༄ ᴄᴀɴᴅʏ sᴛᴏʀᴇ ↬ ᶜʰᵃⁿˡⁱˣ - ᵃᵘˢˢⁱᵉ ˡⁱⁿᵉ [hiatus]

❝ four ❞

Desde que bang chan fue por primera vez a "Sweet Aussie" comenzó a ir todos los días, mejor dicho, los días en los que su trabajo se lo permitía ya que había comenzado turnos extra solo porque quería ayudar a un grupo de chicas a terminar de grabar su canción "ICY".

esto lo mantenía bastante ocupado, pero no le quitaba las ganas de poder ir hasta esa tienda tan dulce para tomar un café con pancakes o cualquier dulce que se le antojase.

No siempre iba solo, al principio siempre iba con Jisung ya que no quería parecer un maníaco yendo todos los días él sólo.

Pero después de un tiempo Jisung se "enfermó" y dejó de acompañarlo, o al menos eso le dijo ya que Chan pensaba que era una cruel mentira para no hacerle compañía pero le deseo lo mejor.

Iba dos veces por semana y hasta tenía su propio horario que cambiaba depende el día. Por ejemplo, los martes iba a las 5:30, los miercoles y jueves a las 6:45, los viernes a las 9:20 y asi consecutivamente.

Desde el primer día en el que había visitado la humilde tienda ya había pasado un mes, y realmente creció bastante en ese tiempo. Consiguió más ventas, nuevos empleados y hasta pusieron cosas nuevas, como una mini sala de juegos para los pequeños que iban, haciendo que más personas con hijos quisieran ir.

Pero además de amar lo que hacían en la tienda, había otro motivo por el cuál Bang Chan adoraba ir a esa tienda y ese motivo se llamaba Lee Félix.

Ese lindo autraliano de tierna sonrisa hacía que el corazón de Chan se volviera una montaña rusa. Aunque el principio estos dos chicos no hablaban y solo tenían una relación de empleado-cliente, en todo ese tiempo donde Bang asistía sin falta todos los días a la tienda, ambos comenzaron a tener pequeñas conversaciones .

En esas pequeñas charlas los dos descubrieron que eran de la misma parte de australia, que les gustaba mucho Khalid y que ambos amaban el rap.

Pero por más que ambos lo quisieran, todo se quedaba allí porque a ambos algo les impedía continuar la conversación, siempre algo los interrumpía o a los dos se quedaban sin tema de conversación. Tal vez era eso lo que el destino quería... O tal vez no.

Desde el punto de vista de Félix, Bang Chan era la definición de la perfección.

Podía jurar que sentía como su corazón se aceleraba demasiado cuando lo veía sonreir o cuando estaba cerca de él, cuando podía ver esos hermosos ojos color chocolate oscuro pero que aún así eran el color más hermoso que había visto, esos pequeños hoyuelos que le salían cuando hacia esa rara mueca que salía a la luz mientras pensaba en que pedir, aunque siempre fuera lo mismo.

Sin darse cuenta, Lee ya se había terminado de vestir pero se sorprendió al ver que se había puesto ropa bastante formal o mejor dicho fuera de su zona de confort.

Era incómoda pero realmente sentía que le quedaba mejor que su ropa holgada o las prendas de colores pasteles que le gustaba ponerse.

De todos modos no se mantuvo mucho con esa ropa ya que se la quitó en menos de cinco segundos, aunque le quedara bastante bien. Para Félix iba primero la comodidad antes de una torpe moda. Asi que se puso unos pantalones de jean azules y su camiseta de Twice favorita.

Se miró una última vez en el espejo con una mueca de satisfacción hasta que llegó a ver su rostro, pero más especificamente esas pecas que estaban esparcidas por todas sus mejillas.

Cuando las veía no podía evitar recordar esas burlas de sus compañeros que al principio eran inofensivos pero luego cuando comenzó a crecer más se hicieron más dolorosas. Pero había un trauma aún mayor con sus pecas, que por más que se esfuerce no puede olvidar.

Pero Félix no puede hacer nada más que suspirar y colocarse suavemente la base de maquillaje para ocultar esas pequeñas manchitas que tanto sufrimiento le causaron aunque su madre se esfuerce tanto por hacerle saber que son preciosas para él no son más que horribles imperfecciones en su rostro.

Lee terminó de tomar se jugo de naranja y puso "Fancy" en los parlantes para bailar y quitarse todos los pensamientos malos.

Porque recuerden niños, Stan Twice.

A Lix le gustaba mucho bailar sobre todo si se trataba de coreografías de Twice, se las sabía completas y a la perfección. Además que a él le encantaba bailar, cuando iba a la primaria siempre participaba en los actos escolared y hasta armabas las coreografías. Es una de sus grandes pasiones.

Félix jamas fue un chico muy social, en su vida solo había hecho dos o tres amigos pero nunca los consideró amistades reales, por lo que la mayor parte del tiempo se encontraba solo comiendo alguno de los postres que su mamá le daba encerrado en el baño para no escuchar a esos malditos niños que lo molestaban solamente por estar respirando, o así era como él creía.

De todos modos, a Lee no le gusta pensar en el pasado y mucho menos preguntarse el porque lo molestaban tanto.  Tal vez porqué era homosexual o tal vez había hecho algo malo en su vida pasada y merecía todo ese odio.

Pero ya no importa, todo eso son solo recuerdos horribles que le traen melancolía en los días donde se siente verdaderamente solo.

Félix sabe que toda esa gente que le hizo tanto daño está muy lejos y que ahora está teniendo una mejor vida con su madre cumpliendo el sueño que ambos tuvieron por tanto tiempo.

Pasado pisado y olvidado mejor que corazón destrozado.