I would wait for you a Thousand Years || H.S || EDITANDO

LI

Harry 

Baje del carro de Louis rápidamente, aunque él me gritara que lo esperara. Últimamente siempre pasaba aquello, el camino a la escuela era horriblemente silencioso sin contar las pocas veces que Louis me trataba de sacar plática, pero al final se aburría ya que jamás le contestaba.

Las cosas entre Louis y yo estaban mal desde la vez que habíamos tratado de hablar con Jess. Bueno, en realidad era yo el que andaba mal y no solo con Louis, si no con todos. Cada vez que alguien me trataba de hablar simplemente los ignoraba y seguía mi camino. Y sinceramente no lo hacía por ser odioso, solo que había cambiado mucho estas últimas semanas, y prefería estar solo sumergido en mis pensamientos que hablar con las personas de mis tontos problemas internos (que me mataban por dentro).

Camine por los pasillos, hoy era jueves, y los pasillos estaban muy poblados aunque faltaran aproximadamente quince minutos para que las clases iniciaran. Las personas me miraban mientras pasaba, algunos murmurando y chismoseando de mí, mientras que otros se burlaban.

Llegue a mi casillero el cual estaba rodeado por personas por los lados. Un grupo de chicos estaban al lado izquierdo, y un grupo de chicas estaba al derecho. Ambos grupos me observaron caminar a mi casillero, las chicas me vieron coquetamente y los chicos burlones.

-Ese es Styles, escuche que lo echaron de equipo de soccer por Niall Horan.- Susurro uno de los chicos a sus amigos, casi inaudible. Los otros dos voltearon a verme ''disimuladamente''.-

-Yo escuche que va dejando el año escolar y va a repetirlo.- rio el otro, aunque también lo decía en secreto.-

Por el otro lado las chicas quedaban mirándome y dos de las tres pedían mi número, mientras que la otra intentaba tocarme. Termine de poner mis cosas en el casillero rápidamente, y salí de allí, no sin antes mirar a los chicos, quienes me miraron de vuelta un poco asustados.

Me sentía molesto, ahora siempre ocurría esto. Los chicos se sentían superior a mí por culpa de Niall, otra razón para odiarlo.

Camine a mi clase de Biología, era la primera de un largo día. Camine con mi cabeza agachada para no ver a la pareja al frente mío, aunque sinceramente oír sus risas no fue mucho mejor. Fui hacia mi asiento al fondo de la clase, Liam me esperaba como de costumbre.

-Hola Harry.- Dijo con una sonrisa en su cara, como siempre. No se cómo le hacía para estar feliz siempre, y para tratarme bien aunque no me lo mereciera.-

Yo simplemente le asentí sin decir ninguna palabra y me senté en mi asiento.

La clase se pasó horriblemente lenta entre las risas de Niall y Jess. Liam me intentaba hablar un poco, haciendo bromas de la profesora o de la clase, pero no le ponía mente. No le ponía mente a ninguna persona, y sentía como todos se iban alejando de mi por cómo me estaba portando, pero no me importaba.

Solo quería que Jess me hablara, pero ella ni siquiera volteaba a verme cuando estaba junto a Niall (y tampoco cuando no estaban juntos).

Así como la campana de Biología, las otras dos sonaron lentamente, hasta que al fin la campana para el recreo sonó. Agradecí a Dios, porque después del recreo ninguna clase me tocaba con ellos dos, sería más fácil ignorarlos.

Me encamine a la cafetería donde no me tomo mucho tiempo encontrar a mi mesa de amigos. Louis y Tania se encontraban abrazados y no pude evitar sentir un poco de celos de su relación aunque también sentí felicidad por mi amigo. A su lado Anni y Liam se hablaban animadamente. Zayn y Liz no se quedaban atrás tampoco, aquellos parecían que estaban en un concurso de miradas, porque no dejaban de verse el uno al otro. Bufe, todos parecían estar con las personas que les gustaban, todos excepto yo.

Agarre mi comida y camine a donde se sentaba Ed escuchando música, me gustaba sentarme junto a el ya que era el único que no me hacía hablar. El me asintió con una sonrisa, sin quitarse los audífonos, a lo que agradecí demasiado y asentí devuelta. Comencé a comer en silencio, Jess y Niall habían parado de sentarse con nosotros desde hacía ya varias semanas. Ahora se sentaban solos en una mesa a la otra esquina de la cafetería.

La campana toco justo cuando daba mi último bocado de comida. Me aleje de mis amigos apenas sonó, y comencé a caminar por los pasillos para llegar a mi clase preferida. La única clase por la que la escuela no me parecía un infierno completo: Arte.

-¡Hola Harry!- dijeron a mi lado. Con mucha fuerza de voluntad voltee a ver a Taylor que me saludaba. Yo sacudí mi mano en forma de saludo.- ¿Qué tal estas Harry? – Me ofreció una sonrisa mientras caminaba junto a mí. Hice una mueca respondiéndole.-

-¡Harry, por favor para un segundo! – Hice lo que me pidió y ella me miro con ojos expectantes.- Todos estamos preocupados por ti, Haz ¿Qué ocurre? Ya no hablas con nadie, no miras a nadie, solo nos ignoras. ¿Qué ocurre?-

-Nada- Respondí por lo bajo.-

-¡Créeme que me siento tan feliz de haberte sacado al menos una palabra! –Me ofreció la sonrisa más grande que eh visto, pero no podía devolverla, simplemente no podía.- ¡Pero enserio Harry! Todos sabemos que algo te pasa, y queremos ayudarte pero nadie sabe cómo. ¿Si sabes que puedes confiar en nosotros no? ¿Sabes que puedes confiar en mi Haz? –Dijo suavemente.-

-Escucha Taylor... – comencé a hablar- Sé que todos están preocupados por mí, pero yo... yo solo necesito estar solo. No necesito de nadie. –Eso era lo más que había hablado en más de un mes con una persona, y sinceramente se sentía algo bien. Sé que había sido muy duro con Taylor pero no me importaba, me aleje de allí y entre a mi clase de artes. –

La campana ya había sonado, pero la maestra me dejo entrar sin problemas y a Taylor también, quien entro segundos después. Agarre mi lienzo, y otros materiales y comencé a alistarme para dibujar. Desde mi asiento podía sentir la mirada de Taylor en mí, pero no me voltee a verla. Agarre mi lápiz y observe mi dibujo, estaba casi completo pero faltaban nada más unos detalles.

Comencé a alinear las líneas externas del dibujo hasta que al fin conseguí el resultado que quería. Agarre mi teléfono y conecte mis audífonos para escuchar música y poder concentrarme mucho mejor en el dibujo. Este era el único momento en el que me sentía completamente bien a pesar de todo lo que me ocurría. La música y dibujar era lo único que podía crear un buen efecto en mí.

Comencé a hacer sombras para crear el efecto que la profesora nos había ensenado el primer día de clases. El dibujo era blanco y negro dejando todos los detalles que podía recordar y que iban bien en el dibujo.

Al terminar mi dibujo, baje mi lápiz y lo observe para ver cómo me había quedado. Por primera vez en lo que parecía una eternidad, sonreí, me sentía completamente bien con el resultado de mi dibujo.

Por primera vez en toda mi vida me sentía bien en algo que había hecho.

Sentía por primera vez orgullo de mí mismo.

Una mano toco mi hombro, haciéndome voltear a ver a la maestra que me miraba maravillada. Voltee a ver alrededor de la clase y note como éramos los únicos dos en la clase.

-¿Que paso con el resto de la clase?-Pregunté confundido.-

-La clase termino hace una hora Harry, pero te mirabas tan concentrado en tu dibujo que deje que te quedaras.- No supe cómo responder. – Y me alegra haberlo hecho ¡Este dibujo es hermoso Harry! ¡Es de los mejores que he visto en todos los años que he trabajado como profesora! –

-Ehm... gracias – Dije sin saber que más decir. –

-¡Harry! ¿Me dejarías llevar este dibujo a la competencia de arte?- Dijo agarrando mi dibujo en sus manos.-Es la próxima semana, y te aseguro que ganaras con este dibujo.- Dijo sonriendo.-

-En realidad, me preguntaba si me lo podría llevar hoy.- Dije apenado.- En verdad lo necesito, maestra.-

-Oh.- dijo con una sonrisa apagada.- Claro que te lo puedes llevar. Aun que es una pena no llevarlo a la competencia. – Dijo tristemente. – Bien te pondré tu nota y lo puedes recoger al final de clases. – Simpáticamente regreso a su escritorio.-

Salí de la clase de artes con una gran sonrisa en mi rostro. Primero porque artes me dejaba ese efecto. Segundo por haber terminado mi dibujo exactamente como quería. Y tercero, porque sabía en que usarlo.