VALÚ-Elite

Fiesta de Valerio

Se podía ver a todo Dios en esa fiesta. Claro, un joven rico haciendo una fiesta para relajar las tensiones que aún se sentían en el insti, de un asesinato del año pasado. Chico apuesto, cabello rizado, sonrisa radiante, la obeja negra de la familia todo un cliché.

Nadia, Rebeca y Samuel fueron a la fiesta como lo habían prometido. Pero en plena llegada de Samuel se armó un ring por culpa de Guzman, quien de verdad no lo quiere ver ni en pintura.

Entra de inmediato Valerio en situación como mediario.

-¿Tú que haces aquí? ¿Es que no te ha quedado claro?—Amenaza Guzmán a Samuel, mientras lo empuja.

-¡Hey, hey, hey! Esto lo vamos a solucionar como adultos.—interviene Valerio.—Con una copa de por medio, vamos por acá—Toma a Samuel de los hombros y lo guía a la barra en donde le dice con su poco notable acento chileno—Gigante, toda para ti, pide lo que quieras ¡Lo que quieras! Enserio, todo el mundo...

-La puta mierda, que se vaya, ¡la ostia!—Interrumpe Guzmán y seguido empuja a Samuel.

Este da media vuelta y le dice

-¿Que te crees que a mi me apetece verte la cara?

Y empieza un alegato en el que Samuel le grita que no es el culpable de la muerte de Marina, porque su hermano no la mató y él lo iba a comprobar.

Se lanzan ambos con la intención de darse golpes pero son detenidos antes por sus amigos.

Lu toma a Valerio de un hombro y le dice muy rápido

-Valerio, te puedes hacer cargo de la situación, gracias.

Valerio hace caso a las palabra de Lu y se marcha con Samuel.

-¡Dejalo que es un buen muchacho!—Dice como consejo de amigo, Ander a Guzmán, que va delante suyo.

-¡Ah, claro, como es el amiguito de tu novio!, que valiente te has vuelto Ander.—Responde este en un tono lleno de ira.—¿Estás de su lado o qué?

-Mira Guzmán, te voy a dar un consejo, como mejor amigo que eres. Deja de tratar de poner a todo el mundo de un lado u otro, por que vas a terminar sólo en el tuyo.—Y se marcha.

Lucrecia mira la escena en silencio y con una expresión triste, porque sabe que es la verdad y le duele.
Toca la mejilla de su novio, que sigue enojado y serio, y finalmente se lo lleva.

Nadia observa esto a la distancia, con la misma expresión de Lu. Y los ve alejarse.

•••

-A lo mejor te parece ridiculo, pero creo que estoy haciendo algo que no debería hacer.—Nadia

-Ya...—Responde Rebeca y le hace un gesto para que se acerque a ella. Nadia inclina su rostro y la escucha.—Pero que da gustito ¿no?

Se quita el Hiyab, y Rebeca la ayuda a arreglarse el cabello y maquillaje.
Cuando sale, está hecha toda una chica nueva, con su hermoso pelaje meneando las caderas y unos labios gruesos apetecibles. Guzmán la mira y queda tan anonadado, que se dirije al baño, sudado de pies a cabeza. Lava su cara y llega Valerio... o mejor dicho, el diablo.

-La zona VIP está por acá ¿vale?—señala una puerta de madera que hay en el baño y entra, seguido entra Guzmán.

-Yo no necesito esas mierdas.—Replica.

Pero de nada sirve porque al final termina accediendo a lo que le ofrece Valerio.

•••
Nadia y Rebeca juegan a "me lo tiraba"

-Mira fara, a ese de ahí me lo tiraba yo con cuatro cervezas, a ese... con 2, y que ese, madre mía, a ese me lo tiraba yo con una 00, con una coca-cola Light—La dice Rebe a Nadia entre risas.—¿y tú qué?