Capítulo 1 - ¿Quiénes son esas doncellas?

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Notas: holi, estoy participando en un evento para el cumple de Lan Xichen. Comienza hoy. Serán tres capítulos cortos llenos de humor, creo y con final feliz. Y ah sí, es post canon. Y sí, Yao es mujer y el Daddy es Mommy jsjsjs.

Prompt: Caza Nocturna.


Hide and Seek

¿Quiénes son esas doncellas?


El Joven Maestro de la secta Jin Lanling ha organizado un gran evento que se llevará a cabo en las zonas aledañas de la Torre Koi. Dura una semana entera. La razón: se busca de comprobar la destreza de las nuevas generaciones que suplirán a los líderes actuales. Debido a eso, se ha hecho el comunicado para que todas las sectas sean partícipes en la competencia, llevando a sus mejores discípulos y así, el más competente, salga victorioso en dicho acaecimiento.

Sectas grandes y pequeñas se han unido a la causa con la emoción de la competencia bullendo ansiosamente en el interior.

No es una convocatoria obligatoria. La secta Jin Lanling no es como lo fueron alguna vez los Wen en el pasado, pero se espera la asistencia de las 3 grandes sectas restantes y sus líderes.

Ha transcurrido aproximadamente tres años de la muerte de Jin Guangyao, y no se le ven ánimos al líder de la secta Gusu Lan por salir de su reclusión. Los esfuerzos de sus allegados han caído en saco roto, perdiéndose en la inmensidad de su melancolía y soledad.

Sin embargo, esta vez es diferente.

Con la paciencia agotada y el ánimo bullendo en enojo, Lan Qiren, una semana antes del evento, irrumpió la calma autoimpuesta del Hanshi, trayendo consigo todo un vendaval de emociones que a Lan Xichen no le agradó.

Por supuesto, tampoco le agradó lo siguiente que Lan Qiren dijo a continuación:

—Tres años es más de lo que se debe tolerar —dice, sin inflexión. No hay piedad en su modular, pero no es algo que moleste particularmente a Lan Xichen.

Sus ojos pardos opacos, sin vida, contemplan a Lan Qiren, ajeno a su desazón.

Lan Qiren frunce el ceño. Al instante tras él, en el umbral, se materializa un silencioso Lan WangJi. Parece que sus intentos por detenerlo han resultado ser infructuosos. Sus cejas están fruncidas, muy parecidas a las de su tío.

—Esto debe acabar; este luto... —calla, parece que se muerde la lengua para evitar decir algo que avive la ira de Lan Xichen—. Tienes un deber como líder. Presentarte a los eventos—

—Absurdo, debo acotar —interrumpe a Lan Qiren. Sabe que ha roto una regla, pero Lan Xichen no puede aceptar un evento así luego de lo sucedido en el Templo Guanyin.

Lan Qiren enrojece de la ira y en ese momento Lan WangJi abre la boca, pero nada sale. Parece que se ha quedado sin palabras, o quizás está buscando una forma de intervenir sin que se considere inadecuado. De todas formas, quien suele sosegar el ambiente es Lan Xichen, y él no está muy dispuesto a hacerlo. No cuando lo obligan a salir de su zona de confort, a realizar cosas que no está dispuesto a hacer por voluntad propia.

—La cuarta década se está cerniendo sobre tus hombros, A-Huan, ¿no puedes comprenderlo? —inquiere en voz baja, su tono sigue siendo inflexible y eso aumenta la molestia en Lan Xichen—. Ya no serás joven. No te impido que le guardes luto. Tu corazón puede seguirle llorando si así es tu deseo, pero debes ir a ese evento, y hacer lo que un líder, debe hacer.

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