La Declaración (Finalizada)

Capitulo 4

2 meses después.

Hacía ya tres días que venía sintiéndome terrible. Mareos todo el día y todo lo que comía terminaba en el baño. Lo que hacía que las chicas tuvieran ciertas sospechas, que hoy querían confirmar.

El problema iba a ser cuándo, porque yo no quería decirle nada a Liam de esto y él no se había movido de al lado mío en estos días, para así poder cuidarme.

— ¿Cómo te sentís amor? — preguntó el susodicho entrando a la habitación con una taza de té en la mano.

— Bien. — traté de hacer la mejor sonrisa para que mi respuesta fuera un poco más creíble. Me entregó la taza de y después se sentó al lado mío.

— Tomalo. No creo que te haga mal esto. — dijo pasando un brazo por mis hombros y besando mi mejilla.

— Gracias. — nos quedamos unos minutos en silencio. Mientras tomaba el té, pensaba en que podía decirle para que salga un rato de casa. — Amor, ¿Por qué no salís un rato?

— No, no quiero dejarte sola.

— Pero yo le puedo decir a alguna de las chicas que venga y vos salís un rato. — dije girando un poco mi cabeza para poder mirarlo. — Llamá a los chicos y se ven, estuviste acá encerrado tres días.

— Enserio, estoy bien. Cuando estés mejor saldré un poco.

— No, yo ahora llamó a Zayn y le digo que vas a su casa. — dije estirándome para agarrar su celular que estaba sobre su mesa de luz. — Me siento mal viéndote acá. Le digo a Dani que venga.

— Esta bien, llamalo. — dijo resignado. Le di un corto beso en los labios y marque el número de nuestro amigo.

— Hola Liam. — saludo el chico del otro lado de la línea.

— Liam, soy Brooke ¿Cómo estás?

— Oh! Hola Cokiee! Bien, ¿Vos? ¿Ya estas mejor?

— Mas o menos. — le hice saña a Liam para que se vaya cambiando. — Pero estoy recuperándome.

— Que bueno. Me alegro, nos tenes preocupados.

— No pasa nada. — dije tranquilizándolo. Siempre se preocupa demasiado por los demás. — Zayn, te llamaba para avisarte algo.

— Si Cokiee decime.

— Liam va a ir para tu casa. Quiero que salga un poco, ha estado tres días encerrado acá conmigo.

— Bueno, lo espero entonces. ¿Con quién te quedas? — me preguntó el castaño. — No podes estar sola.

— Le decís a Dani que venga. Ella ya me había dicho que si Liam salía venía.

— Dale, ahora le digo que vaya para allá.

— Gracias Zayn. — en ese momento salió Liam del baño, bañado y cambiado. — Te dejo.

— Bueno Cookie cuidate mucho. Nos estamos viendo.

— Adiós. — corté la llamada y me levanté de la cama, para llevar la taza a la cocina y estirar un poco las piernas.

— ¿Viene Dani? — preguntó Liam siguiéndome.

— Si, ahora le decía Zayn. Así que podes ir tranquilo. — dije sonriéndole. Dejé a taza en la mesada y me senté en la barra que había entre la cocina y el comedor.

— ¿Me vas a llamar si necesitas algo? — preguntó posicionándose frente a mí.

— Si corazón. No te preocupes que voy a estar bien. — sonreí para que se tranquilice un poco y pueda irse bien.

— Bueno, cuando llegue Dan me voy. — se acerco para rozar sus labios con los míos y darme un dulce beso.

Después de unos 15 minutos llegó mi amiga, dejamos a Liam un poco más tranquilo que por cualquier cosa que pasara lo llamaríamos y se fue.

— Bueno, traje lo que necesitas. — dijo mi amiga buscando en su cartera, de donde sacó un test de embarazo.

— ¿No tendríamos que llamar a las chicas? Dijeron que querían estar acá.

— Si, vamos a llamarlas.

Después de avisarles, preparé un poco de té y nos sentamos a esperarlas. Luego de unos minutos empezaron a llegar.

— Haces lo que dicen las instrucciones y esperamos 5 minutos. — dijo Dani entregándome la caja. Entré al baño, mientras todas se sentaban en la cama a esperarme.

Después de unos minutos salí y fui a esperar los 5 minutos con mis amigas. Creo que estaban más nerviosas ellas que yo.

— Pasaron los 5 minutos! — gritó Joss levantándose de la cama de un salto.

— Para emoción! — dijo Lenny riéndose.

Fui hasta el baño agarre la prueba y la miré.

— ¿Cuándo es positivo? — les pregunté a las chicas, parándome en la puerta.

— Dos rayitas. — dijo Lenny, mirando en las instrucciones.

Levanté la vista y estaban todas mirándome expectantes.

— Voy...voy a ser...mamá.

— ¿Enserio? — dijo Joss toda emocionada, acercándose a abrazarme.

— Bienvenida al club. — dijo Ele sonriéndome y abrazándome al igual que el resto de las chicas.

Fuimos a la cocina y nos sentamos a charlar y a hablar de cuando se lo diría a Liam. No podía creer que íbamos a ser papas.

Decidí que primero iría al médico a hacerme los estudios y después vería cuando se lo diría al futuro padre.