Amor prohibido (Jikookmin)

Capitulo 24 El final de nuestro amor

Paso una semana desde que Jimin se había ido, Alex se quedó a lado de Jungkook apoyándolo, Yoongi hizo lo mismo aunque cuando Alex no estaba con el, ya que ambos chicos no se toleraban en lo absoluto por lo que había sucedido anteriormente, entre ellos. Por su parte Jungkook estaba demasiado deprimido, no comía, no dormía mucho y se la pasaba llorando todo el tiempo, quería rechazar la beca que le habían dado para ir a Seatle estudiar composición, canto y baile.

Para suerte Alex había hablado con el y había hablado para que le ofrecieran una prorroga para que el diera una respuesta definitiva, el necesitaba irse también aunque el no quisiera... Muy en el fondo, aunque Jungkook no lo dijera sabia que sus amigos tenían razón. Pero... Siempre había un pero, no quería irse por que pensaba que Jimin se arrepentiría y volvería aunque bueno ya había pasado una semana desde que se fue.

El destino siempre juega con quienes tienen un deseo y la decisión de irse no la tomo el, mas bien la tomo la vida y de una forma cruel y suficientemente dolorosa, el día del trágico accidente fue un día en el que se sentía mas cansado y triste de lo normal, fue obligado por Alex y Yoongi a salir y despejarse, Yoongi tuvo algunas cosas que hacer así que Alex hizo salir a Jungkook y tomar un café.

Una vez fuera Jungkook comenzó a quejarse, se volvió muy quejica, malhumorado y antisocial. Así que no era nuevo que el se quejara por que el sol brillaba, por que hacia calor, por que no quería salir, Alex se hizo de oídos sordos y lo llevo hasta la cafetería en donde el antes trabajaba, se quejo nuevamente Jungkook ante aquello. Aun asi entraron aquel establecimiento; Alex se sentó seguido de Jungkook, aun enojado agradecía a sus amigos que lo llevaran aquel lugar por que le gustaba ir ahí, sobre todo por aquella fotografía colgada en la pared, así que siempre que podía y que la tristeza se iba un poco iba a tomar café ahí o siempre que sus amigos lo sacaban a la fuerza; pidieron algo y comenzaron a platicar.

Todo iba tranquilo hasta que sacaron el tema del festival de las luces. Jungkook se quedo en silencio y después volteo a ver a Alex.

-Oye, tengo una pregunta que hacerte

-Dime

-Recuerdas ese día, ese día que te vi saliendo del auditorio detrás de Jimin -Jungkook vio confusión en la cara de Alex- osea una semana antes del festival de las flores, recuerdas que yo iba entrando al auditorio y Jimin salia mientras tu ibas detrás de el.

-Oh si ya recuerdo, ¿que pasa?

-¿Por que lo seguías? -Alex se quedo un momento callado ante aquella pregunta, el sabia que algún día Jungkook preguntaría pero no sabia como responder aquello, ya que una persona cuerda diría que el estaba loco.

-Hubo una vez en la que nuestros padres nos contaban una historia, sobre una canción que podría traer una maldición o una bendición según la persona que lo tocara. -suspiro el levemente- Jimin a escondidas de todos estuvo hurgando entre las cosas de su padre, encontró de que melodía se trataba, y la tocaba muchas veces a escondidas de todos; hasta que una vez yo lo escuche tocar -vio como sus ojos se cristalizaban- después de eso Yoongi me violo... Pasaron algunas semanas y lo volví a escuchar tocar esa melodía y mi hermano se accidentó y quedo en coma -sonrió levemente- después me entere que solo la toco dos veces en aquella ocasión solo y cuando lo toco por tercera vez yo lo escuche en las dos veces que lo hice.

Jungkook se quedo pensativo un momento no podía creer lo que estaba escuchando.

-Pero ¿como es que? ¿por que?

-Encontramos una parte de aquel cuento, si la persona que la tocaba, lo hacia tres veces sola la maldición o la bendición seria para el pero si una persona lo escuchaba antes de que la tocara tres veces solo la maldición o bendición pasaba a esa persona que lo escucho -dijo el viendo a Kook- por eso me enoje con Jimin, por eso yo... No quería que hiciera eso. Jungkook no podía creer aquello, se mentalizo con un "solo es un cuento para niños" pero era demasiado, era muchas la coincidencias.