I hate you, but I love you...

Capítulo 2. Bienvenida extraña

Ya habían pasado 5 días desde que me mudé con Violet y Isaac. Por ahora me estoy adaptando bien con la nueva ciudad, había estado buscando trabajo en algunas cafeterías para conseguir dinero y poder pagar mi 'alquiler'.

Eso no me preocupaba para nada, lo que sí que me preocupaba bastante era el instituto, no me podía dormir, siempre me quedaba pensando si encajaría con los demás o si tendría una enemiga ya el primer día  (espero que no).

Ya ha pasado una semana, lo que significaba que ya llega la hora de mi muerte, vale no.., pero es casi lo mismo. Estaba en secretaría esperando a que el señor de enfrente con cara de amargado me diera el horario.

Por fin el señor me da el horario y suena el timbre, en ese momento mi corazón empiaza a palpitar cada vez más rápido. Relájate Mia, relájate, venga piensa en cosas bonitas, gatitos, helado, Cameron Dallas... Vale lo estaba consiguiendo, ya me estaba tranquilizando poco a poco.

Después de mi mini infarto me dí cuenta de que me había quedado sola en el pasillo, ¡no había nadie!

El edificio estaba distribuido en 3 plantas y cada una representaba una letra, en este caso me había tocado la C15. Empecé a subir escalones lo más rápido posible, de dos en tos y de tres en tres. Espero que nadie me esté vigilando ahora mismo...

Ya había llegado al aula, estaba delante de la puerta, me peiné un poco (ya que parecía que hubiese estado en una guerra)  llamé a la puerta y entré.

-Hola, lo siento por interrumpir, soy nueva alumna en este centro y me ha costado un poco encontrar el aula...- Intenté sonar lo más formal posible.

- Usted ha llegado 10 minutos tarde a mi clase, espero que esto no vuelva a pasar dígame su nombre señorita.

- Mia... Mia Martin.

- Está bien, Mia Martin, siéntese.

Me había olvidado por completo que había más gente en la habitación, me giré y empecé a buscar un sitio libre. Sólo quedaban dos, al lado de un japonés o al lado de un gótico. Opté por el japonés ya que estaba más cerca.

La profesora continuó con la clase,  saqué mis cosas y empecé a apuntar lo que escribía en la pizarra sobre la teoría de Pitágoras. De repente el chico japonés me lanzó una gomita y me dijo:

-Anata wa bōifurendo o motte imasu ka?*

¿De qué me está hablando?

- No entender.- Le dije haciendo señas a la vez.

Ya habían pasado tres horas, era la hora del recreo. Conocí una chica muy simpática llamada Chelsey, me dijo que le esperara en la puerta principal a las 11:15 y eso es lo que hice. Estaba bajando las escaleras y de repente lo vi todo negro, no me había desmayado, alguien me había tapado los ojos.

-¿Quién eres? Suéltame.-

Lo único que había conseguido fue que me tapara la boca.

Ya vi la luz, estaba en algo como un sótano.

-No hagas preguntas, quieres formar parte de nuestro grupo, ¿si o no?- Me preguntó o mejor dicho me obligó a responder una chica rubia.

Estaba rodeada por 5 personas, 3 chicos y 2 chicas.

Me quedé sin palabras, ¿que es esto?¿van a hacer una secta o qué?

- Relájate Trish la estas asustando.

Miré en dirección de quien había dicho eso, era un chico alto, moreno y de ojos color miel.

-¿Estáis locos o qué? Pues claro que no voy a querer formar parte de vuestro grupo.

Después de eso me fui corriendo de allí, no sabía a donde ir pero mi instinto me decía que abandonara ese sitio.

-¡Lo lamentarás!-Me gritó la chica loca llamada Trish

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*¿Tienes novio? En japonés.

Espero que os haya gustado el capítulo, muchas gracias por leer la novela.

Que os a parecido, ¿creéis que por  haber rechazado le pasará algo malo a Mia?

El jueves subiré el siguiente capítulo. XO❤