Liam Díaz Pov
4 de Marzo
-¡Habla de una puta vez Abigail, no me obligues a usar la navaja aquí mismo!-Le gritó el enfermo del pasillo.
-No hagas algo de lo que te puedas arrepentir después, Nathaniel, piénsalo dos veces- Le dice ella tranquila.
Abro los ojos sorprendido por la calma que tiene a pesar de tener una NAVAJA en su CUELLO.
-No tengo una puta mierda de que pensar, así que habla y dime quién es- Ella suelta una risa mientras rueda los ojos.
-Si quieres hacerlo, simplemente hazlo de una vez, no te des tantas vueltas por favor, que me aburro- Esté le grita que se calle- ¿O que me vas a hacer, eh, Nathaniel? ¿Matarme? Por favor, está no es la primera vez que me amenazas de muerte, sin embargo, yo sigo igual de viva que antes ¿O no?
Nathaniel aprieta más su agarre hacia Abigail mientras le susurra algo enojado, ella vuelve a rodar los ojos.
-Hazlo, ¿O es que acaso no te dan los huevos?- Note la neutralidad que lo decía y me sorprendí aún más.
Sin embargo algo me hizo querer mirar sus manos, las cuales estaban temblando levemente, supongo que ella también lo noto y cerro sus manos en puños.
Vale, estaba muy nerviosa y tenía miedo.
Pensé en hacer algo para poder ayudarla pero justo Nathaniel se dio vuelta hacía toda la clase que aún no había salido del salón.
-Todas las mujeres con el pelo negro vengan al frente, los demás, siéntense- Lo dijo con una autoridad increíble, y casi le hago caso, pero luego vi a Angie.
Mierda, ella era pelinegra.
No se de donde saque la creatividad, pero de pronto se me vino una idea a la cabeza y tome a Angie del brazo para que se siente.
Ella me vio nerviosa pero yo le hice un gesto para que se quedara quieta.
Volví la vista al frente en donde realmente todas las mujeres pelinegras iban al frente, quede impactado como nadie hacía nada, ni siquiera el profesor.
Me dio un poco de rabia, y más cuando vi que Nathaniel se dio vuelta con Abigail para examinar a las mujeres.
No se porque lo hacía pero no importaba, no se había dado cuenta de que Angie no había ido, así que me gire rápidamente a Angie.
-¿Tienes un moño?-Le susurró.
Ella asiente y me lo pasa, hago que se agache y le hago un peinado que si mi santa madre lo viera le daría un ataque nervios por lo mal hecho que estaba, sin embargo era necesario para que quedara bien.
Ella en ningún momento se quejo, solo me miraba asombrada al ver que la estaba ayudando.
-Ponte esto-Le paso un gorro que saque de la mesa de atrás- ¿Tienes otra cosa que no sea tu chaqueta para ponerte?
Ella negó mientras se ponía el gorro, pensé a toda velocidad en que poder ponerle para que pasara aún más desapercibida, pero no se me ocurría nada, hasta que me mire, claro yo tenía puesto una sudadera.
Me la quite lo mas disimuladamente que pude y se la puse a ella, le arregle el gorro, sin embargo su cara aún seguía libre, por lo que si el le sonaba su rostro estábamos jodidos.
Mientras pensaba en que ponerle ella me tomo la muñeca y me señalo el puesto de un tipo.
-El tiene unos lentes en el puesto-Susurró.
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Snakes In The Shadows
Teen FictionPor la anécdota Frase que seguro escuchaste y que utilizas ocasionalmente cuando la vas a cagar, es gracioso cuando lo dices una o dos veces a lo más ¿Pero que tú vida sea literalmente la definición de esa frase? (Ojo que también puede ser "Solo se...