Capítulo 8- El Báculo de la Destrucción

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A la mañana siguiente...

En la Academia de Magia de Tristain había mucha conmoción por los eventos de la noche pasada, como si hubieran agitado un avispero. ¿Por qué? Porque el Báculo de la destrucción había sido robado.

Y había sido robado usando un Golem de Tierra para destrozar la pared de la cámara.

Los profesores de la Academia de Magia que se reunieron dentro de la cámara estaban sin palabras al ver el inmenso agujero de la pared.

La inscripción en la pared hecha por Fouquet la Tierra Desmoronadora lo decía todo:

"Tengo su Báculo de la Destrucción. Fouquet la Tierra Desmoronadora".

Llegados a este punto, los profesores de la academia sólo podían murmurar y susurrar:

-¡Es ese ladrón que ha dejado limpios a los nobles, Fouquet la Tierra Desmoronadora! ¡Qué atrevimiento robar a la academia!

-¿Qué hacían los guardias?

-Incluso si los guardias hubiesen estado cerca, son inútiles. ¡Son sólo campesinos! Y hablando de eso, ¿qué noble se suponía que hacía la ronda por la noche?

La señorita Chevreuse estaba ansiosa. Se suponía que era ella la que estaba de guardia anoche.

-¿Pero quién podría robar a la academia?- pensó mientras dormía ruidosamente en su habitación en vez de estar junto a la puerta de la cámara como todos los nobles debían hacer cuando les tocaba la guardia.

Uno de los profesores la señaló inmediatamente y dijo:

-¡Señorita Chevreuse! ¡Se suponía que sería usted quien haría guardia anoche! ¿Tengo razón?

La señorita Chevreuse rompió a llorar.

-Lo siento mucho... muchísimo...

-Incluso si inundara la academia de lágrimas, ¿volvería el báculo? ¿O va a pagar por él?

-Pero... pero acabo de terminar de pagar mi casa- la señorita se arrodilló y sollozó.

Justo en ese momento, el Viejo Osman llegó.

-Oh... este no es el mejor momento para ser rudo con las damas, ¿verdad?

El profesor que había reprochado a la Señorita Chevreuse contestó:

-Pero, Osman, ¡la señorita Chevreuse falló en su cometido! ¡Estaba durmiendo tranquilamente en su cama cuando debería haber estado de guardia!

El Viejo Osman cogió afablemente su larga barba mientras miraba al estirado y tembloroso profesor.

-Hmmm... ¿cuál era tu nombre?

-¡Es Gimli! ¿Ya se le ha olvidado?

-¡Oh, cierto! ¡Gimli! Bueno, señor Gimli, no te enfades. Siendo sinceros, ¿cuántos de vosotros pueden decir que siempre están en sus puestos cuando tienen una misión o un cometido?

Los profesores se miraron unos a otros y bajaron sus cabezas avergonzados. Reinó el silencio.

-Bueno, esta es la situación en la que nos encontramos. Hablando de responsabilidad, creo que todos los presentes, incluyéndome a mí, tienen que ser culpables de este incidente. ¿Por qué pensamos que un ladrón no podría nunca atacar la academia? ¿Es acaso porque el número de magos que tenemos nos da la seguridad de que no seremos atacados? Este pensamiento es totalmente equivocado- el Viejo Osman miró el agujero en la pared y continuó-. Fue nuestra complacencia lo que le dio a Fouquet el coraje para atacar, y robar el Báculo de la Destrucción. Todos somos responsables.

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⏰ Última actualización: Oct 26, 2014 ⏰

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Zero no Tsukaima Español:Volumen 1 - El Familiar de ZeroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora