Capítulo 39: Rendirse?

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He estado preparando una respuesta a las dos cartas que han sido enviadas por Yue y mi pequeño hermano. Aunque la carta de Yue está llena de algunas cosas innecesarias, aún hay ciertas partes útiles.

Entre ellas algunos sucesos importantes en la capital de los cuales ya tenía conocimiento y diferentes encuentros con mi hermano menor que me han traído cierta comprensión de su carácter. Según Yue, Feng Yu es un niño bastante inteligente y engañoso, se la pasa molestándolo y no lo deja en paz por más que lo aleje... Viéndolo de esta forma, parece un niño normal que ha encontrado algo interesante...

Desde que he recibido una carta de estos dos, sería malo no regresar una respuesta a cambio. Estaba seguro de que si Yue no recibía una carta suya pronto se enojaría con él...

El día había pasado muy rápido para Yang Mi, no sabía que escribir una carta sería tan difícil, ahora admiraba a Yue por ser capaz de mandar una carta tan grande...

Cuando terminó lo puso en el sobre, pero parecía un poco vacío... Mientras Yang Mi estaba pensando que hacer, el ruido de la puerta abriéndose llamo su atención...

"Pequeño Yang Mi, veo que encontraste algo que hacer..." Dijo el jefe Qing mientras entraba lentamente, tras él una figura de un joven vestido de túnicas negras se asomó por la puerta...

Yang Mi lo reconoció de inmediato... "Mu..." Gritó alegremente mientras trataba de levantarse de la cama, pero fue detenido por el jefe Qing...

"Quieto ahí... Lo traje para que te hiciera compañía, así que no te apresures, él no irá a ningún lado..." Dijo el jefe Qing con una sonrisa en su rostro, en esta ocasión no llevaba puesta su ropa de trabajo, lo que lo hizo ver como un joven libre y noble...

"De verdad?... Cuánto tiempo te quedarás?" Preguntó animado Yang Mi...

"El que sea necesario para que te recuperes... He pedido un permiso especial para que se quede aquí, así que pueden pasar el tiempo juntos tonteando, yo no los molestaré más..." Explicó el jefe Qing con una sonrisa, habiendo traído a Mu y teniendo cosas que hacer, se despidió dejando a los dos jóvenes...

"Cómo te encuentras?..." Pregunto Mu con una sonrisa al ver a su amigo.

"Horrible, tengo que quedarme aquí a pesar de que ya me siento bien... Quiero llorar... Mu, no puedes sacarme de aquí?..." Suplico Yang Mi mientras se aferraba a Mu de forma infantil...

Mu sabía que su amigo solo exageraba, así que no le prestó atención a sus súplicas...

"Si te saco de aquí estaré muerto, así que olvídalo..." Dijo resueltamente Mu.

"Eres un mal amigo, no puedes arriesgarte por mi un poco?..." Suplico Yang Mi medio en broma, pero si era verdad que ya no soportaba el encierro, quería salir...

"No, recupérate y luego podrás salir, sabes lo aterrador que puede ser el jefe Qing si desobedecemos?..." Declaró con fingida autoridad Mu mientras disfrutaba de molestarla su amigo...

Yang Mi no podía aceptar la negativa y comenzó a hacer un berrinche mientras molestaba a Mu...

Los dos siguieron discutiendo de esta forma boba hasta que se agotaron y Yang Mi cayó dormido, en cuando al asunto de su carta, ya lo había olvidado hace mucho tiempo.

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En la parte más al sur del país, un par de jóvenes se encontraban llegando a un pequeño pueblo en el campo...

Estos dos no eran otros que Liu y Rong, había pasado un tiempo desde que dejaron el campamento y después de un viaje tan largo, lograron llegar al pueblo natal de Rong...

"Todo es tan tranquilo por aquí..." Dijo Liu mientras se estiraba y tomaba un gran respiro del aire fresco del campo...

"Eso se debe a que hemos pasado mucho tiempo en el campamento rodeados de mucha gente, por eso te parece tranquilo este pequeño pueblo..." Explicó Rong mientras se dirigían a la entrada del pueblo...

Liu podía escuchar el tono un poco apagado en Rong, desde hace unos días, la actitud de Rong se había vuelto extraña, era como si estuviera más triste con el pasar del tiempo...

"Hemos llegado a mi casa... Quieres pasar?..." Dijo Rong mientras se bajaba del carro...

Frente a ellos se podía ver una modesta casa de campo, aunque la pequeña casa parecía un poco solitaria debido a su ubicación, con el humo saliendo de su chimenea se sentía muy cálida y acogedora...

Liu no dudo más y acepto la invitación... Al llegar, Rong tocó la puerta cortésmente a lo que una joven voz contesto y en poco tiempo una pequeña niña de no más de diez años les habría la puerta...

Liu quedó anonadado al ver a la pequeña, pues sus facciones eran casi idénticas a las de Rong, sus ojos no podían evitar verla con emoción mientras pensaba en la posibilidad de que Rong luciera similar a esta niña cuando era más pequeño.

Rong noto la emoción en su rostro y de alguna manera se sintió un poco molesto en su corazón, que rayos estaba pensando Liu al ver a su hermanita con esa expresión tan desagradable?, Aunque quería golpearlo se contuvo y rápidamente oculto su enojo en su rostro.

La pequeña niña se detuvo al ver a los dos hombre jóvenes frente a la puerta, pero no pudo contener su felicidad y gritos de sorpresa al encontrarse con la familiar cara de su hermano, por lo que no notó las extrañas expresiones de los dos jóvenes...

"Hermano, hermano... Te extrañe mucho..." Gritó la pequeña mientras se colgaba de Rong.

Había pasado un tiempo desde que Rong había visto a su familia y está pequeña niña ya estaba tan alta.

"Mei, estás tan grande ahora..." Dijo Rong mientras abrazaba a la niña con mucho cariño...

Liu ahora entendía, siendo los dos hermanos era normal parecerse un poco, mientras estaba viendo a los dos, sintió un par de grandes ojos que lo veían con curiosidad, la pequeña niña había visto el rostro desconocido y sentía mucha curiosidad también.

"Hermano quién es él?" Dijo Mei mientras actuaba infantilmente y señalaba a Liu...

"Él es un amigo, no te preocupes por él, no se quedará mucho tiempo de todos modos..." Dijo Rong de forma un poco incómoda.

La pequeña Mei asintió muy alegremente y los invito a pasar, mientras Liu de alguna manera no pudo evitar sentirse un poco amargado por las palabras de Rong, pero como si no fuese nada los siguió dentro.

Rong estaba muy pendiente de su reacción, pero al no ver ningún cambio en su rostro suspiro internamente, desde hace ya algún tiempo venía sintiendo esa incomodidad en su pecho. Estaba muy feliz de pasar tiempo con Liu en este viaje, pero a la vez se sentía muy frustrado debido a que la pared que los separaba parecía cada vez más insuperable y sus sentimientos por él solo iban en aumento con cada día que pasaba.

Aunque había pensado en un principio que solo estar juntos como amigos era suficiente, poco a poco se dio cuenta de que estaba muy equivocado y ese cambio fue más notorio en estos últimos días. El deseo de acercarse cada vez más, se hizo más y más fuerte, había intentado muchas formas sutiles de llamar la atención de Liu y hacerle ver sus sentimientos, pero al parecer eran cosas inútiles.

Liu en ningún momento había notado estas señales, por lo que Rong estaba por darse por vencido ya que la distancia entre los dos no podía acercarse más allá de amigos y eso le tajo una gran decepción.

Debido a esto, su voluntad para luchar se fue debilitando más y más, la incapacidad y el miedo se habían apoderado de él, Rong era incapaz de decirle sus sentimientos a Liu por temor a ser rechazado y nunca poder volver a estar junto a Liu ni siquiera como amigo.

Rong se sentía miserable y había decido rendirse para al menos no arruinar la amistad que tenia en este momento con Liu, había pensado que pasar un tiempo alejado de él, haría que su corazón se tranquilizara un poco, pero separarse era difícil y más cuando ya estaba completamente perdido por Liu, así que no tubo más opción que tomar caminos diferentes y esperar por qué sus sentimientos de amor se apagaran con el tiempo...

Yang MiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora