La Melodía Perfecta. ~YM~

La Melodia Perfecta; Capítulo 2

Mi nombre es Park Jimin, nací en Busan y tengo 19 años, estoy aquí porque quiero mejorar mi canto, también me gusta mucho bailar y a veces escribo canciones..bueno, cuando estoy un poco inspirado.-sonrió nervioso.-Espero llevarme bien con todos y que podamos aprender los uno de los otros, estoy feliz de estar aquí.-sonrió y bajo la cabeza avergonzado, llendo directamente a los asientos de atrás.-

¿Me habré visto muy tonto? Pensó. Jimin era un pastelito y un joven de gran corazón, cualquiera que lo conociera quedaba encantado con el, le gustaba mucho ayudar a la gente y hacer felices a los demás, pero por dentro a veces podía ser muy inseguro de sí mismo, aunque ya muchos le dijeran que es lo contrario a lo que el a veces puede pensar, a Jimin le costaba creer, pensaba que la gente le tenía pena..y eso a veces lo perjudicaba demasiado.

Todos en el salón quedaron contentos con su presentación, y no dejaban de pensar que era una cosita muy tierna, algo que a Jimin no le gusta mucho que piensen de él ya que es muy penoso, pero al menos eran opiniones buenas.

Jimin continuaba escuchando a los demás presentarse, hasta que algo, o mejor dicho alguien interrumpió la clase.

Miró hacia la ventana, un muchacho de piel pálida y ojos felinos robo por completo su atención, bueno, la de toda la clase. Al parecer había llegado tarde, Jimin pudo notar que el chico estaba algo nervioso, algo que Jimin también pudo notar es que el chico era increíblemente guapo.

Cuando el muchacho entró toda la clase quedó en silencio, Jimin sintió algo de pena, seguramente lo estaba pasando mal. Los que se encontraban en el salón empezaron a hablar sobre este chico, hasta que el profesor hizo que se callaran y le pidió al joven que se presente.

Jimin escucho atentamente a su presentación, que fue la más corta de todas.

"Min Yoongi" pensó, era un bonito nombre para un bonito chico. Se sonrojó al pensar eso. Aunque Jimin se sentía extraño..sentía que había escuchado ese nombre en algún lado, a pesar de que Yoongi se presentó frente a todos, para Jimin, su apariencia era un misterio, ya que en toda su presentación Yoongi mantuvo la cabeza baja y no pudo verlo con atención. Aunque al principio solo pudo verle los ojos.

Desde su llegada, Jimin no despegó la mirada de él, es como que había quedado flechado en el momento que vio sus ojos y escuchó su voz..que era más o menos ronca, tal vez había llegado tarde por quedarse dormido.

Y así se mantuvo Jimin toda esa tarde, nada más observando la espalda del Yoongi dormido de la clase, hasta que llegó la hora de salida y lo vió irse.

Jimin en su camino a casa estaba muy contento, sentía que la aparición de Yoongi era lo único bueno y interesante de su día, aunque el pálido ni se volteara o siquiera se enterara de su existencia cuando Jimin lo observaba siendo el único que quedaba en ese pequeño salón.