CAPÍTULO 57

1.3K 86 8
                                    

CHRISTIAN GREY
Estoy tan concentrado jugando con mi princesa y mi campeón que no me había dado cuenta de la presencia de mi madre, está sentada con mi maravillosa esposa en el césped y en este instante se abrazan como si fueran madre e hija y por supuesto que lo son grita mi subconsciente, desde el momento que Ana llegó a mi vida y aún más cuando nos casamos mamá siempre ha dicho que no ha perdido a un hijo si no todo lo contrario que ha ganado una hija.

Al parecer mis hijos también están muy concentrados en nuestro juego porque no han notado la presencia de su abuela y en cuanto se den cuenta me dejarán en el olvido para ir a saludar a a mi madre. Almenos esto me dejará descansar un poco, sonrío como un hijo de puta con suerte porque soy afortunado de la familia que tengo, empezando por mi esposa que es una mujer inteligente, sencilla pero con clase, guapa, con un corazón que vale oro, sexy y una diosa en la cama es simplemente admirable y me ha dado los mejores regalos a Ted a Phoebe y por supuesto ese bebé que se está formando dentro de ella que sin saber si será niña o niño lo amo con la misma intensidad y locura con la que amo y adoro a mi familia.

La edad me está pasando factura ya que necesito un vaso de agua o morire mientras mis hijos corren y corren como si fueran dos robot a los que no se les termina la carga así que decido parar el juego y los llamo, quienes obedecen al primer llamado, les digo que es momento de descansar porque deben ir a saludar a la abuela, mientras les indicó dónde esta, no he terminado de decirles cuando ya estan corriendo hacía ella.

Cuando llegó, saludo a mi madre y ella me observa con ojos llenos de amor y nostalgia, me imagino que verme jugar con mis hijos le recordó cuando Carrick jugaba con nosotros así como también admira en lo que Ana me ha convertido.

Madre te quedas a cenar con nosotros? Mi padre no tardará en llegar, necesitamos platicar sobre unos asuntos.
-Esta bien hijo me quedo a cenar.
*Carrick cenará también con nosotros? Pregunta Ana
•Creo que sí amor.
*Okay iré a decirle a Gail que agregue dos platos más.
Vamos Ted y Phoebe hay que irse a bañar.

•Madre te importaría quedarte con Gail o en la sala, quiero ayudar a Ana a bañar a los niños y yo también necesito un baño.
-Por supuesto que no hijo, ve y ayudale a Ana con mis nietos.
•Gracias mamá.

•Entró a la casa y me dirijo a las escaleras y veo a Ana subiendo con Ted y Phoebe, creó que no le gusto nada la idea que Carrick cenará con nosotros.

•Nena la llamo.
Ella inmediatamente fija sus hermosos ojos azules sobre los mios.
*Si amor?
•Espera te ayudaré a bañar a estos enanos.
*Ok andando.

•Cuando Phoebe y Ted están listos les digo que bajen a la sala y le hagan compañía a su abuela.
Ted y Phoebe salen corriendo y les grito que no corran al bajar las escaleras. Ana solo me sonríe.

•Nena te molesta que Carrick cene con nosotros? Se que debi haberte preguntado antes, lo siento.
*Amor es tu padre y por supuesto que no me molesta que cene con nosotros, esta es tu casa...
Me molesta que Anastasia diga que esta es mi casa.
Anastasia sabes muy bien que me molesta que digas que esta es sólo mi casa.
*Christian déjame terminar por favor.
•Okay le digo mientras la toma de sus manos.
*No me molesta que él cene con nosotros en lo absoluto, porque él está en mi casa y no voy a permitir que me falte el respeto en mi hogar.
Sonrio al escucharla y le doy un apretón de manos.
Me alegra que pienses así nena. Pero me puedes decir entonces porque estás incómoda?
*Estoy cansada amor, ha sido un largo día y cada día tus hijos tienen más energía.
•Si gustas puedes irte a descansar después de ducharte y le digo a Gail que suba tu cena.
*Quiero cenar con ustedes amor.
•Pero después te irás a descansar entendido.
*Si señor.

•Llegamos a nuesta habitación y Ana comienza a desvestirse, yo hago lo mismo pero no puedo quitar mis ojos de su escultural cuerpo y sobre todo de su vientre, saber que allí hay un nuevo ser que dentro de unos meses podré cargar y dormir en mi pecho, me llena de muchísima emoción.
*Un dólar por sus pensamientos señor Grey.
•Quieres saber en qué pensaba?
*Por supuesto.
•En que ya quiero que ese bebé nazca y poderlo llenar de besos y mimos.
*Con calma señor Grey.

•Después de tomar una deliciosa, refrescante y necesaria ducha con mi esposa nos ponemos algo ligero para poder bajar a cenar.

•Lista nena?
*Solo necesito colocarme mi arete y mis zapatillas.
•Mientras Ana se termina de colocar su arete, me arodillo y le ayudo a poner sus zapatillas.
*Gracias cariño.
•Me encanta complacerte y lo sabes. Además con tu ritmo cenaremos mañana digo bromiando.
*Es usted muy malo señor Grey. Dice Ana colocando sus ojos en blanco.
•De verdad me hiciste esos ojos ?
*Por supuesto señor Grey y ahora si estoy lista, bajemos a cenar.
•Tenga usted por seguro señora Grey, que tendrá un merecido castigo por haberme puesto esos hermosos ojos azules en blanco. Recuerde que es de muy mala educación.
*Creo que le había comentado antes señor Grey que amo que mi esposo me castigue! Siempre y cuando lo haga con amor.
•Pues dejeme decirle dos cosas señora Grey; la primera tiene usted un esposo muy afortunado y la segunda es que todo lo que su esposo le entrega lo hace con amor porque está locamente enamorado de ella.
*Te amamos mi amor.
•Y yo a ustedes nena. Ahora sí bajemos antes que mi madre suba a buscarnos... Ambos reímos.

Tomo a Ana de la mano y salimos de nuestra habitación, al bajar las escaleras escuchamos voces provenientes de la sala, son de Grace y Carrick y por supuesto la de mis hijos.
Le doy un ligero apretón en la mano a Ana para que sepa que todo estará bien, ella me regala una dulce sonrisa.

50 Sombras En FamiliaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora