Solo ella

61 4 0
                                    

Hace mucho tiempo no sentí lo que mi cuerpo, cerebro, corazón y todos mis órganos acabaron de presenciar.
Te vi llegar con la ligereza de tus esculpidas piernas, bajar a tierra firme y guiado por una corazonada me fije en ti erróneamente; no solo en ti si no mas bien en cada detalle que pudiese observar.
El viento acompañaba y era parte del compás movimiento de tu cabello que tanto extraño, aun recuerdo como aquellas enredaderas atacaban mi cabeza solo para que la voracidad de tus labios invadan los míos. 
Me tenias desconcertado, mi mente se desconecto de todo tan solo para seguir a pleno cada paso de ti. Segundos después este se reactivo torpemente cuando tus ojos guiados por la duda de una muchedumbre, buscaban  ese algo que hace mucho no encontraban.
Nuestras miradas chocaron, mientras mi pecho se exaltaba yo yacía inmóvil ante tu mirada  la cual bajabas a instantes solo para no tropezar; involuntariamente de mi torpeza nació una pequeña mueca, una sonrisa escondida que tu conocías bien y una vez al verla, tus mejillas se ensancharon y dejaron ver por ultima vez aquella sonrisa que me había asesinado meses atras y a la vez darme la vida que requería.
A pesar de los cortos segundos, fueron eternas las imágenes que mantengo hasta el ultimo momento que guiada por tu deber, cruzaste la plaza para llegar a un callejón, lugar en el cual antes de adentrarte, miraste por encima de tu hombro buscando una vez mas los ojos de esa persona que fue lo peor y lo mejor que le a  ocurrido a tu vida. 
Hasta siempre.

A ratosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora