I would wait for you a Thousand Years || H.S || EDITANDO

III

Harry

-¡Jesy! – Dije volteándome y corriendo hacia ella, estaba recargada en el marco de la puerta de la recepción. Sin pensarlo dos veces la abrasé, un abrazo que ella respondió al instante.

-Te extrañe mucho pequeña. – Le dije sonriente.

-Pues no tanto como para llamarme ¿cierto? – Dijo ella, podía ver como sus ojos se estaban cristalizando, dio la vuelta y comenzó a caminar en el pasillo, quería seguirla pero alguien me llamo.

-¡Harry, tus cosas! – me llamo la señora de la recepción, entregándome mi horario y el número de mi casillero en un papel.

-Oh, gracias- Le dije agarrando mis cosas rápido para alcanzar a Jess. La busque como por 5 minutos, hasta que al fin la encontré, estaba metiendo sus cosas en su casillero, se miraba tan tierna tratando de cargar todos sus libros y cuadernos. Voltee a ver los papeles que me había entregado la señora de la recepción. ¡Sí! Me había tocado el casillero al lado de Jessica. Corrí a donde ella al ver como algunos de sus libros se caían de sus delicadas manos. Recogí sus libros y los puse adentro de su casillero.

-Gracias.- Dijo ella sin siquiera voltear a verme.

-¿Qué haces aquí? Pensé que estarías con alguna de tus chicas. –Dijo mirándome tristemente pero a la vez con algo de rencor.

Eso era cierto me la pasaba con muchas chicas a la vez, las usaba, y luego no les volvía a hablar, o a veces sí pero muy poco. ¿Mujeriego? Si lo soy, pero solo lo hago para tratar de sacar a Jesy de mi mente, cosa que nunca pasa o pasara. Nadie nunca será mejor que ella. Esperen. ¿Estaba celosa? No, ella no estaba celosa, Harry, deja de hacerte ilusiones.

-Oh vamos Jess, tu sabes que eres la chica más importante para mí. Tú eres mí- pensé muy bien lo que iba a decir. – Tú eres mi mejor amiga. – Dije, como odiaba esas dos palabras, las odiaba con toda mi alma, ''mejores amigos'' ¿Por qué simplemente no que podía mirar como algo más que eso?

-Lo siento Jesy, enserio. Te lo juro que estaba contando todos los días, noches, minutos y hasta segundos a que llegaras. No sé cómo lo olvide. Lo siento, lo siento, lo siento- Dije haciendo un puchero.

-¿Lo prometes? – Pauso - ¿Prometes que ninguna de tus chicas se interpondrá nunca en nuestra Amistad? – Dijo ella volteándome a ver.

-¿Mis chicas? – Pregunte gracioso pero cambie mi expresión al ver que lo que decía era enserio.

-Harry...- comenzó a decir.

-Lo prometo.- dije poniendo mi mano en mi corazón.

-¿Por el meñique? – Pregunto cómo niña pequeña mostrándome su dedito.

-Por el meñique- dije uniendo nuestros dedos. Nuestras promesas de meique eran esas promesas que jamás de los jamases debíamos de romper, lo habíamos jurado hace muchos años atrás, eran nuestras promesas más importantes. – Ahora, ¿me perdonas? – dije haciendo una cara de niño arrepentido.

-Sabes que no puedo enojarme contigo Hazza. –Dijo abrazandome muy fuerte. – Te extrane mucho.-

-Igual yo, hermosa. – Le dije correspondiendo el abrazo. – Te extrañe muchísimo pero quisiera no tener este montón de libros para abrazarte mejor – Dije riendo y levantando un poco mis libros.

-Oh, claro, lo siento – Dijo ella un poco tímida. – Déjame, te ayudo. – Dijo agarrando uno de mis libros. – Así que, ¿cuál es tu casillero?-

-Ese - Dije apuntando el casillero que estaba al lado de ella. – Oh ¿enserio? ¿Seremos vecinos de casillero? – Dijo ella emocionada.

Terminamos de meter nuestras cosas en el casillero.

-¿Y tú ______? – Dije.

-¿Y yo que Harry? – Pregunto ella algo confusa.

-¿Prometes que ningún novio que llegues a tener se interpondrá en nuestra Amistad? – Le pregunte, debía saberlo, no estaba seguro de poder sobrevivir si Jessica me llegara a cambiar por otro.