De este día no recuerdo mucho, solo que hablé con G***** sobre lo que pasó el martes. No hablamos ayer sobre esto, ya que no había mucho tiempo.
Estaba nerviosa y ansiosa de escuchar lo que me dijo la miss L. , tenía un poco de miedo. Pero le dije que no se preocupara. Me dio gracia. Casi siempre me parece tierno cuando se pone de esa manera, tímida, ansiosa, con su sonrisota. Le conté todo lo que hablé con mi la miss. Se quedó tranquila y creo que hasta reconfortada. Le dije también que tenía que hacer una bitácora, evidencia del curso de Tutoría, esta misma que hago ahora y que cada día le cojo más aprecio, aunque, siento que el enfoque que le estoy dando no me ayudará mucho. Detrás de estas palabras hay más que mostrar.
Si mal no recuerdo caminamos al paradero, mientras tanto conversábamos de las cosas de la vida. Me pidió que le acompañe a su trabajo. Me sentí alegre, pero un poco avergonzado; a las justas si tenía para mi pasaje de regreso. Pero ella, tan linda, me dijo que lo cubriría, entonces, accedí. La admiración con la que la veía expresaba lo orgulloso que me sentía de ella. A veces, no era necesario decirlo, quien sabe y me refuta; pero esa sensación era continua.
Llegamos al destino en una hora y media. Resolvimos ejercicios de "encuentra la diferencia" en imágenes. Eran para sus pequeñas a la cual enseñaba, pero yo insistí en hacerlo en el menos tiempo que ellas. Ella sonreía con mis ocurrencias y yo reía porque ella reía. El cielo estaba como quería. No lo hice tan mal, pero sin duda alguna me demoré demasiado. Sus pequeñas lo acabaron en la mitad del tiempo que yo, tal vez, mucho menos.
Cuando bajamos del carro me enseñó el recorrido y me lo traté de grabar. Ahora ya no recuerdo casi nada, pero sé que me entenderá. Soy un cabeza de pollo, lo sabe, pero mejor que no lea esto.
Me señaló la casa donde trabajaba enseñando a la pequeña M****** y traté de grabármela. Caminamos hasta una esquina, nos despedimos abrazándonos fuerte. La deje ir y ella a mi.
Fue un buen día. La noche me cubría, pero el cielo estaba como quería.
Llegué tarde por culpa del tiempo; avanza y no deja de avanzar.
Si no existiera la noche creo que todo sería más fácil. La noche no me deja avanzar.
YOU ARE READING
BITÁCORA
RandomLa vida no es tan simple como escribir. Hay dolor y letras que son intangibles. La bitácora es un claro ejemplo. Un joven y lo que quiere que lea el resto. Cómplice y protagonista de esta historia