La Leona y El Joven Lobo

¡No volveré a Desembarco del Rey!

Anna estaba sentada bordando mientras el Maestre Luwin ayudaba a Rickon en sus clases, hasta que su dama de compañía entró a la sala

-Lady Stark..

Anna levantó la vista de su bordado, el cual era un lobo, mas específicamente viento gris, Sombra que estaba echado a los pies de la princesa miraba atento todo

-Llegó una carta desde Desembarco del Rey para usted mi señora

-Muchas gracias Trisha

Anna tomó la carta y fue a su habitación para leerla mas tranquila...no, no podía ser, no podían hacerle esto y mucho menos ahora

-..no...

Llevó una mano a su vientre extremadamente preocupada, sin esperar mas corrió por los pasillos buscando a su marido

-¡Robb!¡Robb!

El nombrado salió de la biblioteca preocupado al escuchar a su esposa llamarlo de una manera tan desesperada

-¿¡Anna?!¿¡Que sucede!?¿¡estas bien!?¿¡pasó algo con Rickon?!¿¡Bran?!¿¡mi madre?!

Ella recupero el aire, antes de hablar, estaba aterrada

-Robb, me llegó una carta de mi padre.. el me ordena que vuelva a Desembarco del Rey, no quiero volver ahí Robb, es peligroso, Cersei esta loca, no puedo ir a un lugar así y arriesgar a que lastimen a nuestro hijo

Anna tenía los ojos llorosos e intentaba retener las lagrimas, Robb la abrazó

-no dejaré que vuelvas ahí..

-Dice que hará que vengan a buscarme si no voy, el quiere que vuelva unos meses para recuperar el tiempo perdido

Dijo ella aferrándose a Robb, el le acarició el pelo

-¿Que haremos?

Dijo el para si mismo, no planeaba dejar que su mujer vaya a un lugar tan horrible como ese, menos estando embarazada

-...tengo que ir.. de lo contrario el vendra y empeorara todo.. Robb, tu madre y tus hermanos te necesitan.. Invernalia te necesita y no podemos ponerlos en riesgo

-Yo te necesito a ti..

Dijo el tomando las manos de Anna y mirándola a los ojos

-Y yo siempre..

Empezó ella poniendo sus manos en las mejillas de el

-Siempre, estaré contigo.. no importa donde este Robb, nunca voy a dejarte.. pero ahora tengo que hacer lo que es mejor para todos.. y si algo pasa en Desembarco volveré de inmediato a Invernalia

-...Que Viento Gris vaya contigo..

-Solo si Sombra permanece aquí a tu lado

-Esta bien, arreglaré las cosas para que salgas mañana temprano..

-Gracias mí amor

Robb le dio un beso en la frente, habían pasado dos meses desde que Anna le dijo que esperaba a su hijo y en ese momento creyó que jamás seria mas feliz, en este momento creía que jamás estaría mas preocupado

Anna se despidió de todos en la cena, cada persona presente que tuvo la oportunidad de conocerla sabia la gran persona que era y rezarian por ella hasta que vuelva a casa

Por la noche ella fue a su habitación y vio a Robb sentado a los pies de la cama, como tantas otras veces lo había visto, pero ahora le parecía irreal, se acercó con cuidado

-¿Robb?

El la miro unos segundo antes de extender su mano hacia ella, sin decir nada ella la tomo, el la atrajo hacia el abrazandola con cuidado, como si fuera a romperla, temía perderla, más que a ninguna otra cosa en el mundo

Ella solo lo abrazó, ninguno tuvo la necesidad de decir nada, solo se abrazaron, habiendo mil cosas por decir ninguno se atrevía a emitir palabra

Durmieron abrazados como la noche anterior, solo que esta vez el frío de Invernalia parecía sentirse mas que nunca, para Robb y Anna, el Invierno había llegado y ninguno imaginaba lo que traería con el..

Al día siguiente Anna partió a Desembarco del Rey con sus guardias, su dama de compañía y el lobo de su marido pero su corazón estaba en Invernalia