Capítulo 12

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Liam

El calor a un costado mío, los leves suspiros que cosquilleaban en mi cuello, me hicieron sonreír, abrace con mayor fuerza aquel cuerpo que se apegaba al mío con recelo, hasta que se giró entre mis brazos dándome la espalda encajando su culo redondo contra mi miembro erecto

—No hagas eso— pedí con voz ronca y algo adormilada aún

—No hago nada

Se restregó sin vergüenza alguna contra mi entrepierna, arrancandonos un gemido a ambos

Tome una de sus piernas y la coloque sobre la mía para poder tener acceso a ese paraíso

—Eres muy traviesa — bese su oreja dejando también un ligero mordisco

Mi mano recorrió su pierna hasta alcanzar mi meta, juegue entre sus pliegues disfrutando de sus jugos que hacían que mis dedos resbalaran con facilidad dentro de su cavidad

—Liam — gimió alto y fuerte cuando encontré su preciado punto G — dame más

Arremeti con fuerza sin llegar a lastimarla, sus ruegos y súplicas por más me descontrolaron por un momento, me adueñe de su boca atal punto que cuando el beso se cortó ambos jadeabamos en busca de oxige

—Me- me voy a correr

Un toque más a su punto y basto para que su orgasmo llegará, su cuerpo y vagina se contrajeron alrededor de mis dedos y sin soportarlo más deje que mi pene ansioso se abriera camino hasta lo más profundo de su cuerpo, aún podía sentir las contracciones de su vagina, mis estocadas eran lentas deseando que en el camino Mer pudiera recuperarse un poco, salí por un momento de dentro de ella para colocarla boca abajo y volverla apenetrar está vez teniendo un mayor acceso, apreté, mordí y dejé marcas por su espalda y cuello, cada una de ella en el lugar perfecto

—Liam, no puedo más — lloriqueo — duele

Mis penetraciones fueron en aumento, al igual que sus lloros rogándome que la dejara llegar una vez más y no negándoselo cuando mi orgasmo llegó, apreté con un poco de violencia su clítoris sensible y ella también estallo, podía sentir como mi semen la llenaba por completo

Nuestras respiraciones aceleradas era lo único que llenaba el eco de la habitación, salí de ella con cuidado sintiéndome un poco mal al haber sido tan rudo

—Estas bien cariño— corri un mechón de su cabello para poder ver su rostro

La sonrisa en sus labios y sus mejillas sonrosadas me hicieron saber que no era el único que había disfrutado de esto

—De maravilla

Ambos comenzamos a reír y por primera vez desde hace tiempo fui realmente feliz, la abrace con fuerza temiendo que este momento se diluyera y fuera solo una fantasía

―Quiero que me hables de cómo fue tu embarazo ― suspiro pesadamente ― quiero saber cada detalle

—Liam — soltó a modo de reproche — no quiero que esto te hiera de alguna manera

—Se que ambos hicimos las cosas mal, pero quiero remediarlo, quiero saber cómo fue el embarazo y tú parto, quiero saberlo todo, por qué solo así podré seguir, sin que la culpa me coma

—Ambos fuimos víctimas, pero nos culpamos — beso mis labios — si desde este punto comenzamos de nuevo, prometo que daré todo de mi

—Yo también pondré todo de mi, para hacerlas feliz— me acerque hasta casi rozar nuestros labios — te amo hermosa

―Cuando me entere que estaba embarazada llore como nunca antes, en ese entonces yo aún creí que tú me habían engañado y a quello me debasto de una manera muy cruel, sintiéndome ahogada por todas las emociones se lo conté a mis padres quienes lo tomaron muy bien ― apreté mis manos fuertemente― mi padre me presento a Mark, pero yo no lo tome en cuenta, lo único que yo deseaba era que tú estuvieras ahí conmigo, para cuando cumplí un mes, las náuseas y malestares me sobre pasaron, con esfuerzos podía levantarme de la cama, un día tuve un sangrado que me asusto demasiado, el único a quien pude encontrar en ese momento fue a Mark, el me llevo al hospital, me dijeron que había tenido una amenaza de aborto, me mandaron descanso hasta cumplir los 4 meses, luego de eso me case influenciada por mis padres y el que dirán de la gente ― murmuro eso ultimo ― al entrar en trabajo de parto no tuve dilatación, la bebe estaba teniendo sufrimiento fetal, me hicieron cesárea, pero algo salió muy mal y casi me quedo en la plancha

―Creí que había nacido en parto normal― susurre acariciando la cicatriz de su estómago

―No pudo ser así, la doctora me explico que no podría tener a ningún bebe sin que fuera cesárea, ya que mi cuerpo no dilataba, que sería peligroso si no nacían de esa manera― me explico para que pudiera comprenderlo — estuve una semana en el hospital, apenas pudiendo ver a Lil

―Así que casi morías ― mi voz broto con el más puro miedo de verme sin ella a mi lado

―Si— su susurro fue casi inaudible — tuve mucho miedo de no volver a ver a mi pequeña

Una lágrima broto de su ojos y recorrió toda su mejilla hasta terminar en mi pecho

—Perdoname por haber permitido que pasarás por todo esto sola — bese su coronilla — fui un idiota al no haber luchado por ti de otra manera

—No fuiste el único, yo debí de haber esperado, debí de hablar contigo y no solo huir — se lamento con pesar— si no hubiera sido una cobarde Lil no hubiera crecido creyendo que ese hombre era su padre, yo le negué tu amor

Lloro con ganas y aquello destrozó mi alma, a ambos nos dolía y ambos habíamos perdido demasiado

—Mi plan era odiarte y hacerte pagar por abandonarme y casarte con otro que no era yo, me empeñe en sentir rechazo, pero no puedo ni quiero estar más sin ti, no quiero seguir negandome el placer de tenerte en mi vida, verte despertar cada mañana, tener a mi hija cerca y más adelante colocar aquel anillo en tu dedo y hacer que está familia crezca — la mire a los ojos — Te amo tanto Mer y aún cuando han pasado tantos años estoy seguro de que eres el amor de mi vida

Lo único que me había mantenido a flote en los últimos años había sido mi odio a su supuesta traición, pero ahora lo entendía, para ella había Sido difícil estar sola y embarazada, sin un apoyo seguro, no podía culparla por los errores que ambos habíamos cometido

—Perdoname — suplique

—Lo haré si tú también me perdonas

Luego de tomar una ducha y de tener que recorrer varias de mis juntas, los tres desayunamos juntos, ver aquella imagen delante de mis ojos se me figuraba demasiado irreal y temia que terminara pronto

—¿Sucede algo Liam? — la delicada mano de Mery se poso sobre la mía tratándome de regreso

—No nada, solo pensaba en algunas cosas del trabajo — le sonreí con cariño

—Hablando de eso, necesito conseguir un empleo con urgencia — me miró con algo de pesar — no puedo dejar que sigas corriendo con todos mis gastos

—No me molesta hacerlo — bese su mano antes de volver a hablar

—Se que no, pero solo soy una invitada aqui— señaló lo que ella creía que era obvio

—Eres la madre de mi hija, la mujer que amo y que espero desposar pronto, puedes gastarte mi fortuna si así lo quieres y seguiría sin importarme en lo más mínimo — espere a ver su reacción pero solo atino a sonrojarse

—Eres un tonto

—¿Que es tonto?— la pequeña voz de nuestra hija tomo toda nuestra atención

—Si Mery dinos que es tonto— me burle obteniendo a cambio un golpe en mi brazo

—Nada que mi pequeña niña tenga que volver a repetir — Lilian frunció su ceño mostrándome lo idéntica que era a mi

El asombro y orgullo no cabían dentro de mi, en tan poco tiempo ya amaba a esa pequeña y estaría dispuesto a dar mi vida por ella



Cuando te vuelva a verDonde viven las historias. Descúbrelo ahora