Había una vez una joven que tenia una vida tranquila cualquiera diría que era la joven mas feliz pues su sonrisa irradiaba felicidad
Pero la triste realidad era que esa joven se sentia muy desdichada pues había algo que nunca le permitió estar feliz con ella misma
Y ese algo era su físico ella se sentía acomplejada por su cuerpo
Día tras día se observaba en un espejo repitiéndose mentalmente lo fea y gorda que era
Paso toda su vida repitiéndose lo hasta el punto que ya nadie pudo convencerla de lo contrarioEl día en que se libero de todo llego y por fin se despojo de todo aquello que tanto la atormentaba
Fin.Moraleja
Hay que aprender que el físico es secundario y que no todo es lo que aparenta
