para cerrar ciclos, para dejar todo hasta allí.
—Lo amo.
—¿y yo, donde quedo?
—En mis recuerdos.
—Pero yo no quiero estar allí, yo quiero ser ese hombre con el que te cases y...
—Y nada Josh, tu y yo no somos nada, hace seis años que lo dejamos todo, y lo conocí a el, lo escogí para compartir mi vida y descubrir cosas nuevas con el, lo escogí por que se que el me ama y yo también lo hago, el me llena Josh, debes entenderlo.
—Pero yo no puedo aceptar esto, no me lo pidas Anne.
—Quieras o no te va a tocar, yo no soy para ti, no podemos estar juntos...yo ya soy feliz y tu debes empezar a serlo, adios— me levante de la banca y le di una mirada rápida para luego empezar a caminar.
—Adios significa olvidar...
—Pues olvidame.
