El viento chocaba en mi rostro mientras iba en mi skate.
Bueno creo que no siempre es bueno mudarse a mitad de año a otro país, pero ¿Qué se le puede hacer?. El trabajo de mis padres lo quisieron así.
Soy de Argentina pero por el trabajo de mis padres me tuve que mudar a Londres Inglaterra, es complicado pero ¡Qué más da!, les contare un poco sobre mi…
Mi nombre es Camila Bianchi, tengo 17 años, cabello castaño oscuro con las puntas de rosado u azul, ojos marrones, alta, cuerpo promedio. Tengo un carácter duro, no me llevo bien con las chicas los amigos que eh tenido han sido todos hombres, personalidad variada. Tengo un hermano un año menor que yo Axel el cual es la persona que más amo en el mundo.
Mi familia tiene una gran cantidad de dinero, pero no soy de esas personas que por tener dinero se cree superior al resto, es más soy lo contrario me gusta compartir mi dinero a personas que lo necesitan.
Estoy yendo a mi nuevo colegio, no quise ir en el auto con mi madre así que estoy yendo en mi skate. Fue buena idea ya que pude cambiar mi vestuario luego que mamá saliera de casa. A mamá no le gusta mi forma de vestir dice que es “poco femenina” mi modo no soy una Barbie como ella quiere que sea.
Llegue al colegio, un colegio privado Agg! Los odio, más bien odio a las personas que asisten a estos colegios, todos finos –Chetos se diría en mi país- camine a la entrada, abrí la puerta y ahí estaba mamá con Axel. Pude deducir por la mirada de mamá que no le gusto mi vestuario. Lástima por ella.
- ¡Dios! Camila te dije que trajeras la otra ropa- se quejó.
- ¿Ups? Ya Ma no te enojes que te arrugas, además ¿Qué tiene de malo esto?- apunte mi vestuario.
Mamá quería que me ponga una pollera tubo que llega a las rodillas, una camisa blanca y un saquito color negro, con una cola alta como peinado Mmm… NO. Entonces cuando mamá se fue subí a mi habitación tome un jeans negro rajado en las rodillas, una remera musculosa con un estampado de Green Day, una camisa a cuadros rojos y negros y mi mochila, solté mi pelo y listo.
- ¿Por qué no eres femenina?
- ¿Qué tiene de malo? Es cómodo y hasta se me ven las rodillas como tu querías- Axel rio y mamá le mando una mirada asesina tipo ¬.¬
- Punto para Cami, van 1 a 0 este día- dijo Axel haciendo el conteo con sus manos
- Bianchi?- dijo una chica rubia con gafas saliendo de atrás de una de las tantas puertas que ahí allí.
Nos paramos y caminamos hasta la chica.
- Pueden pasar al despacho- sonrío.
- Gracias- dijo mama sonriendo y paso enfrente a la chica, sonreí falsamente y entre al despacho.
- Buenos días- dijo la directora sonriendo. Una mujer de unos 38 años con una tintura de pelo más falso que el culo de Nicky Minaj.
- ¿No se cansan de sonreír taaaaaaan falsamente?
- Hola buenos días- agrego mamá
- Tomen asiento- nos sentamos los 3- Bien, soy Susan Stevenson, la directora- “No me digas, no me di cuenta” pensé- Como sabrán esta escuela es muy estricta y exclusiva con los alumnos que ingresan…
Luego de un gran discurso por parte de la señora Stevenson por fin nos dejaron ir :D
Nos dieron nuestros horarios, libros y materiales que usaremos en lo que queda del año, y nos dijeron que podíamos faltar la primera hora de clases para acomodar nuestros casilleros. ¡¡Yeeeeeey!!
