Llegada a Wammy's House (Near y tu) EDITANDO

Capítulo 6

Dos días después...

(L)

Hoy sería el día de irnos, nos asignaron un caso en España así que teníamos que irnos en la noche, si bien ___(t/n) sabía de la situación y se mostraba alegre observaba en su mirada tristeza, la entiendo, yo me sentía igual.

Ya les habían dado los resultados de los exámenes, ___(t/n) quedó en la clase especial junto con otros dos niños, en algún momento los  tengo que conocer, pero por lo que me dijo Watari son buenos niños.
Llegó la tarde y ya estaba todo listo para nuestro viaje, ___(t/n) estaba en artes marciales así que todavía no había vuelto. Watari y yo la esperábamos para despedirnos, todavía me duele irme pero el deber me llama y no puedo dejarlo de lado.

Después de un rato escuché la puerta abriéndose.
-¡YA LLEGUÉ!
- Hola enana - le puse una mano en la cabeza.
- Algún día voy a crecer...
- Pero yo seguiré siendo más alto que tu.
- Ya lo veremos hermanito.
Y en ese momento llegó Watari con las últimas maletas para irnos.
- ¿Ya están listos?
- Si mí niña, Roger vendrá todos los días a ver cómo estás. Te di un celular para que lo llames cualquier cosa, nosotros te llamaremos.
- Lo se papá, cuídense mucho- nos dio un abrazo y podía notar que se estaba controlando para no llorar - los voy a extrañar...
- Nosotros también, cuídate mucho enana - le di un beso en la cabeza y me dirigí a la puerta, sentía una opresión en el pecho, nunca pensé tener afecto por nadie más que por Watari, pero se puede decir que tenía una familia por la que regresar.....

(Tu)

Ya se habían ido, mí familia ya había partido, si bien estaba consiente no pude evitar llorar una vez que se fueron. Los amaba mucho, espero que puedan volver pronto.
Estaba sola en la sala y tenía hambre así que fui a la cocina y vi que la heladera estaba llena, había una nota en la tarta de fresa.

Solamente por ser mí hermana te dejo una tarta entera para ti, pero cuando vuelva no te voy a compartir...
Elle
PD: si voy a compartirte, te quiero mucho...

Tenia una sonrisa en el rostro, este chico no cambia más. Comí la tarta y me fui a mí habitación, pasé toda la noche practicando ya que era finde semana, había avanzado bastante y sin darme cuenta ya eran las 4 am, me acosté en mi cama y me dormí al instante.

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Me despertó el sonido de la puerta, estaba cansada no quería ver a nadie pero supongo que debe ser Roger. Fui a abrir la puerta y ahí estaba mí cuidador.
- Buen día ___(t/n) ¿estabas dormida?
- Hola Roger, si, no dormí bien anoche.
- Descansa que hoy que es sábado, podes salir al patio y a dar una vuelta,  pero acordate que hay que volver a las habitaciones a las 7 pm.
- Lo se Roger, igual gracias, ¿Sabes algo de mí padre y L?
- No hay llamado todavía, supongo que ya deben haber llegado.
- Buenos gracias, te mantengo al tanto Roger.

Cerré puerta y me fijé en la hora, las 10 am, supongo que iré a desayunar, de todas maneras no tengo a mí hermano para jugar.
Me vestí y me fui a la sala común, se veía a varios chicos, algunos desayunando y otros hablando, busque mí desayuno y me senté en una mesa algo apartada para leer un libro. Por ahora estaba todo tranquilo, y luego sentí a unas niñas acercarse a mí. Al principio no les di importancia, pero luego se sentaron en mi mesa y me quitaron mí libro para que las viera.
- ¿ Tu eres Elizabeth no?- decía una niña rubia, parecía tener mí edad.
- Si soy yo...¿Me puedes devolver mí libro?
- ¿Crees que por ser inteligente y estar en la lista de sucesores de L te dan el derecho de ser arrogante?
- No me creo ser nadie, pero esto ya comienza ser una molestia,¿ me devuelves lo mío porfavor?
- Déjame pensarlo, no - y se lo arrojó a una niña castaña un poco más alta que yo.
-¿ Se creen que les seguiré el juego?- y sin darme cuenta me estamparon mí tarta de fresa en mi cara. Esto ya es demasiado.
- ¿Que vas a hacer al respecto? Eres una niña que nadie la quiere- dijo la rubia, estaba sintiendo mí energía en mis manos, en cualquier momento explotaría.

De pronto vi a alguien atrás de la niña castaña y le arrebató el libro, no pude ver mucho por la tarta pero si reconocí la voz.
- ¿Ustedes se creen diferentes?, Por lo menos ella tiene gente que la apoya- era Mello.
- Nosotros la cuidaremos- apareció Matt junto a Mello.
- Ahora váyanse antes de que me olvidé de que son unas niñas.
Las niñas se fueron, no sin antes dedicarme una mirada de odio.
- Quédate quieta,  te voy a limpiar - sentí una servilleta en mi rostro y pude ver a Mello.
- Gracias chicos...
- Siempre estaremos para ti, somos amigos ¿recuerdas?- dijo Matt con una sonrisa.
- Creo que voy a limpiarme esto.
- ¿Quieres pasar el día con Matt y conmigo? Vamos a tener un día de videojuegos.
- Sería genial, nunca jugué a un juego.
- Tendrás el honor de que sea tu maestro- dijo Matt con un tono egocéntrico.
- jajajajaja no puedo esperar.
- Te esperamos en nuestra habitación.
- Claro.

Después de limpiarme y cambiarme de ropa escuché que sonaba el teléfono, lo busque rápidamente y vi que era mí padre.
- Hola papá, ¿Cómo están?
- Hola mi niña, estamos bien, llegamos esta mañana.
-¿ Elle está por ahí?
- Si aquí está conmigo ahí te lo paso.
- Hola enana...
- Hola hermanito, ¿Como estás?
- Estoy bien, con ganas de comer tarta...
- jajajaja nunca cambias.
- Ya sabés cómo soy, ¿que estuviste haciendo?
- Estaba en la sala común, me encontré con Mello y Matt, ahora voy a jugar un rato con ellos.
- Está bien, diviértete con ellos pero que no hagan nada raro o se las verán conmigo.
- Está bien, cuídense mucho, ¿Cuando van a volver a llamarme?
- No lo sabemos, pero estate atenta al teléfono.
- Está bien, cuídense mucho, los quiero.
- También te queremos enana, cuídate mucho.

Elle colgó la llamada, me quedo tranquila de que están bien, pero no niego que ya los extraño.
Pase el día con Mello y Matt, los dos con muy divertidos, me alegra de tenerlos como amigos, espero que nunca se acabe está amistad.