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Hwasa no lo logro, aunque esa tarde estuvimos con ella compartiendo historias, risas e incluso jaebeom canto para darle ánimo, hizo la promesa de volver para ver cómo lo hacía aguantando a mi esposo, pero al final no lo logró.

Fue duro, incluso para mí que recién la conocía, fue jodidamente doloroso para todos los que estuvimos ese día ahí, esperando los resultados de la famosa cirugía.

¿Como se le dice a un niño de diez años que perdió a su madre? Aún no lo se,  pero lo hice, bueno alguien debía hacerlo y parece que jaebeom se había vuelto a cerrar.

Ahora era definitivo, hyunsik es su hijo y tenemos que hacernos cargo de él, no creo que el panorama fuera bueno en la mente de mi esposo, pero le estoy dando su espacio, además tratando de mantener a su hijo en pie.

Cuando la horrible noticia fue dicha, comencé a hacer los preparativos para el funeral, quería mantener mi mente ocupada y dudaba que hwasa hubiera tenido el dinero para dejar algo listo.

Al final jungkook me dijo que el se haría cargo, que cuidara de hyunsik, exigí que todo fuera pagado con mi propio dinero y mi cuñado aceptó, así que después me fui a cuidar del pequeño no había dicho una sola palabra desde que la mala noticia había dejado mis labios.

No lo obligaba a hablar, había estado en su posición, perdiendo a la única persona que teníamos en la vida, estuve solo cuando la mía se fue al cielo, pero no iba a dejar a hyunsik pasar por eso, el estar de pie bajo la lluvia mientras te despides de un trozo de tu corazón.

El velatorio fue bastante corto, había muerto en cirugía, no era necesario esperar mucho, pasamos esa tarde y noche en el lugar que la funeraria nos había prestado, bambam, jimin, jungkook, y los chicos de bad habit, eramos los únicos acompañando al pequeño en su momento más difícil.

No habían familias a las que avisar, ni mejores amigos, nada, solo nosotros y ahora se repetía la acción.

Parecía que el cielo lloraba cada vez que se lleva a una madre, porque ahora lo hacía, al igual que cuando la mía había muerto.

Cómo hyunsik sólo habló para pedir su guitarra, no sabíamos nada de la vida de hwasa, por eso el sacerdote que llevaba la ceremonia, hablaba sólo cosas sin sentido, tan impersonales que me dan ganas de ir a patear su culo irrespetuoso, pero creo que me vería incluso peor que el.

El pequeño mira el féretro con ojos vacíos, no hay nada ahí, su brillo al que me había acostumbrado estos días, se fue, y me partía el corazón porque estuve ahí.

De un momento a otro siento como suelta mi mano y comienza a caminar, así que lo sigo en silencio para ver que va a hacer, se mueve hasta donde está el hombre dando un discurso de mierda y este guarda un silencio.

—se que no conoce a mi mamá, pero gracias por estar aquí—

Su voz suena como un hilo doloroso y el hombre me da una sonrisa incomoda, pero el niño no se mueve.

—ahora yo voy a despedir a mamá, quiero se vaya tranquila y hay una sola forma—

Agrega y el hombre me mira para pedir permiso, asiento rápido, es el único que de verdad conocía a la mujer, el único que tiene derecho a despedirla como se le de la gana.

Hyunsik se mueve y saca su guitarra después se sienta en una silla que se ve abandonada, lo veo mirar las cuerdas con dolor y me siento a su lado para darle apoyo, el asiente y comienza a desgarrar unas notas, de una canción que conozco,  haciendo que mi corazón se apriete.

my despicable rockstar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora