Durante toda su vida Tony Stark jamás sintió qué encajara en un lugar, parecía que nada podía darle esa ilusión de tener un hogar, una familia nació como el hijo del excéntrico multimillonario Howard Stark pero del cual jamás recibió un trato amable...
Asgard se encontraba pacífica dormida sin saber que su fin de paz estaba cerca...
Cuándo cierto ente entró pensó lo patéticas que esas criaturas dormían ignorantes del infierno que se desataria en cuestión de minutos
Ashanti se paseo por las frías calles de Asgard invoco a Raelius gobernante de las plagas
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—Su magestad! - Aque debo el honor de su llamado
—Esparce a tus hijos en Asgard pero no los mates, los que tengan la señal divina de Astian perdonales, aquellos que no hazles sentir el infierno en vida ni niños, ni mujeres serán salvados
—Así lo are su alteza
El demonio desapareció, miles de ratas, gusanos, moscas, mosquitos entre muchos otros llegaron azotando despertando a la gente, gritos desordenados, incluso el mismo palacio fue invadido
Ashanti sonrió era el primer día y los que vendrían serían todavía peores
Entró al palacio divisó a Odin dormido plácidamente deslizó los dedos por su cabello tan a pasible el ex rey de Asgard..
Pensó que era tan fácil matarlo en este momento prácticamente el manto real fue despojado de él, incluso aquel ojo que debería dejarle ver todo fue maldecido por los Antiguos Reyes de Asgard
Dejó fluir su poder en su dedos haciendo que estos entrarán por el aire a Odin, nada como la locura para ir destruyendo el alma de Odin..
Dejó el lugar y entró a él gran salón encontrando el otro objetivo de su misión
Invocando a él Rey del inframundo
—Yo Ashanti gobernadora de los Dioses Demonios te invoco oh poderoso Asmodeus rey del inframundo
El rey del inframundo apareció con una sonrisa siniestra frente a la Diosa
—Aque debo el honor Madre de los demonios que usted nuestra reina me haya llamado
Ashanti miró hacia el demonio frente a ella sonrió y lo miró de pies a cabeza se sentó en el trono de Odin, viendo ese reino que alguna vez la hizo arrodillarse caer por las manos de aquel que alguna vez la sello en aquella cueva... Había amado a Odin pero el la traicionó.
Fue libre gracias a la bondad del joven príncipe quien no la mato si no que le dio la oportunidad de renacer de sus propias cenizas le juro lealtad y por el destruiría a Asgard hasta las cenizas junto con aquellos que lo traicionaron
—Asmodeus necesito que protejas a los hijos de mi rey junto con su familia en Midnarg ellos son mortales y ahora que retornarán unos insectos necesito que los cuides
—Proteger mortales habla enserio su magestad, yo no soy niñera
—No te estoy preguntando si quieres o no, Lo vas a hacer sin replicar o yo misma te llevare a mi reino y me servirás en el, jamás volverás a salir de ahí tu sabes como es, no creo que eso lo desees
