EldritchAU

1-Inicio

Bueno y aquí dejaré un comienzo, por donde yo empecé a darle forma a esta retorcida historia~

Con este capítulo debería subir ya el libro adyacente, pero me gustaría complementarlo con dibujos míos, por mas que sean bocetos x3

Por el momento comentare aquí lo que creo que deberían saber:

Guiverno o Dragón heráldico (Wyvern en inglés para los que lo conozcan con este nombre o les suene más):  Es una criatura alada, con cabeza de dragón que se decía que exhalaba fuego o que poseía un aliento venenoso, cuerpo reptiliano, dos patas (o ninguna. Aunque siempre los veo con dos...) y una cola con púas.

Esta hermosa criatura hace aparición ya desde el primer capítulo y será una de las tantas que estará dando vueltas en este extenso universo~

Dato menor: me quedaron "+" y "-" que yo utilizo para diferenciar diálogos. (lectores: dato innecesario, anotado...)

Bueno ya dicho esto, les dejo con la lectura.

Disfruten~

El calor era abrazador en lo que avanzaba el día. Una inmensa criatura de colores rojos pálidos sobrevoló uno de los acantilados de agua más profundos de todo aquel inmenso desierto. Alas membranosas, piel escamosa, hilera de dientes filosos como si se tratara de cuchillas, ojos brillantes y mirada despierta, sin mencionar su horrendo carácter y aquel aliento que normalmente exhalaba fuego. Unos lagartos voladores que muy pocos podían domesticar, unos demonios salvajes realmente aterradores y territoriales. Su jinete, atento a cualquier movimiento que pueda divisar en aquellos rebuscados lugares.

Actualmente el cañadón no podía llenarse más de lo que poseía, sin causar problemas, logrando una sucesión de capas hacia abajo y un enorme hueco con un pequeño hilo brillante en medio. Cada cierto tiempo aquel hilo se cortaba, formando lagunas. La principal guerra que poseían se debía a la escasez de aquel líquido vital, por más que su raza sea resistente y adaptada a vivir en aquellas mortales condiciones, no podían sobrevivir sin líquidos...sin agua. El guerrero prosiguió dejando aquel inmenso cañadón detrás, sin imaginarse que allí abajo, en parte de los pliegues y mesetas que el agua había formado a lo largo de los años, se encontraba resguardada, una pequeña choza.

Dentro, ocultos, quizás algo preocupados, pero no lo suficiente para evitar continuar con sus vidas, se encontraban dos demonios. Las paredes apenas se sostenían con la leve brisa que corría por aquellos lugares, sin importarles si algún día se volaba todo. El de tez blanca mezclaba unos extraños líquidos intentando algo que había hecho una vez en su amado laboratorio. Si, extrañaba mucho su casa, su habitación, especialmente su cama y su inmenso invernadero, aquel que le proporcionaba los materiales de sus múltiples brebajes y menjunjes, sin mencionar sus amados libros en la inmensa biblioteca de la mansión Hat. Por otra parte, detrás de él, se hallaba el de tez oscura, observando hacia arriba donde minutos atrás había visto pasar al wyvern rojo. Ninguno hablaba, solo se podía apreciar el silencio y el hablar del viento.

-creo que no volverá a pasar por aquí...- hablo el de sombrero negro.

+creo que te preocupas demasiado...- le respondió su hermano intentando que la mezcla que tenía en manos vire de color para saber que había funcionado, sin tener éxito alguno. El albino bufo y desecho el contenido, suspirando sonoramente.

-ya cálmate, White- le dijo el mayor.

+calmarme? Solo intento hacer una simple combinación para un sedante...y ni eso me sale bien-se frustro.