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La mañana se vio amena,llena de rayitos de sol colándose por las ventanas.

Tan molesto.

Su despertar fue encontrarse cubierto por un abrigo en un sillón de su cuarto,y a la vista su hermano de medias al suelo,a costado del chico de la suerte.

Se hubiera puesto de mal humor,si no fuera por las tremendas vistas extravagantes.

White estaba hecho todo un hermoso desorden,con el cabello suelto y rebelde tocando el suelo y cubriendo parte de su rostro.

Todo un ángel,como siempre.

En cambio,el suertudo dormía abrazado a su almohada preferida de color gris,dejando a la vista ese redondo trasero al desnudo que bien recordaba fue suyo semanas atrás.

La tentación era grande.

Pero prometió ser decente por su querido hermano mayor,y así seria.

Se dispuso a levantarse y a despertarlos,notando que la lluvia había cesado por completo dejando un delicioso aroma a tierra mojada en el aire,colandose en la habitación.

El primero en despertar fue el pequeño superviviente,sobandose los ojos contrae las cobijas muy incomodo con la luz solar.

Le sorprendió un poco las maldiciones que soltó,al menos no era blanca paloma con esa boquita llena de palabras inpulcras.

White se levanto con mucha más dificultad,pero con su preciosa sonrisa,que no quería perder.

¿como alguien podía ser tan feliz en las mañanas?

Su corazón se derretía de amor para cuando se estiraba y le miraba entre el sueño y el despertar,aún con su bella sonrisa.

- buenos días - su voz era ronca,rasposa y baja.

Y aún así,como el sucio que sabia que era,se calentó.

¿como no hacerlo?,white era como un delirio sexual que no podía sastifacer más que por conexión espiritual.

Antes de que pudiera alguno de los dos despertarse por completo,se dedicó a lo mejor que podía hacer por el momento.

Huir al baño y atender el problema.

Así eran sus mañanas,realmente jodidas.

• • •

- ¿black? - miraba ya más despierto hacia la puerta del baño,confundido.

Nunca entendería por que se encerraba en el baño apenas el despertaba,¿seria para ganar tiempo y ducharse primero?

Ruin...solo black podía ser tan malvado a tan temprana hora.

Un pequeño cuerpo recargándose sobre su cabeza lo hizo salir de su mente,para encontrarse con un suertudo ido en el sueño.

Eso lo hizo reír,¿estaba o no estaba despierto?

- oye,pequeño - obtuvo un vago sonido de respuesta,confirmandole que estaba despierto.

O cercano a medio despierto.

- dime luck... - le respondió,sin atisbo de ir a moverse de su cabeza,dándole más ternura y motivos para reír.

- muy bien, pequeño luck,¿podrias levantarte? - hizo un ligero puchero,aún sin moverse para nada - vamos,¿asi eres por las mañanas?

Como respuesta,el pequeño finalmente se movió,sentándose y sobandose los ojos,mientras que el por fin podía verlo bien.

El torbellino de mariposas en su estómago no hizo más que volverse un huracán al ver tan linda criatura.

Tenia frente a él a un precioso chico con suerte,quien arrugaba la carita de sueño,y entrecerraba los ojos por no poder ver,mientras que vestía una camiseta grande que dejaba mucho a el lado más oscuro de su imaginación.

- ¿white?,oye,¿me escuchas? - despertó de su trance con pena,mientras el chico frente a él despabilaba

- disculpame,¿me decías? - estaba nervioso,¿en que se suponía que estaba pensando?

- te decía que,normalmente me levanto a las 5 de la mañana,william se pone muy loco a tocar ollas a esa hora... - le expresó,mientras se acomodaba la camisa sin mucho éxito - nunca dormí tanto.

Se lo pensó un momento,el no sabía quien era william.

- y ese,¿quien es? - lucky parecía ir a responderle,hasta que tuvo que cubrirse los oídos por un molesto ruido por todo el pasillo.

¿que rayos era ese ruido?

Se avecinó a la puerta,viendo como todos salían muy enfadados,y como corría por el pasillo el superviviente futbolista con las ollas de la cocina y con algunos sirvientes detrás tratando de detenerlo.

- ¡¡a-le-van-tar-se!! - en ese momento,supo la pesadilla matutina que sufría el pequeño lucky.

- ¡WILLIAM! - vio al mercenario salir del cuarto de jack,muy enfadado siguiendo al futbolista,y dejando atrás a un enojado jack y a un somnoliento minero - ¡esta vez si que no!,¡hijo de puta!,¡VEN QUE TE MATO!

ese vocabulario...

La risa proveniente de su habitación solo se confirmaba todo,el pequeño suertudo vivía eso cada mañana.

Vaya vida...más escandalosa.

Muy a su pesar,tuvo que aceptarlo en ese mismo instante,justo en el momento en que vio cómo algunos sacaban sus armas.

Tenían que irse o correria sangre en la mansión.

ĦØŁŁØŴ •°ιdenтιтy v°•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora