Una doble vida.

El despertar.

7.

(Pov's Judith)

Salí al balcón, mientras tomaba un poco el aire. Me sentía mareada, mientras lágrimas corrían por mis mejillas. Observé el suelo. "El suelo no está tan alto" Me senté en la barandilla, y miré al infinito. Un aire me hizo sentir libre, mientras mi pelo se balanceaba al compás que este.

Decidida, salté. Sintiendo la gravedad sobre mi cuerpo. 

Un duro golpe, hizo que me un grito ahogado saliera de mi cuerpo. Empecé a correr cojeando, mientras tropezaba con cualquier rama. Vi a Sam, tirado en el suelo, inmovilizado, mientras todo se desvanecía. 

Corrí hacia él, todo lo rápido que pude. Le agarré el brazo, pero algo pesado me lo impedía.

S-¿Judith?-Preguntó, mientras intentaba respirar con cada palabra. Intenté tirar de él, pero nada. No se podía. Es como si un gigante estuviera encima de él. Me miró con unos ojos vacíos, mientras se ponía pálido. Más lágrimas salían de mis ojos ya rojos, mientras empezaba a tartamudear.

J-¡D..Dean!....¡A..ayudaa!-Grité con todas las fuerzas que me quedaban, pero el silencio llenaba aquel prado, donde la casa estaba a más de tres kilómetros. Me senté, mientras seguía tirando de Sam, pero todo esto era imposible.-¡Sam! ¡No te vayas, por favor!-Dije, mientras veía sus párpados más pesados para él. Me agarró de la mano con toda la fuerza que se quedaba, mientras me miraba, con sus párpados entrecerrados.

S-C..Cuida de...A..Andrea...p..por favor.-Dijo tartamudeando. El miedo invadió mi cuerpo. Vi a un hombre a lo lejos, que me miraba con una sonrisa, mientras seguía caminando. Una ráfaga de viento llegó hasta mí, haciendo que cayera vagamente al suelo. El hombre se acercó, mientras miraba a Sam con una sonrisa malévola.

X-Así que tú eres Judith, ¿me equivoco?-Dijo con voz grave, que hizo que un escalofrío recorriera mi espalda.

J-Sí.-Dije mientras le miraba de arriba a abajo.-¿Podrías ayudarme?

C-No sabes quién soy, ¿no?-Preguntó mientras se acercaba más a mí.-Soy Crowley, el rey de los demonios.

J-Me da igual quién seas, como si eres Pedro que pasa por mi casa.-Dije en tono sarcástica.-Ayúdame.

C-Con una condicion.-Dijo mientras se acercaba más a mí, y se agachaba hasta estar a mi altura.

J-¿Cuál?-Dije ya asustada. "Ese hombre tiene mala pinta"

C-Es una cosa muy sencilla.-Dijo mientras me ayudaba a levantarme.-Solo tienes que irte conmigo.-Dijo mientras miraba a Sam, el cual echaba al parecer, su último suspiro.

J-Déjale ir, y me iré contigo.-Dije mientras miraba a Sam, el cual me miraba y me negaba con la cabeza. Yo asentí, y vi como Crowley decía palabras muy raras. Sam empezó a respirar normal, mientras se llevaba la mano al pecho. Crowley me agarró y una masa de niebla apareció alrededor. 

Mi cabeza empezó a dar vueltas, y un mareo apareció de la nada. Empecé a chillar, mientras Crowley se reía del espectáculo. Vi como Sam intentaba cogerme, pero un agujero negro me tragó, llevándome con Crowley al infierno.

(Pov's Sam)

Vi como Judith desaparecía. Enseguida me levanté y eché a correr, a llamar a Castiel. 

Cas-¿Qué pasa Sammy?-Preguntó mientras se cruzaba de brazos, mientras se reía por mi expresión.

S-Han capturado a Judith.-Dije mientras la culpa me invadía. Estaba ahí delante, sin poder hacer nada, y por mi culpa, Judith se había ido.

Cas-¿Quién la ha capturado?-Preguntó nervioso, solo la conocía por mi y por Dean.

-Crowley.-Dije mientras una lágrima se caía por mi mejilla. Cas me cogió del brazo y me tiró hacia dentro de la casa.

D-¿Cas? ¿Qué haces aquí?-Preguntó mientas le miraba con una sonrisa, me miró  a mí y su rostro cambió de inmediato.-¿Dónde está Judith?-Preguntó nervioso.

Subí corriendo las escaleras, y entraba en la habitación de Andrea, mientras ellos invocaban a Crowley, no quería mirar, no volvería a mirar a Judith a la cara. No podría volver a mirarla. Todo esto es mi culpa.

(Pov's Judith)

Estuve maniatada en una celda, mientras un demonio me miraba agresivamente.

X-Toma.-Dijo mientras me tiraba una bandeja con comida.-Te lo manda Crowley.

Le escupí en el suelo, mientras miraba a la otra celda, donde un esqueleto se mantenía atado. El demonio entró, mientras me cogía por el cuello y me levantaba.

X-Deberías estar agradecida, normalmente Crowley deja morir de hambre a sus prisioneros.

Empecé a respirar mal, mientras intentaba quitarle la mano de mi cuello.

J-Suel...tame...no...pue...do...res...pi...rar...-Dije mientras seguía intentando zafarme de su agarre.

C-¡Suéltala!-Gritó Crowley, mientras tiraba al demonio hacia atrás. Caí en el suelo, mientras me daba en la cabeza. Un hilillo de sangre salió de esta,mientras un dolor inmenso atravesó mi cuerpo. 

X-Lo siento mucho.-Dijo mientras hacía una reverencia. Se marchó refunfuñando, mientras Crowley acariciaba mi cuello.

C-Ahora me obedecerás, seguirás mis órdenes. La sangre será tu debilidad.