¿Y si te lo digo con una canción?

Alternativa Anterior

*9 de cada 10 confesiones fallidas que publico están basadas en hechos reales de mi vida :'v

**Basado en Sentimientos Juveniles

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La señorita Megacariocito miraba de lejos como el pobre 4989 intentaba entablar una conversación -sin recurrir a los malos chistes- con una especial y pelirroja reticulocito.

Rió para sus adentros. Desde que se enteró de que el más adorable alumno de U-1110 estaba enamorado de AE-3803 cuando le tocó cuidarlo, no evitaba verlo con algo de melancolía.

No negaba que le causaba ternura su torpeza, pero deseaba ayudarlo pues se miraba a sí misma cuando ella era una precursora también.

***

*Flashback*

Decirle a su mejor amigo que lo amaba en una carta de amor, no era su plan A. Pero se estaba quedando sin opciones.

Y es que entendió que los hombres no entienden indirectas.

Se dejó crecer su cabello, aprendió a modular su voz y hasta tomó el valor suficiente de ir al electivo de "Principios de Elegancia" por tal de que 1110 notara esos minúsculos cambios.

Pero era más ciego que un topo de tierra.

Tenían un pequeño "ritual". Básicamente desde que se conocieron.
Todas las tardes iban al parque común a charlar, contar como estuvo su día e incluso compartir uno que otro bocadillo, pues con las clases, entrenamiento y exámenes ni daba tiempo de almorzar.

A veces el níveo estaba tan cansado del arduo entrenamiento para ser un neutrófilo, pero nunca faltaba. Pasar aunque sea un momento con su mejor amiga, siempre lo hacía sentir mejor y de alguna forma recobraba energías. En aquel tiempo no se daba cuenta de la verdadera razón por la cual él siempre necesitaba estar con ella un momento en las tardes.

Un día en especial, la rubia se vio al espejo y se convenció a sí misma.

-¡Hoy le vas a decir! O dejo que me tomen fotos en las competencias de natación de la próxima semana

Se peinó un poco más de lo que usualmente hacía y colocó un sutil brillo en sus labios. Llevaba en una bolsa de papel unos sándwiches de la cafetería. Sabía que ese día era entrenamiento crítico y por ende el metamielocito no había comido.

Llegó primero y se dispuso a esperarlo. No tardó mucho pues unos minutos después, llegó su compañero.

-¡Mega! Lamento si te hice esperar mucho -Se disculpaba tomando asiento a la par de ella

-No tardaste tanto esta vez -Respondió. Ella noto el cansancio en su voz, necesitaba reponer energías -Te traje esto, son tus favoritos -Ofreció el bocadillo

-Mantequilla de maní y jalea de pseudomona, ¿que haría sin ti? -Se lo recibió

-Posiblemente morirías de inanición -Bromeó ella

-Tal vez -Le siguió el juego -Pero si he de morir que sea en batalla

-¿En serio? ¿No te gustaría ser profesor también ya cuando seas veterano?

-No se me da mucho el cuidar niños, osea se asustan cuando me ven

-Eres un leucocito, das miedo a los eritroblastos. Es eso o es tu fea cara -Hizo de nuevo otro comentario de bullying "amistoso"

No quería ser muy obvia, así que siempre bromeaba así con él.

-Hmp y ¡tú...! Ammm, cuándo tengas algo burlable, me voy a burlar -Soltó un bostezo