El Diamante De La Tierra

Clases con perla y sorpresa de camino a casa

Al parecer era la primera ves que Judas y Steven se iban por el portal, con ello llegaron a un gran coliseo que estaban en ruinas.

-Para está lección vamos a utilizar un holograma, por cierto Steven te gustaría unirte??-. Perla preguntó al ver las estrellas formadas en sus ojos. - Claro!!!-.

Las clases comenzaron con perla explicando los fundamentos, y al parecer sus enseñanzas eran muy buenas, pues que podías esperar de un ser que ha vivido millones de años aprendiendo diferentes tipos de artes.

- Recuerden esto. La mejor defensiva es la ofensiva, con esto no digo que deban de dejar un escudo pero en un duelo lo primero que el oponente hará será atacar y si logran herirlo no pares hasta que... Hasta que....-. El silencio permaneció en el coliseo, los 2 chicos se miraron entre sí y solo pudieron ver cómo perla tenía una cara pálida.

- Hasta que hallamos destruido a nuestro oponente!-. Judas repitió la frase genial que había escuchado en televisión, pero cuando miro a perla y su expresión de incredulidad no supo cómo manejar este momento, solo pensó en disculparse. - Yo lo siento...-.

Otra vez nadie dijo nada, solo hasta que perla comenzó a tomar postura y con un respiro asintió a Judas. - Es cierto, hasta que extermines al enemigo, así que manos a la obra y comenzamos a entrenar-.

Con ello perla dio una serie de entrenamientos para mejorar el físico de ambos, pero al parecer quien más problemas sufría era Steven.
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El tiempo pasó volando y ya era parte del anochecer, eso significaba que Judas tenía que irse a su casa y volver con su padre.

- Gracias por todo Steven y Perla, los veo mañana-. Judas se despidió y comenzó a ir hacia su casa.

Cuando iba camino a cruzar la calle, siente como alguien lo iba siguiendo.

- Vamos sal de ahí, que es lo que quieres... Si es dinero, en este momento no tengo nada puedes irte-. Pero al parecer no había ninguna respuesta con ello, pero aún persistía la mirada fija en el.

- Ya veo... Supongo que lo imaginé-. Con ello se da vuelta y da unos pocos pasos, al parecer había brisa muy rápida camino hacia el, pero una sonrisa confiada se inclinó y salto hacia un lado.

- Veo que decidiste aparecer... Pero no recuerdo haber tenido problemas contigo... Quien eres!???-. Una figura negra salió de la sombras, al parecer la figura pertenece a una mujer adulta de una estatura un poco mayor a lo normal... Solo que si mirabas con más detalle, tenía una figura muy atlética y aunque inexistentes por la ropa, aun sobresalía su sexy figura.

-Hooo... Veo que te has entrenado bien, al parecer mi trabajo va a ser complicado-. La voz de la mujer expresaba mucha sorpresa pero también diversión, lo máximo que Judas se imaginaba por la intención que emanaba y claro por la gran daga que está sosteniendo que es una asesina.

- Bueno señorita, creo que se está confundiendo... Yo solo soy un chico normal de ciudad playa-. Al parecer si el problema es grande lo mejor siempre será solucionarlo con un diálogo... - Valla, Valla, Valla.... Conque un chico normal. Hee!!., Eso explica el como pudiste esquivar mi daga que iba a tu corazón-. Su tono sarcástico era tan real que por un momento Judas pensó que le había creído... Pero como una asesina podría creer que no era su objetivo y que un simple adolescente escapó con vida de su mejor estocada.

- Bueno... Es cierto que no soy un chico normal, pero creo que se está confundiendo de objetivo no recuerdo haber ofendido a una persona y tenga tanto odio para enviar un asesino o si???-. La pregunta misma desconcertó a Judas pero quién diría que la respuesta no iba a ser la esperada.

- Hooo. Vamos encerio no me recuerdas???... Espera déjame refresco tu memoria, acaso no reconoces este rostro Peter...-. Con ello se quitó la máscara, revelando un hermoso rostro de una joven de ojos cafés y pelo negro, solo que en su ojo tenía una gran cicatriz y sus labios contenían una clara línea hacia arriba, claramente también una cicatriz solo que esta ves incluso parecía que podía abrirse en cualquier instante.

- Es encerio... No sé quien seas pero yo no soy ese tal Peter... Te lo juro, si fuera el sabría quien eres!!!-. La débil voz de Judas jugó un papel importante, pues al parecer las cicatrices y el deformado rostro de la asesina se ha formado un horrible recuerdo, como si fuera fácil ver a una asesina que viene hacia ti culpandote de algo que no hiciste y además enseñándole la obra perversa de alguien enfermo como si tú fueras el culpable.

- Jajajajaja crees que voy a caer en ese juego... Claramente yo reconozco tu ros... Tu.... Tu... Quien eres???, Qué relación tienes con Peter... Cómo es que eres muy similar a el...-. Las preguntas no dejaban de salir de su boca, y al parecer con cada palabra su tono se volvía más errático y sin control. - Yo no lo sé, pero si quieres puedo ayudarte en algo!??-.

- Tu... Me ayudaría más si te cortaras ese rostro inmundo... No sé quien seas pero... *arggghh*-. Con un gran impulso de abalanzó sobre Judas tumbando lo y tratando de clavarle su daga, pero al parecer Judas trato de resistir sin embargo ya venía cansado de haber entrenado todo el día con Perla y Steven, así que solo la daga comenzó a entrar lentamente en el pecho de Judas.