incomodo? o excitante??

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Tenia aun pegado al hombre que no lo graba ver pero si sentir, y en este momento solo me distraía la ereccion que mantenía pegada a mi trasero y la cual no lograba apartar, en cuanto la canción paso de una lenta a una rápida sentí como sus manos se aferraban aun mas, pero esta ves en lugar de apricionarme solo me giraron logrando que yo le identificara...el chico de la tienda, en lo poco que logra ver de el note un impecable traje negro que dejaban a la vista solo los tatuajes del cuello, pero por mas que me esforze en no mirar sus ojos una de sus manos llego a mi mentón levantándolo y guiandome directo a el

- que as bebido -

Lo deje con la pregunta en el aire y comencé con mi baile, llevaba mucho sin moverme como para detenerme por una tontera, antes de cerrar mis ojos y dejarme llevar la sensualidad de la canción logre mirar el rostro de fastidio de ese semi dios que se esforzaba por preguntar cosas sin sentido alguno para mi....

En cuanto comenzó a sonar Crazy- beyonce me aparte aun mas de el mientras me movía al ritmo de la musica sacando a relucir gran parte de la cobertura que tenia mi vestido en mi pierna, en cuanto iba en el ultimo coro casi acabándolo abrí mis ojos para verlo a el y acercarmelé dejando una corta distancia para darme la vuelta y sacar mi trasero hacia atrás sin lograr tocarlo pero casi rozándolo para luego ir por otra copa dejándole sólo

- un whisky triple con agua tónica - le grite al cantinero

No paso mucho cuando mi trago llego junto con el halago del cantitero por mi pequeña performans, me aleje un poco con la bebida en las manos y me la tome lo mas rápido que pude, no por que me gustara sino por el contrario, era lo único que me permitía beber y que luego yo no me tirase por las ventanas por el dolor de cabeza.

Deje el vaso que contenía el líquido ámbar en una mesa ya vacío, para volver con mi noche y con el juego que no había planeado, solo que ahora no seria con el, ahora seria para el

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Desperté desorientada y mirando a cada rincón que me permitía mi visión, pero aun no reconocía mayor cosa, me estire entes de salir de entre medio del cobertor de lo que pensaba que era una cama y me levante para saber donde estaba.

Tenía frente a mi una puerta hermética negra y ya había cruzado gran parte de la casa aunque no había nadie, empuje la gran puerta y lo vi sentado en uno de los taburetes con una tablet en la mano, me quede mirándole sin decir ni hacer nada hasta que el hablo

- Phoebe no creo que tengas mucho tiempo, y por lo que pienso tu padre tampoco- dijo sin mirarme

Solo asenti y di un paso hacia atrás para ir por lo que se me allá quedado

- desayuna, hay tiempo -

En cuanto me senté en frente de el note cada platillo sobre la mesa con diferentes preparaciones frente a mi

- esto parece un bufete - susurré

- no sabia lo que gustabas Phoebe, solo come lo que gustes -

Asenti y me serví algo de fruta con hot cakes con sirope y café, en cuanto acabe salí de la cocina aun con el viendo la tableta y volví de la habitación de donde salí para ir por mis cosas

Termine con un vestido mas apropiado para en día y mis tacos, no tenia idea donde estaba el vestido de la noche paro poco me importó, aunque no sabia que hacer, desperté en otra casa, con el, y sin recordar mayor cosa que el whysky con el agua tónica que bebí, volví con aquel hombre que me esperaba y en cuanto el resonar de mis delicados tacos estuvo en la casina obtuve esa mirada azul profundo de pies a cabeza, y de vuelta una y otra vez

- solo me vengo a despedir - dije casi en un susurro - ah y gracias, en cuanto lo lave te lo entrego -

- no es necesario Phoebe, es un placer verte en algo mas apropiado -

- ni es mayor problema mandarlo o entregartelo en persona, estoy segura que a tu novia no le gustaría que yo tuviese este vestido -

Escuche la gran risotada que dio el ojiazul al mismo tiempo en que se levantaba y caminaba hasta mi deteniéndose en cuanto nuestros cuerpos estaban a unos milímetros de tocarse lo cual llevo a cavo pero con sus dedos largos y delgados que acomodaron ni cabello tras mi oreja, dejando que una gran descarga de electricidad acabase en el vértice de mis muslos 

La hija de GreyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora