3:20 AM.
Todo comenzó hace tres días, mi hermoso novio me levantó por la mañana como todos los días. Él lo hace de una forma especial, por así llamarlo.
Básicamente, hace esto, primero me observa como si fueras una obra de arte, después pone su pierna encima de mí, me estruja hasta que no hay nada de espacio entre él y yo, y por último cuando ve que no estás despierta, aunque tú ya te despertaste hace rato, coge y se sube encima de mí y es cuando empieza la batalla de besos, puede que en 5 segundos haya dado como unos 20 besos, pero él seguirá haciéndolo hasta que no abra mis ojos. Es realmente tierno, pero también es muy pesado, no por lo besos, eso me encanta, si no porque cuando se pone encima de mí, su cuerpo pesa demasiado y de verdad, ¿que come este chico?
Después de ese despertar tan lindo, bajamos a desayunar con los chicos y después nos vamos a arreglarnos. Cuando terminamos nos vamos a la agencia, y ahí es cuando nos separamos, los chicos se van para ensayar sus bailes y yo voy a por mi lado, a practicar, no sé si recuerdan, pero soy solista.
Todo va muy bien en la agencia, ensayo mucho y mis canciones son muy famosas, después de practicar por la mañana, toca ir a comer, mi momento favorito del día, les seré sincera, amo la comida, es mi vida, junto con Tae, claro.
Después de estar todo el día en la empresa, volvemos a casa, y pues cenamos todos juntos y nos vamos a dormir, no hay nada malo, me gustan mis días, me parecen divertidos y lindos. Pero hace tres días algo cambió.
Los chicos están con una nueva canción, la cual me gusta mucho, pero eso cambió cuando me enteré de que harían una colaboración con una chica para esa canción. Todo iba bien hasta que ella llegó, es como si me hubiera hecho invisible, como si desapareciera.
Cuando llegamos a la empresa ese día, el CEO nos presento a la cantante, no diré su nombre, porque lo oí tantas veces estos últimos días, que no quiero volver a oírlo nunca más.
Todo fue bien hasta el momento en que comenzamos a hablar, todos los chicos hablaban con ella y la trataban demasiado bien para mi parecer, lo peor es que yo estaba ahí, plantada en el suelo de la sala escuchando sus estúpidas conversaciones. ¿Acaso no se daban cuenta de que yo también estaba? El peor fue Tae, en ningún momento me miró, era como si no le importará, así que decidí pararme e irme, prefería ir a comer con mis amigas que con ellos, cosa que no les importo, ni se dieron cuenta de que me iba.
Cuando volví de comer con las chicas pase por la sala de ensayos y lo que vi no me gustó la verdad. Todos reían y sonreían como estúpidos porque al parecer la chica no podía hacer una paso, ¿en serio? ¿por eso ríen? Cuando fue la hora de irnos todos nos despedimos de ella y nos dirigimos a casa, en todo el camino no dejaron de hablar de ella, de que era fantástica, hermosa y muy divertida, yo solo miraba la ventana esperando que alguno de ellos me viera y me preguntará que tal fue mi día, pero no, nadie me habló en todo el trayecto. Estaba harta de todos, así que me fui a la habitación y me dormí.
Al día siguiente fue aún peor, siempre vamos juntos a comer, así pasamos tiempo juntos, hay veces que quiero comer con las chicas así que cuando vienen a recogerme les digo que no puedo ir, a ellos no les importa, les encanta que me lleve tan bien con ellas, pero es normal, son mis bailarinas, estamos todos los días juntas.
Bueno, como iba diciendo, hoy no tenía pensado ir a comer con mis amigas, así que esperé en mi estudio hasta que vinieran para así irnos a comer, pero nunca vinieron, se olvidaron de mi, se fueron con la chica y se olvidaron de mi, ¿qué cómo lo sé? Ahora verán.
Al ver que no venían intenté llamar a Tae pero no lo cogía... ¿lo tenía en silencio? Me harté de esperar y me dirigí al restaurante, entonces fue cuando los vi. Vi cómo estaban tan felizmente comiendo y cómo no les importaba nada, estaba harta de todos, ¿cómo puede ser que se olvidarán de mi? De que hoy comeríamos juntos cómo todos los días, ¿acaso me cambiaron por esa chica? Desaparecí de ese lugar, no quería verlos en mucho tiempo, volví a la empresa y me puse a ensayar, Unnie (entrenadora) se dió cuenta de que me pasaba algo, no era normal mi comportamiento, así que me preguntó. Yo no pude aguantar más, y estallé, deje que toda mi angustia saliera en forma de lágrimas, lágrimas que reflejaban odio.
Cuando se lo conté ella se enfadó mucho, me dijo que no era justo, que no era justo que me dejaran de lado por una chica a la que acaban de conocer, yo le pedí que no hiciera ni dijera nada, que yo me encargaría, pero como ven, a día de hoy sigo igual, como una cobarde sin poder resolver mis problemas. El día acabó y nos fuimos a casa, en todo el trayecto no pude dejar de pensar en que era lo que le veían a esa chica para dejarme de lado, para que les dejara de importar.
Cuando llegamos a casa no cené, no tenía hambre, solo quería desaparecer de allí.
Este era el tercer día, y si les digo la verdad, ya no podía más, me sentía muy mal, no tenía fuerza, puede que por qué el día anterior no comí nada o porque no pude dormir, pero realmente me encontraba demasiado mal, aún así, empecé el día como cualquier otro, la única diferencia fue que ya hacía dos días que mi lindo novio no me despertaba, si no que lo hacia una alarma, se preguntarán porque... bueno él tiene que levantarse antes para irse a ensayar, ya que su canción se sacará pronto y tiene que estar todo perfecto. Me vestí, desayuné y me fui a la empresa con la esperanza de que hoy fuera un buen día, que equivocada estaba, ese fue el peor día de todos.
CONTINUARÁ ~