Otra vez París

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Aclaraciones

Este one shot contiene spoilers de Dark Phoenix.

Aquí, lo ocurrido en la película Dark Phoenix tuvo lugar en el año 1990, no en 1992.

A diferencia de la película, Peter no sólo sale herido durante el ataque de Jean, sino que queda en coma durante algunos años.

Anya en los cómics es una hija de Magneto, pero aquí utilicé su nombre para otro personaje y dejé a Nina como descendiente de Erik, basándome casi totalmente en las peliculas.

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Era un día precioso en París. El sol brillaba iluminando una cálida tarde de primavera, y una suave brisa otorgaba la frescura necesaria al cuerpo. Sin duda alguna, a Charles le encantaba esa ciudad.

Habían llegado el día anterior para disfrutar de unos días de merecidas vacaciones. Se detuvieron en una cafetería después de un paseo por los Campos Elíseos, con deseos de degustar un café y los tradicionales croissants.

No lo habían planeado, pero se dirigieron al mismo establecimiento que su anterior vez en la ciudad.

En ocasiones uno mira hacia atrás una década y se da cuenta de que su vida no ha cambiado demasiado, pero esta no era una de esas veces. Por el contrario, en esos 7 años las vidas de Charles Xavier y Erik Lehnsherr habían dado un giro impensado, de 180 grados.

Bueno, tal vez era mentira que no habían planificado ir a ese lugar particular, pues el doblador de metales sí que lo había pensado. Era importante para él, para ellos, después de todo. Miró las mesas vacías decidiéndose por una, y sonrió brevemente. Había mesas de sobra para elegir, pero él quería el lugar exacto.

Recordando los viejos tiempos, apartó la segunda silla de una mesa ubicada en el mismo sitio que aquella en 1990 (quién sabe, tal vez y hasta eran la misma mesa y los mismos asientos) para colocar la de ruedas de Charles en su lugar, y luego se sentó frente a él. El ex profesor sonreió al notar ese detalle.

-¿Nostálgico?

Lehnsherr rodó los ojos.

-Fue sin pensar.

El psíquico alzó una ceja con diversión, sin creerle. El mayor vio esa mirada en sus ojos y su estómago dio un vuelco. Ya no se ponía su casco, y pasaba demasiado tiempo con Charles. Si lo pensaba bien, era absurdo creer que él no lo sabía a esta altura...

Tampoco importaba tanto, intentó convencerse. ¿Y qué si ya se había enterado? Él no era un niño ilusionado con ganas de darle una gran sorpresa a sus padres. Ni siquiera le agradaban las sorpresas.

Sin embargo, a Charles le fascinaban. Suponía que eso se debía justamente a que era muy difícil prepararle una sorpresa a un telépata y que no se enterara, aún sin pretenderlo. Ya le había hablado sobre las complicaciones de bloquear los pensamientos de las personas a su alrededor.

El pensar que no sería ninguna sorpresa no hacía que Erik se sintiera menos ansioso, sino que parecía lo contrario. Si ya lo sabía, ¿por qué no decía nada? Él estaba haciendo un esfuerzo sobrehumano por mantener sus nervios a raya.

-¡Erik!

Solo ante ese llamado de atención se percató de la mesera parada al lado de ellos, esperando tomar su orden con una cara de irritación que intentaba disimular. Quién sabía en qué momento había llegado.

-Lo siento, ¿ya ordenaste?

-Hace siglos, apresúrate, que no puede estar aquí todo el día Erik.

Otra vez en París (One-shot Cherik)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora