El juego prohibido (Harry y tu)

Apuros.

Me desperté de mi cama un poco antes de que sonara la alarma y todo estaba quieto, callado, solo veía por la gran ventana que tenía al otro lado de la pared el gran arbòl que removía de él sus hojas y junto de este habitaban dos pequeños pajaritos.
Me quede mirando el paisaje cuando mi alarma mental me indicaba que ya se estaba haciendo tarde, me levante de la cama y recobre ánimos para un nuevo día. Escogí mi ropa para ir al instituto y como el clima estaba fresco decidi por ponerme algo cómodo y caliente, me metí a la regadera y enjuague todo mi cuerpo relajándome con agua tibia y disfrutando del rato. Ya cuando por fin acabe de ducharme salí de la regadera, agarre mi toalla, me enrrolle con esa y me fui al lavamanos que arriba de el estaba un espejo exagonal de vidrio, me pare en frente de el y me observe por un momento. Miraba mis facciones de mi cara y me sentía no muy bonita, siempre me había identificado como la menos bonita o carismática y eso me llego a percutir mucho tiempo en mi personalidad y en mi confianza.

Saliendo del baño me cambie, me peine y retoque un poco en la cara solo labial, rímel y un poco de rubor rosado en mis blancas mejillas, ya terminado baje a la cocina y me prepare un cereal con zumo de naranja.
Agarre mi mochila y mis llaves no sin antes decirle a mi mamá "¡ya me voy!" Y recibir como respuesta " Ok hija cuídate " fui a la puerta la abrí, camine mas adelante, y por último abrí la puerta del portón. Me encontraba caminando directo a la escuela y como siempre viendo al paisaje que me rodeaba estaba a mitad de camino cuando vi a Chris dar vuelta en una esquina y seguir por mi camino pero el se encontraba mas adelante que yo, lo mire de arriba a abajo y había cambiado Nose si seguía siendo el chico amable de la ultima vez pero como no lo llegue a conocer tanto no me afectaba el hecho de que con quien estuviera o como era el.

Lo seguía mirando cuando el empieza a girar su cabeza y rápidamente cambio la mia hacia los lados, por el rabillo del ojo creía pensar que él me estaba viendo pero no estaba segura, de pronto solo escuchaba mis pisadas en el camino y de inmediatamente me sentí extrañada todavía estaba viendo hacia a los lados pero por alguna parte no quería voltear así que me arme de valor y mire hacia al frente y nadie... Exacto NADIE, mire por mis espaldas y estaba yo sola, Ok no me pude a ver imaginado a Chris caminando pero que rayos paso. Estaba muy perdida pero recordé que cuando me estaba haciendo la inútil vi por el rabillo y creí a ver que Chris me había visto... Ahora y si el encerio me miro y sintió nervios o algo que pudo a ver sentido por que la verdad no tenía sentido.

Pasando por mi mente lo que había pasado con Chris en el trayecto de venida al instituto, me centre mas en el piso que ahora estaba pisando, estaba en el gran patio de las afueras de la escuela, dejando detras el patio, estaba pasando por las escaleras.
Estaba buscando mi libro de historia dentro de mi casillero pero no lo encontraba y ya se me estaba haciendo tarde para ir al módulo , de hecho no estaba, así que no me quedo de otra que ir a dar mi cara en el salón sin ningún material.

Pasando los pasillos a paso rápido alguien me empuja por detrás y se va derecho, entre cierro mis ojos para visualizar quien era la persona pero ya era demasiado tarde por que aparentemente tenía mucha prisa, pasando el dolor el empujón, me fui directo a donde tenía que ir. A la clase.

Estaba con mi respiración agitada de arriba a bajo en el suelo con mis piernas hacia arriba formando un triángulo en donde mi cabeza reposaba, le dije al profesor que me dejara entrar pero me saco del aula LITERAL, ahora estaba yo sola afuera de mi clase y no tenía que estar aquí por mucho tiempo por que si me veían me mandaban al directivo. Agarre aparentemente nada, con mi respiración bajándose lentamente, podía sentir mi cara rojiza de tanto correr.

Me di vuelta a la esquina de la lado izquierdo con prevención sin que ningún prefecto me viera y sigui mi camino hacia al tocador para retocar mi cabello, entre algunas cosas, al frente del espejo estaba yo arreglándome el cabello que por cierto estaba muy despeinado, agarre una pequeña dona para el cabello de la bolsa trasera de mi pantalón y me hize una coleta despeinada. Salí del tocador y no sabia un lugar seguro en donde no me pudieran ver hasta que se me vino a la mente mi lugar preferido. El árbol.