Bueno las historias de amor no siempre tienen un final feliz o no con la persona que debería, por ahí leí que si ambos se quieren no terminaran juntos y es exactamente lo que me sucedió con Josh, aunque amo Max con mi vida nunca se igualara a lo que siento por Josh, el amor que me reservare para mi, mi pequeño secreto.
Recuerdo el día de la boda, probablemente uno de los mejores momentos de mi vida.
—Anne, aceptas a Max para amarlo y respetarlo por el resto de tus días en la salud y la enfermedad, la felicidad y la tristeza ¿hasta que la muerte los separe?— No voy a negar que en ese momento guardaba la duda por decir que no pero entendí que con Josh ya no tenia futuro y se supone que el día anterior todo había terminado.
—Si, acepto.
—lo que hoy se a unido que no lo separe el hombre, se pueden besar— Y exactamente así lo hicimos, nos besamos sin vergüenza a nada, como los amigos, novios, esposos y amantes que ahora somos.
Cuando salí de la iglesia allí estaba el, en una esquina donde nadie lo notaria sin embargo yo lo hice, el solo asintio, acepto su derrota y tomo una maletas que traía consigo, tiempo después me entere que estaba en Atlanta como fotógrafo de modelos y haciendo su vida con una bella chica. Entendí que solo se había presentado para despedirse, decir nuestro ultimo adiós silencioso y guardar nuestro amor bajo llave con la libertad de pensarnos de vez en cuando.
Ahora yo espero un bebe de mi esposo, el hombre casi perfecto.
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Bueno chicas este es el final de esta historia, disculpen todas mis faltas. Esperó que les halla gustado y gracias por leer.
Un beso enorme
