Incómodo «Nicomaki coffe AU»

Capitulo dos

¡Beep!

...

¡Beep!

¿Tan rápido es de día?...creo que...no dormí nada...

No pude hacerlo, por alguna razón...vendría bien un café, es una lastima que no abran tan temprano, realmente me encantaría ir...¡Por el café por supuesto!

Me levante de mala gana, creo que a nadie le gusta levantarse muy temprano en un Lunes...bueno, creo que nadie le gusta levantarse. Fui a la ducha, hice lo que tuve que hacer y salí.

Rayos...todavía es muy temprano, pero valdrá la pena, así no tengo que soportar a toda la molesta gente. Me puse el uniforme de la escuela, me peine y me prepare emocionalmente para no golpear a ningún idiota. Salí de mi habitación y fui abajo, a la cocina, se encontraba mi mamá preparando algo.

—¡Oh, buenos días, Maki!—me saludo.

Hay una parte que me gustan de las mañanas, desayunar al lado de mi familia, usualmente mis padres andan ocupados por el hospital y no tienen casi nada de tiempo libre, me hace feliz saber que gastan su tiempo libre para pasar tiempo conmigo.

—Buenos días, ¿Y papá?—me acerque a ella para robar una de las papás fritas que estaban recién hechas.

—Esta en la sala, viendo las noticias, puedes ir por mientras, ya casi esta lista el desayuno.—me dio un pequeño beso en mi frente.

Podrán decir "niña de papis ricos y cariñosos", pero, no me molesta porque es la verdad, adoro a mis padres y me alegra hacerlo, no todos pueden. Me dirigí a la sala.

—Hola, papá.

—Oh, la princesa ya despertó,—se levanto y me dio un abrazo sorpresa, cuando esto ocurre no puedo decir o hacer nada.—buenos días, calabacita.

—Deja de decirme así, ya soy bastante grande para esos apodos, papá.—me queje.

No sirvió de nada, se que mi padre no me va a hacer caso, me dice así desde que tengo memoria...una parte de mi ya se acostumbro a eso.

—Lo haré cuando me devuelvas el abrazo.—ughhh...bueno, ¿Qué?, no me quedaba otra opción.—Es broma, no te voy a dejar de decir así, calabacita.

—Ya lo sospechaba, realmente.—nos separamos del abrazo.—¿Hoy va a haber cena especial?

—Claro que si, no hay nada mejor que empezar la semana con una cena familiar.

—Oigan ustedes dos, ayuden a poner los platos en la mesa, ya está el desayuno listo.—nos grito mi mamá desde la cocina.

—¡Ya vamos!—le respondió mi padre poniendo una sonrisa en su rostro.

Pueden que ahora vean a mi padre feliz con su familia, estando en confianza, pero cuando está trabajando, podrías jurar que te quiere matar con solo ver su mirada, pero me alegra que no se comporte así siempre.

El desayuno fue rápido pero bueno, me despedí de mi mamá y fui al auto junto con mi padre. Me llevo a la escuela, dejándome en la entrada.

—¡Ten un buen día!

—Ustedes igual.—me despedí y vi como su auto se alejaba.

—Hey, hola, Maki.—solo había una persona que llegaba antes que yo, bueno, dos de hecho; Nozomi y Umi, pero en este caso, llego primero Nozomi.