¡I HATE YOU! • • • [Chile x Perú]

• 5 •

P.O.V Perú:
10:30 AM:

Abrí mis ojos al término de ese sueño en el cuál yo recordaba todo lo que pasó en esa pequeña salida que tuve con Argentina.

Me levanté con gran dificultad de mí cama, producto del dolor de cabeza que obtuve al beber tanto alcohol, una vez me levanté, me dirigí al primer piso para ver cómo se encontraba Argentina.
Al bajar pude ver a Argentina sentado en el sofá, con una bolsa de hielo la cual, al parecer la había sacado de mí refrigerador y que se encontraba tapando gran parte de su rostro, rostro el cuál volteó a verme una vez se dió cuenta de mí presencia.

- Che .- Dijo Argentina mientras retiraba la gran bolsa de hielo de su cara, y me daba una mirada pacífica .- ¿Te puedo preguntar algo?

- Sí, seguro... .- Al momento que dije eso ví como aquella calmada cara de Argentina cambio a una un poco estresada y llena de confusión.

- ¿Por qué tengo la cara tan hecha mierda?

- Bueno, estabas muy borracho y...

- ¿"y..." Qué?

- Te caíste en la acera mientras estábamos viniendo para acá .- Supongo que decirle eso es mucho mejor, que "Estuviste a punto de violarme".

- Che... .- Al decir eso ví como Argentina cerraba sus ojos y empezaba a respirar profundamente, al parecer hizo eso para relajarse -. Alta borrachera que nos metimos ¿No?

- Sí...

- Bueno pibe, aparte del hecho de que me estampé contra el pavimento, fue una buena noche ¿No?

- Sí, se puede decir que fue una noche un tanto agradable... .- Dije, aunque la verdad yo pienso que esa fue la peor noche que pude haber tenido.

- Pibe.

- ¿Qué?

- ¿Tenés hambre?

- Sí.

- ¡Entonces deberías comerme la porong--

- La puta madre Argentina, no pasó más de diez minutos y ya me estás saliendo con tus "bromitas"...

- Y mirá vos, que hablando así es mucho más divertido, ó ¿No?

- Sí es divertido, pero algunas veces puede ser muy estresante.

- Che ¿Sabés que es estresante aparte de eso?

- No.

- Estar cagándose de hambre por no desayunar...

- ¿Es una indirecta hacía mí?

- ¿Qué creés?

- Entonces... ¿Quieres que preparé el desayuno?

- Sí pibe.

- Pues, si lo voy a preparar ¿Tú al menos me podrías ayudar?

- Ya que insistes...

- Tan solo te lo pedí una vez .- Susurré, y felizmente Argentina no escuchó aquel susurro, y suponiendo que él lo hubiera escuchado, pues no llego a responder, y quizá no lo hizo, ya que al mismo tiempo que decía eso yo lo sujeté con fuerza para ir a mí cocina.
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11:50 AM:

Después de ayudarnos mutuamente para preparar el desayuno, los dos nos pusimos a alistar la mesa.
Una vez la mesa ya estuvo lista, nosotros por fin desayunamos.
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12:50 PM:

Finalmente a esta hora, tanto Argentina como yo terminamos de "desayunar", y yo menciono desayunar entre comillas, ya qué la hora normal para desayunar de cualquier país o persona es desde la 6:00 AM hasta las 10:00 AM, o bueno al menos eso es lo que yo pienso como un buen horario, un horario el cuál según Argentina se los pasa por los huevos.
A la par que por obvias razones al término del desayuno tanto Argentina como yo llevamos nuestros platos y cubiertos al lavadero, para posteriormente entre los dos, lavarlos.
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El resto del día que quedaba por delante después del desayuno, la pasé con Argentina mirando películas, haciéndonos bromas, preparando nuestra cena, etcétera.
Él finalmente se despidió de mí y fue de regreso a su casa aproximadamente a las 8:30 PM.
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Cuándo él se fue, sentí de nuevo un familiar sentimiento, el sentimiento de la soledad.
Un sentimiento el cuál poco o nada me interesa experimentar, y que decidí tratar de eliminar leyendo los libros que tenía en mí cuarto, así que con un poco de prisa subí a mi habitación y rápidamente saqué de mi estante unos libros con los poemas de César Vallejo y me puse a leer.
En el momento que terminé de leer el primer libro, me acordé del momento en el cual vino Bolivia hacía mí casa por qué tenía mi celular apagado, y así gracias a aquel simple recuerdo de esa visita, me dispuse a dejar de leer y buscar mi celular para utilizarlo.
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Felizmente para mí, logré encontrar mi celular mucho más rápido que el día de la visita de Bolivia. Al primer momento que lo encontré, traté de prenderlo, y suerte la mía que el celular aún tenía un 60% de batería.
Cuando mí celular ya estaba encendido me puse a pensar con quién conversar, no tenía pensado hablar con Argentina después de haber estado prácticamente dos días con él, y tampoco tenía tantas ganas de hablar con Bolivia, ya que de seguro estará pasando tiempo con Chile. Así que mis lista de personas con quién conversar se empezaba a encoger, a la par que empezaba a pensar que sería mejor mirar una película o hacer alguna otra cosa que el rutinario "Leer poemas de César Vallejo", ya que últimamente se vuelve muy repetitivo, para mí sorpresa cuando estaba teniendo está gran duda sobre que hacer, mí teléfono empezó a sonar, al parecer alguien me estaba llamando, ese alguien era Chile...

Al momento en el que me fijé que Chile era el responsable de aquella llamada pensé en colgarle, ya qué si algo tengo claro, es que de todos los países con los que no quiero llegar a hablar estaba Chile, ya qué tanto él como yo, no nos queremos llegar a comunicar, sin embargo por motivos políticos debíamos de poseer el número de teléfono de los países que forman la O.N.U, ó al menos tener el número de teléfono de los países que integran nuestro continente, yo por obvias razones preferí (al igual que casi todos los países que conforman la O.N.U), tener tan solo el número de teléfono de los países que forman el continente de América.
Así que con un poco de prisa negué la llamada, pero sorpresa la mía que aquel país siguiera llamándome...
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Está ya debía ser la quinta vez que le colgué la llamada y para mí mala suerte, unos minutos después llamó de nuevo, a este punto pensé en apagar mi celular, pero me decidí por contestar.

~Llamada entrante~

- ¿Qué demonios quieres?

- ¿Perú? ¡Por fin me contestaste la llamada!

En aquel instante me dí cuenta que aquella voz que me respondió no era para nada como la de Chile, sonaba más bien como la de...

- ¿Bolivia?

- Sí... oye necesito aclarar algo.

- ¿Qué cosa?

- ¿Por qué no respondías mis llamadas?

- Pensaba que eras Chile...

- Vaya tú si que sigues teniendo problemas con él...

- Sí... espera un minuto ¿Por qué demonios no llamaste desde tu celular?

- Se gastó su batería, así que aproveché en pedirle a Chile el suyo.

- Ok, entonces le pediste a Chile su celular y me llamaste unas seis veces ¿Y todo eso para qué?

- Para que mañana vengas a la casa de Chile, ya que allí vamos a hacer una especie de reunión de casi todo los países de Sudamérica.

- ¿Y esa reunión tiene el fin de...?

- Tiene el fin de pasar el rato con amigos, y si es posible solucionar algunas enemistades.

- Bueno, supongo que me convenciste...

- ¡Genial!

- Sí, aunque ¿Van a llevar licor?

- Bueno, no sé si algunos de los que invite lleven, pero da igual.

- No, no da igual, ya qué todo se podría ir a la misma mierda si todo nos emborrachamos.

- No seas exagerado.

- No lo estoy siendo... .- Dije mientras recordaba lo que pasé con Argentina.

- Bueno, pero en caso de que lleven alcohol, tan solo evita beberlo y listo.

- Bueno, entonces suponiendo que evitó beber, tal cual tú me dijiste, tan solo me quedaría saber a qué hora va a ser la reunión.

- Bueno, va a ser como a las 3:30 PM, aproximadamente.

- Más o menos como a la hora del almuerzo ¿No?

- Sí, así es.

- Entonces ¿Todos almorzaremos ahí?

- Sí.

- Bueno, entonces supongo que acabaste con todas mis dudas...

- Sí, así fue...

- Bueno, pues ¡Adiós!

- Sí ¡Adiós!

~Llamada finalizada~
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Una vez terminé la llamada, apagué mi celular y me dispuse a hacer mi rutina de todas la noches antes de dormir, poniendo como siempre al final mi alarma sobre mi mesita de noche, y así poder dormir.