Capítulo 3

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Lizmar

No... No, por favor.

¡NO TE ME ACERQUES!

¡NO!

Me despierto repentinamente y veo como un hombre me observa detenidamente al lado de la cama en la que estoy recostada.

Espera... ¿Cama? ¿en dónde estoy?

Cuando me doy cuenta de que estoy en un lugar que no conozco me levanto rápidamente cuando siento que mis piernas fallan y el señor que estaba al lado ya me sostenía de la cintura con fuerza entonces mis sentidos se agudizan y el miedo se apodera de mi que lo empujo y me aferro a la cama para alejarme de él.

_ No quiero que me toques_ indique de una manera tan seca que me sorprendo de mí misma.

_ Lo siento_ veo como este baja la cabeza tímidamente, me fijo en su rostro y veo como su cabello rubio y ojos verdes se iluminan con el sol, su belleza y timidez al hablar me hace sentir culpable por responderle, aunque no tenga ningún sentimiento de arrepentimiento.

_ Se que tienes algu...

_ ¿En donde estoy y donde está mi hermana? _ Voy directo al grano a pesar de no conocerle mientras veo a mi alrededor todo lo que hay, habitación blanca, sábanas blancas, ropa blanca...

¿QUÉ DEMONIOS?

_ ¿Qué es lo que tengo puesto? _ empiezo a sacar conclusiones en mi mente. _ ¿Fuiste tu? _ Al preguntarle me alejo lo mas que puedo de el mientras veo como se para rápidamente y me ve con pena y lastima, lo cual odio cuando lo hace.

_ ¡No! _ Dice acercándose me a mí, mientras de inmediato me paro de la cama y de nuevo me fallan las piernas y caigo al suelo frío y desolado.

_ NO TE ME ACERQUES_ digo mientras me arrastro hasta una pequeña esquina de la habitación y cubro mis rodillas hasta mi rostro en señal de defensa.

_ Javier Black ya se termino su tiempo de visita_ veo como una persona entra por la puerta, pero sin darse cuenta de la situación siguió hablando. _ Encontramos a una niña en las afuera de la casa, pero no quiere comunicarse con nadie, Tendremos que hacerle algunos análisis y..._ cuando alza la cabeza se da cuenta del error que había cometido y mira a Javier con desaprobación.

Mi hermana...

Está viva...

No sé cómo tuve la fuerza para mantenerme en pie al escuchar aquella noticia me aproveché y corrí como nunca y cuando salí de esa habitación veo a varias personas en el pasillo y trato de actuar normal frente a ellos pero la desesperación no me deja tranquila veo a una mujer en una oficina y me dice sin mirarme

_ ¿Nombre de la paciente? _

_ Lía Moon_ digo rápidamente. Y ella sin saber con quien esta hablando, mira la computadora y me da la dirección.

_ En el último piso tercera puerta a la derecha_ dice e inmediatamente escucho unos ruidos en el pasillo.

_ ¡Atrapen a esa paciente! _ grita el doctor que estaba dentro de la habitación señalando mi ubicación frente a los de seguridad.

Empecé a correr mientras los guardias me pedían que parara, si no quiero que tomen medidas crucé una puerta que me indicaban donde estaban las escaleras hasta el último piso y empecé a escuchar disparos.

_ ¿Es que están locos? _ escucho la voz de una mujer detrás de mi pero igual sigo corriendo _ Recuerden... Que es-tán en un hospital ineptos_ dice jadeando de tanto correr, llegué a las escaleras y empecé a subirlas de a tres escalones más rápido de lo normal. Llegue al ultimo piso cuando siento que ya me están alcanzando.

El silencio de la lobaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora