Había una cosa clara, las chicas intentarían que la morena y la ojiverde se quedarán solas y se quedara allí a dormir.
Llegó el viernes por la tarde-noche y ya estaban todas en casa de la morena, habían comprado cosas para pasar la noche. Todas estaban tranquilas, hablando sobre que película ver, si una de terror, si una de amor, si una de comedia...
Al final decidieron una de comedia a gusto de todas. La noche transcurrió tranquila, todas estaban en el cuarto de la morena hasta que poco a poco se iban marchando las chicas, unas por excusas y otras por que debían hacerlo, hasta que solo quedó Lauren.
Las dos estaban en silencio, no sabían que decir, pues solo se habían visto varias veces y no es que hubieran hablado mucho.
Lauren: Bueno... Me iré, se está haciendo tarde. - se levantaba de la cama con dirección a la puerta -
Camila: Lauren espera, ¿Por qué no te quedas a dormir? Digo, mis padres no están y vendrán en dos días, tampoco quiero estar sola estos dos días.
Lauren lo pensó, sabía que podía pasar 2 cosas, o que todo saliera bien o que todo saliera mal y ella rezaba por que fuera la primera.
Lauren: Claro, solo espera que avise a mi madre.
Después de un rato Lauren entra en la habitación, Camila ya estaba acostada esperando a que la más alta entrará también en la cama.
Lauren se puso el pijama en el baño, nerviosa por lo que podría ocurrir allí dentro, cuando acabó salió del baño y se encontró de cara con Camila.
Se acostó a su lado, en silencio, otra vez. No sabían de qué hablar, se tumbaron, la luz estaba apagada, solo sé escuchaba las respiraciones de ambas.
Camila se giró hacía Lauren quedando cara a cara, Lauren pasaba su mano por la mejilla de Camila, la morena cerraba los ojos con el contacto de la más alta.
Poco a poco se iban acercando hasta que sus narices rozaban hasta que finalmente juntaron sus labios. El beso era lento, como con miedo en que algún momento se fuera a romper la magia.
La más alta acercaba a Camila hacia ella, la ropa empezaba a estorbar, pero no querían ir rápido, querían ir despacio querían que el momento quedara grabado en su memoria, no había prisa.
Si semanas atrás las hubieran dicho que estarían así en este momento ambas se hubieras hartado a reír de los que pensara semejante estupidez, pero ahí estaban ellas. Después de tanto tiempo volvían a estar juntas, en momentos como este se nota que el destino por A o por B cuando quiere que alguien esté con otra persona lo hará. Y que bien hizo el destino.
Ya solo quedaba un problema y era Selena, todavía no sabían cómo hacer para hablar con ella pero lo que no sabían era que Selena ya había encontrado a alguien que si estuviera interesada en ella de la misma manera que ella estaba interesada.
Pero esto nadie lo sabía.
Las chicas habían quedado para confirmar su relación, ya era hora.
Estaban esperando a que llegara Selena, hasta que la vieron aparecer por la esquina acompañada de una chica.Cuando llegaron a nuestro sitio nos presentó a la chica como su novia, cosa que nos sorprendió a todas, se llababa Karla, iba a otro instituto y por sorpresa vivía solo a una calle de la mía.
Selena:, ¿Y que nos queríais decir?
Lauren y Camila se miraron y entrelazaron sus manos.
Lauren: Camila y yo estamos juntas Sel. Espero y que no te moleste.
Selena se sorprendió, también se sorprendió de que estuvieran todas juntas pero ella no era nadie para opinar sobre ese tema y se alegró en el fondo por ellas, aunque la hubiera gustado estar con la morena no podía obligarla a estar con ella cuando estaba enamorada de otra persona.
Selena: Estoy muy orgullosa de vosotras chicas y ahora qué os parece si vamos al cien. Como en los viejos tiempos.
Y es así como todo surgió, pasaron de enemigas a pareja, de odiarse a amarse.