TÚ Y YO, ENAMORADOS?

CAPÍTULO 18

BEAM.

Llegue lo más rápido que pude a mí departamento, puse la laptop sobre la mesa del comedor y mientras se iniciaba fuy a la cocina por un vaso de jugo acompañado de un largo suspiro.

"Realmente ese hombre me calienta la sangre, ya quiero que esto de Lila termine pronto, para poder
estar con él"

Le di un par de sorbos a mí jugo mientras me siento enfrente de la laptop, abrí la bandeja de entrada y como Rebe me dijo hay dos correos con carácter de urgente, el primero es de una cuenta desconocida así que la ignoro y paso al segundo qué es del investigador privado abriéndolo de inmediato, ese es  el qué me interesa, dejó de lado mí jugo y comienzo a leer. Mientras avanzó en mí lectura, me cuesta creer qué está chica no es para nada la que creí conocer, ella es todo un tema, ha cambiado ya cuatro veces de nombre e incluso ahora tiene otro, como diablos lo hace, me sorprende saber qué lo del dichoso padrastro nunca paso, creo qué sólo aprovechó su cercanía hacia mí para cambiar el rumbo de su vida. Según esto ella no tubo padres, simplemente apareció en mí vida de la nada, tal vez sólo confió en él hombre equivocado y se refugió en mí para salir de eso, debe tener una buena escusa para eso, al fin y al cabo estamos juntos desde hace seis años.

Realmente no hay mucho aquí, tiene dos propiedades a nombre de uno de sus nombres Carol Smith, anexado a está hay una copia de su identificación, es Lila sólo qué su cabello es rojo y lacio, se ve muy diferente a como cuando luce sus delicados risos rubios, una de las propiedades está como a una hora o dos de aquí, tal vez deba decirle a Kit y Pha que me acompañen.  Bien la verdad esto no me ayuda en nada, espero que el siguiente informe llegue pronto y contenga algo mejor.

Abro el otro correo, no tiene ningún nombre de contacto, aún así abro el archivo adjunto y lo que veo realmente me sorprende....

Beam :

Cariño, soy yo se qué he desaparecido de tú vida, de un día para otro, no es qué haya sido decisión mía, es sólo que no he podido acercarme a ti, tú padre me tiene amenazada tuve que huir y cambiar nuevamente mí nombre para poder salir del radar de tú padre, me tenía vigilada día y noche y me costo escabullirse y escapar. Había hombres siguiendo me a todos lados, desde hace un año, no quise decirte nada para no causarte problemas con William, creí inocentemente qué me protegía, pero todo cambio ese ultimo fin de semana en qué estuvimos juntos, cuando salí de tú departamento apenas puse un pie fuera del edificio los hombres que me seguían me obligaron a subir a su auto, me exigieron que me mantuviera en silenció, estuve con ellos dentro del auto en un recorrido de al menos dos horas. En cuanto se detuvo el auto el miedo me invadió, me bajaron a la fuerza tomándole por los brazos uno de cada lado, entramos a una cabaña algo descuidad estaba rodeada por al menos cincuenta hombre más en cuanto entramos me arrojaron dentro de un cuarto lúgubre y frío, me dejaron ahí no sin antes despojarme de mis pertenencias pase mucho tiempo ahí dentro. No te voy a mentir Beam, estaba aterrada y temblando de miedo todo el tiempo, totalmente incomunicada, se que estuve allí por tres días por qué me llevaron charolas con desayuno, comida y cena, no me causaron daño, al menos no físico, el tiempo que estuve allí fue traumático. Al cuarto día después del desayuno escuche voces provenientes  del pasillo y ahí fue cuando vi a tú padre, William Womphipat, entrar por la puerta, estaba aterrada no sabía lo que aria conmigo, me tire al piso implorando por mí vida pero lo único que conseguí fueron burlas de su parte. Cariño las cosas qué me dijo fueron horribles, no sólo me hizo temer por mí, si no también por tú bienestar.

Beam cariño, tengo miedo por mi vida, no quiero qué sepas lo qué me dijo por este medio, por favor en cuanto leas esto borralo, tome todas las medidas necesarias para qué no me encuentren.

"Allí mirando el horizonte, con la puesta de sol reflejándose en tus ojos, te prometo qué, siempre estaré para ti cuando me necesites"

Estaré esperándote hasta la media noche, entenderé si no bienes. Beam, te amo.

-MIERDA- en cuanto termine de leer mire la hora, son casi las ocho, debe tener tanto miedo la pobre para no poner una dirección. Eso ultimo yo se lo dije el día que le pedí que fuera mí novia, la lleve a un paseo por la montaña.

Tomé mi abrigo, un par de guantes y una manta, debe de estarse congelando mientras me espera, salí corriendo de mí departamento, espero no encontrarme con mucho tráfico, son casi tres horas de camino hasta la montaña.  Subo a mí auto poniéndolo en marcha, de camino al lugar trato de procesar en mí mente toda lo que me escribió en ese correo. Se que la muerte de mamá nos afectó mucho a papá y a mí, claro que después de eso nos alejamos aún más, pero, cuando fue que se convirtió en un monstruo calculador y frío, tal vez el enfrascarse en los negocios lo hizo volverse así, pero yo siempre estuve allí con él, ayudándolo en lo que él pedía y ahora tratar de controlar mí vida de esta manera y hacer con migo lo qué quiera, eso ya rebaso el límite.

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Agradezco no haber tenido ningún contratiempo, mire mí reloj y son apenas diez minutos pasados de las diez, a lo lejos puedo ver un auto estacionado y agradezco nuevamente el qué las farolas del mirador estén encendidas por qué no hay más nadie qué la persona dentro de ese auto y yo que voy llegando, me acercó despacio estacionándome a unos cien metros de distancia del otro auto, en cuanto lo apago las luces de auto a mí lado se encienden en su interior, dejando ver la silueta de una persona dentro, llene de aire mis pulmones antes de salir, ya afuera antes de cerrar la puerta, la persona que se encontraba en el otro auto corrió abalanzándose contra mí haciéndome presa de un abrazo.

Beam -¿Lila?-

Lila -Beam, cariño. Dios!!!! Di me que nadie te siguió -

Me soltó de su abrazo el cual no correspondí, el cambio en su persona es muy drástico, los hermosos risos dorados que adornaba su largo cabello ya no están, ahora en su lugar lleva el cabello negro y corto a los hombros, ya separados pude reconoces a Lila debajo de todo ese maquillaje que lleva en el rostro, no es exagerado pero ella nunca había usado tanto maquillaje.

Lila - No sabés cuanta falta me has hecho - me sonrió y volvió a abrazarme y esta vez le correspondí.

Trate de convencerla de que fuéramos a un lugar más cálido para su comodidad pero ella se negó argumentando que mí padre tiene ojos en todos lados y no le conviene qué me vean con ella por que las cosas podrían complicarse.

Esta sera una fría y larga noche........